La Metafísica y la Epistemología en la Filosofía Clásica y Moderna
La metafísica se basa en distinguir la apariencia de la realidad y analizar los diferentes planos de esta.
Platón: Ontología y Epistemología
Ontología de Platón: La Teoría de las Ideas
La ontología es la parte de la metafísica que estudia el ser. La teoría metafísica de Platón recibe el nombre de Teoría de las Ideas. Al concebir dos niveles de realidad diferentes:
- Mundo Sensible: Es el mundo de los sentidos, de las cosas particulares y empíricas.
- Mundo Suprasensible (Mundo de las Ideas): Es el mundo de las Ideas, de lo auténticamente verdadero.
Platón afirma que hay un abismo separador entre la realidad del mundo sensible y el mundo inteligible. Sin embargo, la relación que se establece entre los dos mundos puede ser de dos formas:
- Participación: Las cosas sensibles son lo que son porque toman parte de las Ideas.
- Imitación (Mímesis): Las cosas imitarían a las Ideas de forma parecida a como un cuadro es una representación del mundo físico o sensible.
Esta relación entre el mundo sensible y el inteligible se denomina comunicación vertical. Existe además otro tipo de comunicación, la comunicación horizontal (es decir, la producida entre las propias Ideas).
Epistemología de Platón: El Símil de la Línea
La epistemología es la parte de la filosofía que estudia los fundamentos y métodos del conocimiento humano. Platón describe diferentes grados de conocimiento a través del Símil de la Línea:
- El grado más bajo de conocimiento es la Eikasía (o imaginación), en el que hay sombras de las cosas sensibles.
- El siguiente nivel es la Pistis (o fe, creencia), que se refiere al conocimiento de las cosas sensibles directamente.
- Ascendiendo un grado más, llevamos a cabo un salto cualitativo importante. Estamos en la Dianoia (o inteligencia discursiva), cuyo objeto de conocimiento son los entes matemáticos.
- El grado supremo es la Noesis (traducido normalmente por ciencia o intuición eidética), que es el conocimiento de las Ideas mismas.
Aristóteles: Metafísica y Teoría del Conocimiento
La metafísica de Aristóteles también es llamada por él «sabiduría» o «filosofía primera». Aristóteles le atribuye a la filosofía primera un carácter simplemente especulativo, sin ponerla en relación con la búsqueda de la felicidad o la vida virtuosa, como hacía Platón. En lugar de eso, habla de una «filosofía segunda» dedicada al estudio de la virtud y la felicidad, la ética. Aristóteles dedica mucho espacio de su Metafísica a la crítica de la teoría de las Ideas de Platón. La crítica de Aristóteles se centra en rechazar que la esencia de las cosas exista separada de ellas.
Hilemorfismo: La Materia y la Forma
Según Aristóteles, el hilemorfismo es la idea de que la realidad está compuesta de materia y forma:
- Forma: Es la esencia de la cosa y es eterna.
- Materia: Es, por ejemplo, el bronce o la madera. Es perceptible por los sentidos y admite cualquier forma.
Sustancia y Accidentes
Aristóteles observaba que tras los cambios de apariencia que afectan a casi todos los objetos permanece siempre algo inalterado. Eso que permanece idéntico e inalterado, el sustrato al que no le afectan los cambios, es la sustancia. Por ejemplo, el agua sigue siendo agua independientemente de su estado (sólido, líquido o gaseoso). La sustancia tiene entidad por sí misma, es el soporte real sobre el que descansan todas las demás cualidades cambiantes de las cosas. Estas cualidades cambiantes son los accidentes (el color, la dureza de un material, su forma, su temperatura, etc.).
Potencia y Acto
Para Aristóteles, la realidad se explica también a través de la potencia y el acto:
- Potencia: Capacidad de llegar a ser.
- Acto: Realización de la potencia.
Las Cuatro Causas
Según Aristóteles, todo lo que llega a ser tiene una causa. Distingue cuatro tipos de causas:
- Causa Material: Sustrato indeterminado que puede recibir cualquier forma (ej. la madera con la que está hecha una mesa).
- Causa Formal: Lo que hace que la materia indeterminada pase a ser algo determinado. Se identifica con la esencia y con la naturaleza (ej. la forma de la mesa).
- Causa Eficiente: Lo que provoca los movimientos, cambios o transformaciones (ej. el carpintero).
- Causa Final: Lo que da sentido a la acción del agente, el fin al que apunta el cambio (ej. utilizarla para apoyarse).
Descartes: Epistemología y Antropología
Descartes, en oposición al empirismo, se enmarca en el racionalismo, que mantiene una actitud de confianza absoluta en la razón.
La Duda Metódica y los Motivos de Duda
Este filósofo cree absolutamente necesario el establecimiento de una verdad universal, que sea absolutamente incuestionable y sobre la cual se puedan asentar las demás verdades. Con la duda metódica, Descartes pretende poner en cuestión todo lo aprendido. Los principales motivos de duda son:
- La información que nos aportan los sentidos.
- Podemos dudar acerca de nuestros razonamientos.
- La imposibilidad de distinguir la vigilia del sueño.
- La hipótesis de un Dios engañador.
- La posibilidad de que exista un genio maligno.
Solipsismo y la Salida del Problema: La Existencia de Dios
Del ejercicio de la duda, Descartes extrae la primera verdad que estaba buscando: «Cogito ergo sum» («Pienso, luego existo»). Puedo dudar de todo, pero en cuanto que dudo, puedo estar seguro de que estoy dudando. Descartes monta su teoría metafísica, cuyo centro será el concepto de sustancia.
El filósofo considera que existen tres tipos de sustancias:
- «Res cogitans» (o sustancia pensante), que denomina «alma». La define, como hemos visto antes en su máxima «pienso, luego existo», como la «cosa» que duda, que piensa, que imagina.
- «Res extensa» (o sustancia extensa), que también denomina «cuerpo».
- Una sustancia infinita (Dios).
Por tanto, con respecto a la existencia de Dios, Descartes llega a cuatro conclusiones:
- Dios es garantía de evidencia.
- Dios es garantía de la existencia de las cosas en el mundo.
- Es imposible que Dios sea engañador.
- Dios es el primer motor que dota de movimiento a todo lo demás.
Antropología de Descartes
En el caso del hombre, como ya hemos explicado, Descartes nos dirá que el cuerpo forma parte del mundo y el yo equivale al alma, defendiendo así el dualismo antropológico.