Santo Tomás de Aquino: Filosofía Medieval y Renacentista
Nació en una familia noble en Italia, estudió en el monasterio benedictino de Montecassino y en la Universidad de Nápoles. Ingresó en la orden de los dominicos.
Filósofo y teólogo, sus obras le han convertido en la figura más importante de la filosofía escolástica y uno de los teólogos más sobresalientes del catolicismo.
Entre sus principales obras destacan De ente et essentia (sobre la distinción real entre esencia y existencia) y Summa Theologiae (demostración de la existencia de Dios a través de las ‘cinco vías’), entre otras.
Teoría Metafísica
Santo Tomás expone en su metafísica que la realidad se halla estructurada por las diferencias entre Dios, que es el Ser Necesario, y el resto de criaturas, que son seres contingentes. Las realidades creadas están compuestas de esencia y existencia, mientras que en el Ser Necesario, Dios, esencia y existencia se identifican.
No admite que todas las cosas estén compuestas de materia y forma, ya que admite la existencia de formas inmateriales.
Como creyente y filósofo, buscó un fundamento racional a la existencia de Dios, para ello partió de dos cuestiones previas. La primera responde a la necesidad de demostrar la existencia de Dios. Para ello distingue dos tipos de verdades: las evidentes en sí mismas y para nosotros (El todo es mayor que las partes) y las que, siendo evidentes en sí mismas, no lo son para nosotros (Dios existe), por lo que es necesario demostrarla. La segunda cuestión hace referencia a la posibilidad de demostrar la existencia de Dios: él está convencido de que sí es posible, pero esta demostración se remonta a partir de los seres que existen en el mundo natural hasta llegar a la causa que los originó.
La estructura de las cinco vías tomistas que conducen a la demostración de Dios es similar, ya que en ellas se constata un hecho del que se tiene experiencia; después se aplica el principio de causalidad; a continuación, se pone de manifiesto la imposibilidad de una serie infinita de causas, lo que conduce a Dios.
Las cinco vías son:
- La primera vía defiende que el movimiento en la naturaleza demuestra la existencia de un primer motor inmóvil.
- La segunda, que toda la serie de causas causadas tienen que tener una Causa Incausada u origen de todo.
- En la tercera, los seres contingentes dice que lo son porque existen y dejan de existir; tiene que haber un Ser Necesario por sí y que no pueda no existir.
- La cuarta defiende que, como hay seres con distintos grados de perfección, tiene que haber un origen del que procedan que sea un Ser Perfecto.
- La quinta vía expone que el mundo natural que podemos descubrir, posee un orden y una armonía que solo puede proceder de una Inteligencia Ordenadora.
Teoría Política
La política está basada en Aristóteles, pero con un complemento teológico donde se plantean las relaciones Iglesia-Estado.
El Estado es una institución natural, basada en la naturaleza del hombre, que es ante todo un ser social. Es una sociedad perfecta que tiene todos los medios para conseguir el bien común de todos los ciudadanos. El fin de la Iglesia es sobrenatural, más elevado que el del Estado, por eso este debe estar supeditado a la Iglesia.
Al ser la sociedad natural, también lo es el gobierno. Si el cuerpo se desintegra si falta el alma, también el grupo social se desintegra si le falta un principio que unifique (gobierno). El individuo (hombre) es la parte, está subordinado al todo, el Estado. El ciudadano se ordena a la comunidad.
La soberanía del Estado está limitada: por la ley natural, por el bien común (hay que obedecer a Dios antes que a los hombres, y si una ley va contra el bien común habrá que desobedecerla), y por la autoridad que viene dada por Dios al Pueblo, y este la delega en el Gobernante.
Distingue entre las formas de gobierno buenas (la democracia observante de la ley, Aristocracia y Monarquía) y las malas (democracia demagógica, Oligarquía y Tiranía). La Tiranía es la peor, y la mejor la monarquía, especialmente en su forma mixta en la que el poder del monarca sea moderado por los magistrados elegidos por el pueblo.
Teoría Antropológica
Acepta la concepción hilemórfica del hombre: cuerpo y alma, como elementos que forman parte de una única sustancia que es el hombre.
Al morir, el cuerpo deja de estar informado por el alma y se corrompe. En lugar de sustancia humana, quedan multiplicidad de sustancias materiales.
Considera el alma inmortal (subsistente), es decir, puede existir sin necesidad del cuerpo, pero solo en el hombre.
El entendimiento y el alma son inmateriales.
Existe una unión sustancial entre cuerpo y alma.
La atadura del entendimiento humano a órganos sensoriales implica que el conocimiento intelectual comienza con el conocimiento sensible.
Se aleja de la teoría platónica, ya que no solo el alma, sino también el cuerpo pertenece a la esencia del hombre. El mismo ser que razona es el que crece, siente…
El alma puede ejercer la sensación, pero para eso necesita del cuerpo.
El alma es incorruptible y espiritual, pues puede conocer todas las realidades, la esencia del ser, y reflexionar sobre sí misma.
Teoría Ética
Acepta el principio de que la felicidad es el fin último del hombre, y de que consiste en una actividad intelectual. En contra de San Agustín, considera que la felicidad se halla en el conocimiento.
Las normas morales se basan en la naturaleza humana; conocerla es, por tanto, clave para la formulación de una Ley Moral Natural.
Desarrolla una concepción finalista, eudemonista y teleológica de la naturaleza humana: ‘fin a cuyo cumplimiento tiende todo ser humano’.
Es una ética trascendente porque parte de Dios y se orienta a Dios. En esta teoría, la existencia de la ley natural queda demostrada, ya que el hombre experimenta tendencias, pero al tener racionalidad, puede conocer sus propias tendencias y deducir de ellas ciertas normas de conducta (conservar su propia existencia, procrear, conocer la verdad y vivir en sociedad).
Sus propiedades son que, al ser un reflejo de la naturaleza humana, su contenido ha de ser evidente, universal e inmutable, y debe permanecer constante a pesar de los cambios históricos.
Los tipos de ley son: la ley positiva, esta escrita en los códigos y aceptada por un grupo social; en ella, la justicia es el fundamento del derecho y es una exigencia ética y natural a la vez. La ley natural representa el fundamento teológico-religioso del sistema tomista. La Ley Eterna es la rectora de todos los actos y movimientos, y en objetos y seres del universo se concreta mediante leyes físicas y mecanicistas. En el caso del ser humano, deja espacio para que actúe libremente con ayuda de la razón.
Teoría del Conocimiento
Santo Tomás hace un análisis detallado de cómo llega el entendimiento a formular conceptos universales a partir del conocimiento sensible. El análisis comienza diciendo que las percepciones son concretas, mientras que los conceptos son universales; ya que cuando se define al hombre como un animal inteligente, no se refiere a ninguno en particular, sino a todos los seres humanos.
Concluye afirmando que el entendimiento tiene la capacidad de extraer conceptos a partir de datos concretos suministrados por el conocimiento sensible. Mediante un proceso de abstracción o Entendimiento Agente, puede conocer universalmente, o Entendimiento Posible como consecuencia de la generalización.
El objeto del entendimiento es lo inteligible: lo que está más allá de los sentidos, lo metafísico.
Explica además que a Dios podemos conocerlo, a pesar de no tener ‘fantasma’ de él, porque los objetos contingentes revelan su relación y, por tanto, su existencia.