Ramas Fundamentales de la Antropología
Antropología Científica
Ciencia que estudia al ser humano como entidad biológica dentro de la naturaleza (biología).
Antropología Cultural
Estudia al ser humano en su contexto cultural, analizando costumbres, mitos y tradiciones.
Antropología Filosófica
Busca descubrir la esencia del ser humano desde una perspectiva filosófica.
La Naturaleza del Ser Humano: Una Dimensión Ontológica
El ser humano es considerado una forma universal, una entidad que es. La Ontología es la rama filosófica, con raíces en Aristóteles, que estudia el Ser en general. Todas las cosas que vemos y tocamos existen, son; el Ser no puede analizarse sin antes comprender las cosas del ser. Todas las cosas son, lo que implica que todas las cosas tienen que ser entes. Es la ciencia más universal de todas.
El Dualismo: Dos Realidades
El Dualismo postula la existencia de dos realidades diferentes, antagónicas e independientes, que dan origen al mundo: la realidad material y la espiritual.
Dualismo Antropológico Fuerte: Platón
El Dualismo Antropológico Fuerte, defendido por Platón, divide al ser humano en dos entidades principales:
Alma: Posee mayor peso y es la sede de la razón. Es invisible, divina, pertenece al mundo de las ideas, es inmortal y debe regir al cuerpo.
Cuerpo: Debe obedecer y ser mandado. Es la “cárcel del alma”, sensible y material. No posee verdad propia; todo lo que vemos y sentimos son imágenes imperfectas de las ideas.
Para Platón, la filosofía es ontología, es decir, el saber sobre la realidad, que se compone de dos sustancias o mundos:
Mundo Sensible: El mundo de nuestros sentidos y sentimientos, donde nada es permanente. Corresponde al cuerpo físico.
Mundo Inteligible o Mundo de las Ideas: No físico ni sensible, formado por ideas perfectas. Se accede a él a través de la inteligencia. Las ideas inteligibles son la verdad, inmortales, perfectas y el fundamento del mundo sensible.
Partes del Alma (no materiales):
Racional (razón): Noble y elevado. Su actividad principal es contemplar las ideas y guiar y dirigir las otras dos partes. Se sitúa en el cerebro y es inmortal.
Irascible (ánimo): Fácil de conducir. Simboliza el valor, la fortaleza y la voluntad, así como las pasiones o tendencias nobles del ser humano. Se sitúa en el tórax y es mortal.
Concupiscible (apetito): Difícil de guiar. Simboliza los deseos y las posesiones, siendo la fuente de apetitos groseros, sexuales e instintivos que arrastran al placer. Se sitúa en el abdomen y es mortal.
El Dualismo Cartesiano: Mente y Cuerpo
René Descartes, considerado el padre de la filosofía moderna, propuso un nuevo paradigma basado en la Mecánica Clásica. Defendió un dualismo antropológico que, aunque no sigue una ontología tradicional, se centra en la Epistemología: cómo llegar al conocimiento científico a través de un método racional. Su concepción dual del ser humano postula dos sustancias independientes:
Alma (Mente): Es la razón, y su característica primordial es el pensamiento.
Cuerpo: Su característica es la extensión.
Descartes dudará de todas las ideas que no se presenten al intelecto (razón) de forma clara y distinta, lo que le lleva a la duda metódica: dudar de todo es el camino para no dudar. Con esto, inicia el Racionalismo, que otorga a la razón una importancia absoluta en la búsqueda de todo conocimiento verdadero. Al dudar, hay una cosa de la que no se puede dudar: que se está dudando y pensando. Esa cosa que piensa existe: «Pienso, luego existo» (Cogito, ergo sum).
Dualismo Antropológico Débil: Aristóteles y el Hilemorfismo
El Dualismo Antropológico Débil, propuesto por Aristóteles, sostiene que todas las sustancias naturales están compuestas de materia y forma, una teoría conocida como Hilemorfismo. En este contexto, el alma es la forma del cuerpo. Aristóteles distingue tres tipos de alma, cada una con sus propias funciones y seres que la poseen:
Tipo de Alma: Alma Racional
- Seres que la poseen: Seres humanos
- Actividad Propia (Funciones): Voluntad, intelecto o entendimiento.
Tipo de Alma: Alma Sensitiva
- Seres que la poseen: Seres humanos, animales.
- Actividad Propia (Funciones): Conocimiento sensible, apetito inferior (deseo sexual o ganas de comer), movimiento local.
Tipo de Alma: Alma Vegetativa
- Seres que la poseen: Seres humanos, animales, vegetales o plantas.
- Actividad Propia (Funciones): Actividades vitales básicas (respiración, reproducción, crecimiento, nutrición).
La Concepción del Ser Humano en Karl Marx: Trabajo y Alienación
Para Karl Marx, el sujeto de la historia es el hombre concreto, de carne y hueso, que busca realizarse a través de su trabajo. El ser humano se define por el trabajo productivo de bienes materiales, siendo un Ser Productivo. A través del trabajo, nos humanizamos y, al mismo tiempo, nos perfeccionamos. Sin embargo, en el sistema capitalista, el trabajo puede generar frustración, tristeza y desazón.
Tipos de Alienación según Marx
Marx identificó varios tipos de alienación, especialmente en el contexto del capitalismo:
Alienación del Producto: Bajo el capitalismo, el objeto o producto del trabajo se enfrenta al trabajador como un ser extraño, convirtiéndose en una desposesión para él.
Alienación de la Propia Actividad Productiva: Es la enajenación del propio trabajo. Marx critica que, al ser el trabajo propiedad de otro (más poderoso), la actividad productiva se vuelve extraña para el trabajador. El trabajo es solo un medio para vivir, en lugar de satisfacer sus necesidades, lo que lleva a la desrealización.
Alienación de la Vida (del Género Humano): El ser humano es capaz de trabajar solidariamente para y con los demás; sin embargo, en el capitalismo, cada uno trabaja según sus necesidades individuales, lo que conduce a la deshumanización.
Alienación Religiosa: La religión, según Marx, ahoga la libertad y genera una dependencia de Dios, cegando al individuo ante la verdadera raíz de sus problemas, que provienen de la injusticia y la explotación del capitalismo. La religión es el “opio del pueblo” porque distrae de la realidad material y social.
Immanuel Kant y las Preguntas Fundamentales de la Filosofía
Immanuel Kant, figura central de la Ilustración, enfatizó el papel de la Razón. Su filosofía se sitúa en la confluencia del Racionalismo (que destaca la capacidad humana de la razón) y el Empirismo (que sostiene que el conocimiento proviene de la experiencia, a menudo a través de la creencia, no del saber absoluto). Kant formuló cuatro preguntas filosóficas fundamentales que resumen su proyecto crítico:
¿Qué puedo saber? (Epistemología, teoría del conocimiento)
¿Qué debo hacer? (Religión y moral)
¿Qué me cabe esperar? (Religión, historia y política, el deber)
¿Qué es el hombre? (Antropología, la pregunta que engloba a las anteriores)
El Personalismo: La Persona como Centro
El Personalismo es una corriente filosófica que pone a la persona en el centro, destacando sus características esenciales:
Existencia Encarnada: La persona existe en “carne y hueso”, es decir, como un ser concreto y corpóreo.
Comunicación: Implica salir de uno mismo para adoptar el punto de vista del otro, estableciendo un diálogo.
Compromiso: La persona se identifica a través de los compromisos que adquiere. La acción personal es un rechazo a la abstención, la neutralidad y la indiferencia, definiendo así a la persona.
Capacidad Crítica: Ser persona implica ser capaz de decir “no”, de ejercer un juicio crítico.
Eminente Dignidad: La persona posee una dignidad intrínseca y superior en el conjunto de los seres.
Proximidad: Consiste en donar algo del propio ser al otro, especialmente cuando este lo necesita.
Amistad: Implica querer el bien de la otra persona, ayudarla a ser lo que debe ser y compartir intimidad, valorándola por quien es.
El Psicoanálisis de Sigmund Freud: El Aparato Psíquico
El Psicoanálisis, desarrollado por Sigmund Freud, propone una estructura del aparato psíquico para comprender la mente humana. Freud aborda preguntas fundamentales sobre qué hay en la mente, cómo es, cómo actúa y cómo se conoce, a través de sus conceptos de Ello, Yo y Superyó:
Ello:
- Contenido: Pulsiones agresivas y sexuales, todo lo reprimido a lo largo de la vida.
- Características: Amoral, atemporal e irracional.
- Principio Rector: Principio de placer (búsqueda de satisfacción directa e inmediata de los deseos).
- Manifestaciones: Sueños, fantasías y actos fallidos.
Yo:
- Contenido: Todo aquello de lo que somos conscientes o podemos llegar a serlo.
- Características: Racional, prudente y equilibrado.
- Principio Rector: Principio de realidad (autoconservación, evitando peligros para el yo).
Superyó:
- Contenido: Las normas morales y sociales internalizadas.
- Características: Utópico e idealista.
- Principio Rector: Principio del deber (búsqueda de la perfección moral).