chuletas

2.1 CRÍTICA A LA MORAL


Según Nietzsche el dogmatismo moral consiste en creer en la objetividad y universalidad de los valores morales. La moral tradicional se equivoca porque los valores morales no tienen una existencia objetiva en un mundo objetivo, sino que lo crean las personas y las proyecciones de su subjetividad, sentimiento e intereses, existen pq los llevamos a cabo. La moral tradicional creyó tmb que las leyes morales valen para todos los hombres. Así lo indicaba el imperativo categórico Kantiano y la consideración tomista de la ley moral como consecuencia de la ley eterna. N, considera que si los valores existiesen en un mundo verdadero y objetivo podríamos pensar en su universalidad pero no existe este mundo, los valores se crean y se cambian con el tiempo y con cada cultura, por tanto no son universales. La moral tradicional, es antivital, antinatural, porque presenta leyes que van en contra de las tendencias primordiales de la vida, es una moral de resentimiento contra los instintos y el mundo biológico como se ve por ejemplo en la obsesión de la moral occidental por limitar el el papel de la sexualidad

El dogmatismo moral implica también la idea del pecado, de culpa y de la libertad. La idea de

pecado, es una de las ideas más enfermizas inventadas por la cultura occidental: el sujeto sufre porque se cree valorado por un Dios inexistente del que incluso espera un castigo. Además, el cristianismo tiene necesidad de la noción de libertad porque las personas tienen que ser libres para poder castigarlas. Los valores tradicionales son los de la moral de esclavos y frente a ellos Nietzsche propone la moral de los señores, los valores del superhombre y la afirmación de la vida. Según él: «mi principio: no se dan principios morales»

2.2 CRÍTICA A LA RELIGIÓN CRISTIANA

1. La «metafísica cristiana» El cristianismo es «platonismo para el pueblo”, comparte el espíritu

que anima a Platón, la incapacidad  para aceptar todas las dimensiones de la existencia y el afán de encontrar un consuelo fuera de este mundo; de ahí su distinción entre un mundo verdadero, eterno e inmutable y un mundo aparente, cambiante, el mundo del espíritu frente al mundo de la corporeidad.

2.La moral cristiana: El cristianismo fomenta los valores propios de lo que Nietzsche denomina

moral de esclavos (sometimiento, debilidad), y añade los valores mezquinos (obediencia,sacrificio) sentimientos propios del rebaño; es la moral vulgar del resentimiento contra lo noble, es la destrucción de los valores del mundo antiguo. Otra de las ideas más enfermizas del cristianismo es la de culpabilidad o pecado, de la que solo se puede huir con la afirmación de la «inocencia del devenir» y con una conducta situada «más allá del bien y del mal».

3.Influencia perversa del cristianismo:


todo el pensamiento occidental queda viciado por su punto de vista, es el corruptor de la filosofía europea

4.Valoración de Jesús:


Nietzsche no valora tan negativamente la figura de Jesús, al que considera un revolucionario, ni la del cristianismo primitivo pues piensa que el llamado cristianismo debe más a San Pablo

5.Politeísmo frente a monoteísmo:


aunque todas las religiones son falsas, unas son más adecuadas que otras. El monoteísmo representa el invento de otro mundo, la desvalorización de la vida; el Dios cristiano representa valores negativos. Frente a él, el politeísmo, aunque es falso,representa la fidelidad a la naturaleza. La superación del cristianismo y la «muerte de Dios» es fundamental para que se produzca la trasmutación de todos los valores.

2.3 CRÍTICA A LA FILOSOFÍA TRADICIONAL

La filosofía presenta una idea del mundo totalmente inadecuada, por considerar al mundo como un cosmos y no como un caos y por creer en la racionalidad. La invención del mundo racional trae consigo la invención de los conceptos básicos de la metafísica tradicional (esencia, sustancia, alma, Dios); son puras ficciones consecuencia del poder de la razón. La filosofía tradicional comienza con Platón, que se inventa un mundo ideal al que contrapone, desvalorizándolo, el mundo de los sentidos. La filosofía posterior acepta este esquema. La metafísica platónica y toda la occidental es un síntoma de resentimiento ante el mundo existente, del miedo al caos. En general la filosofía ha creído que los conceptos pueden reflejar la realidad y son capaces de representar las relaciones entre las cosas.

Consideraba que entender una realidad es darle un concepto. Para Nietzsche, el pensamiento conceptual no es un buen recurso para expresar la realidad porque la misma palabra no puede servir para referirnos a dos cosas distintas. Según él, la metáfora es el mejor modo de expresar la realidad y el arte es un medio más adecuado de expresar el mundo que la filosofía.

Nietzsche afirma el carácter irracional del mundo, considera que, aunque la filosofía tradicional creyó que se puede tener un conocimiento objetivo del mundo, es una fantasía. El conocimiento es relativo, subjetivo, depende de la perspectiva vital del individuo que lo crea. Frente a Platón, Aristóteles y gran parte de la tradición filosófica defiende una tesis contraria al objetivismo y conecta con el relativismo, escepticismo y subjetivismo, defendiendo el perspectivismo, para el que todo conocimiento se alcanza desde un punto de vista. Las carácterísticas del sujeto que conoce (psicológicas, sociales, físicas, personales) hacen imposible superar la propia perspectiva, no podemos desprendernos de nuestra subjetividad cuando intentamos conocer la realidad. Según Nietzsche una verdad es verdadera por su valor pragmático, no hay hechos, sino interpretaciones o perspectivas, son valoraciones hechas por la voluntad de poder.

3. Nihilismo, VOLUNTAD DE PODER Y EL SUPERHOMBRE

3.1. LA VOLUNTAD DE PODER

La voluntad de poder es para Nietzsche el principio básico a partir del cual se desarrollan todos los seres. La fuerza primordial que busca ser y ser aún más. Nietzsche cree que en todas las cosas hay un afán por la existencia por existir siendo más. La voluntad de poder tiene para él las siguientes carácterísticas:

-Irracionalidad:

en el hombre la razón está al servicio de otras instancias más básicas como los instintos o las emociones.

-Inconsciencia:

la fuerza primordial que determina el curso de las cosas no esconsciente.

-Falta de finalidad:

las fuerzas de vida no tienen ningún objetivo o fin, no hay nada interior que le marque un destino, con ello declara el carácter gratuito de la existencia.

-Impersonalidad:

esta fuerza no puede identificarse con un ser personal sino con un cúmulo de fuerzas que buscan la existencia.

La voluntad de poder para él se identifica con cualquier fuerza, inorgánica, orgánica o psicológica que tiende a su autoafirmación, es voluntad de ser más, más, fondo primordial de la existencia y la vida.

Unida a ella Nietzsche introduce el tema del eterno retorno. Según él no hay más mundo que este, por tanto, hay que permanecer fieles a la tierra y el eterno retorno es la fórmula suprema del sí a la vida y al mundo que pronuncia la voluntad de poder.

Simboliza que este mundo es el único mundo y por tanto todo debe repetirse. Nietzsche presenta a Zaratustra como el profeta del eterno retorno, el que desea  que nada sea distinto ni en el pasado, ni en el futuro. En este sentido la filosofía de Nietzsche que es considerada como negativa y destructiva, es afirmativa porque dice sí a la vida.

3.2. EL Nihilismo Y SUS FORMAS

Nietzsche afirma que «Dios ha muerto». Esta frase lo que indica no es que Dios haya existido y después haya muerto, sino que señala que la creencia en Dios ha muerto.

Los principales aspectos de esta concepción son los siguientes:

-Dios no crea al hombre, sino que el hombre creó a Dios.

-La creencia en Dios sirve para dar consuelo a los hombres de la miseria y sufrimiento que hay en este mundo, es una consecuencia de la vida decadente donde Dios es un refugio para los que no pueden aceptar la vida.

-Con la «muerte de Dios», considera que estamos ante un acontecimiento actual, en un tiempo histórico clave en el que observamos la necesidad de su final.

-Con el «concepto de Dios» se refiere al Dios cristiano, pero también a todo aquello que puede sustituirle como la Verdad, el Bien, la Ciencia, es decir, todo aquello que sirve a los hombres para dar un un sentido a la vida pero que está fuera de ella.

-Como consecuencia de esta muerte, de vivir sin lo absoluto, en la «inocencia del devenir», se darán las condiciones para la aparición del superhombre.

Con esto anuncia la llegada del Nihilismo, movimiento histórico de la cultura occidental y que se puede dividir en varios momentos:

1.Nihilismo como decadencia vital:


es el momento de la destrucción de los valores vigentes, de la duda, la desorientación

2.Nihilismo activo:


es también nihilista la filosofía que intenta mostrar cómo los valores dominantes son una pura nada, una invención. Nietzsche es nihilista en este sentido porque propone la destrucción completa de todos los valores vigentes y su sustitución por otros radicalmente nuevos. Este Nihilismo es una fase necesaria para la aparición de un nuevo momento en la historia de la cultura, de una nueva moral y de un nuevo hombre.

3.Nihilismo pasivo:


es una de las consecuencias de la «muerte de Dios”. Con la «muerte de Dios» sobreviene la crisis y el convencimiento de que la existencia no tiene sentido. El «Nihilista pasivo» no cree en ningún valor y termina en la desesperación o la renuncia.

3.3. LA TRANSVALORACIÓN MORAL Y EL IDEAL DEL SUPERHOMBRE

La transmutación de todos los valores es, según Nietzsche, un momento necesario para el final de la moral tradicional (moral de esclavos) y la aparición del superhombre. Nietzsche no propone vivir sin valores, sino invertir la tabla de valores: superar la moral occidental, moral de resentimiento hacia la vida, por una moral que dé un si a la vida. Llama «rebelión de los esclavos» al triunfo del cristianismo y del judaísmo que sustituye la moral aristocrática Nietzsche atribuye a los judíos la sustitución del código moral aristócrata o moral de señores (voluntad de desigualdad, amor a la diferencia, moral que crea valores), por la moral de esclavos (voluntad de igualdad, resentimiento contra la vida superior).

La transmutación de los valores es la superación de esta moral de esclavos para recuperar de nuevo la moral aristocrática que permite el triunfo del código moral del superhombre.

EI superhombre es el hombre nuevo que aparece tras «la muerte de Dios». Nietzsche lo concibe como el individuo fiel a los valores de la vida. Según él, tiene las siguientes carácterísticas:

1. Rechaza la moral de esclavos: La humildad,la prudencia,el servilismo, etc

2.Rechaza la conducta gregaria: Detesta la moral de rebaño de los que siguen a la

mayoría, de los que aceptan las normas morales ya establecidas.

3. Crea valores: Mientras que el superhombre inventa los valores manteniéndose fiel a la vida

4. Vive en la finitud: No cree en ninguna realidad transcendente, ni en Dios ni en otra vida

5. Le gusta el riesgo: Las nuevas experiencias, es duro consigo mismo y es valiente

6.Es contrario al igualitarismo: No tiene miedo a la diferencia, le gusta desarrollar lo que es propio

7. Ama la intensidad de la vida: La alegría, el amor sexual, la belleza corporal yespiritual

8. En conclusión:


el superhombre es la afirmación enérgica de la vida y el creador y dueño de sí mismo y de su vida; es un espíritu libre.

Así habló «Zaratustra», a través de una metáfora nos cuenta las tres transformaciones del espíritu:

-De cómo el espíritu se convierte en camello, éste en león, y el león en niño:

El camello representa el momento de la humanidad que sobreviene con el platonismo y que llega hasta finales de la modernidad. Su característica es la humildad, el sometimiento, el saber soportar con paciencia las pesadas cargas, la carga de la moral del resentimiento. El león representa al hombre crítico, Nihilista activo que destruye los valores establecidos, la cultura y estilo de vida occidental. El niño representa al hombre que inventa valores, que toma la vida como un juego, es el sí radical al mundo dionisíaco. Es la metáfora del hombre del futuro, del superhombre.

La interpretación de la figura del superhombre dada por Nietzsche ha dado lugar a distintas y peligrosas interpretaciones. Por un lado, se le interpretó como contrario al igualitarismo cristiano, pero también al socialista, como creador de una moral de violencia y como reivindicador de la superioridad de los pueblos germánicos. Sin embargo, hay quien considera que manifestó expresamente su hostilidad hacia la cultura alemana y hacia el Estado y que el superhombre no se puede identificar con una clase social o con una raza.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *