La Filosofía de Kant: Razón, Conocimiento y Ética Trascendental

1. Sentido de una Crítica de la Razón: La Filosofía para Kant

Kant es considerado como un teórico del conocimiento. Sin embargo, esta interpretación puede llevar a una visión superficial de su importancia. Hay que tener en cuenta que el pensamiento kantiano surge por la situación específica en que se encontraba la filosofía y la sociedad de su tiempo, y por una exigencia de clarificación del hombre y la sociedad en el contexto histórico-social de la Ilustración. En su época, coexistían el dogmatismo racionalista, que consideraba que solo la razón podía interpretar la realidad; por otro lado, el positivismo empirista, que reducía el pensamiento a lo conocido por los sentidos; y, por último, el irracionalismo, entendido como hipervaloración del sentimiento o de la fe mística. Esto llevó a Kant a realizar una crítica de la razón y de una forma no ilustrada o de “minoría de edad”. Kant sostenía que la Ilustración es el motor y la meta de la historia, y que esta debe ser entendida como una mejora en la ilustración. Debido a esto, la crítica de la razón se convierte en una exigencia para aclarar los fines e intereses del ser humano.

2. Problemas Principales del Hombre

  • ¿Qué puedo conocer?: Problema del conocimiento. Establece los límites dentro de los cuales puede existir un conocimiento científico de la naturaleza y de toda verdad.
  • ¿Qué debo hacer?: Problema de la moralidad. Establece los principios y condiciones para que la razón pueda obrar con plena libertad.
  • ¿Qué me cabe esperar?: Problema de la religión e historia. Se trata de trazar el destino último del hombre y las condiciones y posibilidades de su realización.
  • ¿Qué es el hombre?: Relaciona las tres preguntas anteriores con el sujeto ‘hombre’, buscando una clarificación racional al servicio de una humanidad más libre.

3. El Problema del Conocimiento: Racionalismo, Empirismo y Posibilidad de la Metafísica como Ciencia

El Problema del Conocimiento

Lo primero que se debe hacer en una crítica de la razón es responder a la pregunta ‘¿Qué puedo conocer?’. Su respuesta implica señalar los principios y límites que hacen posible un conocimiento científico de la naturaleza. Esto lo realiza Kant en la obra *Crítica de la razón pura*.

Racionalismo y Empirismo

Kant siempre aceptó dos facultades de conocimiento: la sensibilidad y el entendimiento. Sin embargo, al mismo tiempo, afirmará que estos conceptos solo se pueden aplicar en el ámbito de la experiencia. Entonces, el problema radica en qué sucede con grandes temas como el alma o Dios.

Posibilidad de la Metafísica como Ciencia

Este problema se lo plantea por dos motivos: por un lado, la ciencia progresa, pero se siguen planteando los mismos problemas que los antiguos; por otro lado, los científicos se ponen de acuerdo, pero el desacuerdo reina en el terreno metafísico. Kant se plantea por qué sucede esto y piensa que hay que aclarar el problema. Si la metafísica es una ciencia, se debe considerar como tal; pero si no lo es, se tiene que dejar de hablar científicamente de temas metafísicos.

4. Condiciones que Hacen Posible la Ciencia y Tipos de Juicios Científicos

Condiciones que Hacen Posible la Ciencia

  • Empíricas: Parten de la experiencia, son particulares, concretas y pueden alterarse (por ejemplo, el hecho de que veamos algo depende de la agudeza de nuestra visión).
  • Trascendentales: Toda ciencia se apoya en contenidos anteriores a la experiencia; son condiciones universales y necesarias.

Tipos de Juicios Científicos

  • Analíticos: El predicado se comprende en el sujeto, de manera que, analizando el sujeto, podemos conocer esa información. Por ejemplo: ‘el todo es mayor que la parte’. Son universales, necesarios y no extensivos.
  • Sintéticos: Cuando el predicado no se comprende en el sujeto. No son universales ni necesarios, pero sí extensivos.
  • A priori: Su verdad puede ser conocida independientemente de la experiencia sensible.
  • A posteriori: Su verdad se conoce a partir de la experiencia sensible.

Los juicios analíticos son a priori y los sintéticos son a posteriori.

5. Los Juicios Sintéticos a priori

Kant plantea que en matemáticas se dan juicios sintéticos a priori, tanto en geometría como en aritmética, y también en física. Son juicios propios de la ciencia. Una vez establecido esto en la *Crítica de la razón pura*, se plantea cómo los forma la mente humana, cuáles son las condiciones que los hacen posible y si estas se dan o no en metafísica.

6. Los Límites del Conocimiento

  • Estética Trascendental: Se estudia la sensibilidad y las condiciones que hacen posibles los juicios sintéticos a priori en matemáticas.
  • Analítica Trascendental: Estudia el entendimiento y las condiciones que hacen posible los juicios sintéticos a priori en la física.
  • Dialéctica Trascendental: Estudia la razón y si la metafísica cumple las condiciones que hacen posible la formulación de los juicios sintéticos a priori.

7. La Estética Trascendental

Las Condiciones Sensibles del Conocimiento

Para que pueda darse el conocimiento sensible, se necesitan dos condiciones: espacio y tiempo. Estas son “formas a priori de la sensibilidad”, es decir, la forma o el modo en que percibimos a través de los sentidos, e “intuiciones puras”. Son universales, necesarias y trascendentales, y posibilitan el conocimiento sensible.

Los Juicios Sintéticos a priori en Matemáticas

Según Kant, todos los juicios que se hacen en matemáticas tratan sobre el espacio y el tiempo, y aportan información universal y necesaria. Desde Grecia, las matemáticas han sido consideradas como ciencia y, excepto algunos juicios analíticos, los demás son sintéticos a priori.

8. La Analítica Trascendental

Las Condiciones Intelectuales del Conocimiento

La sensibilidad nos sitúa frente a una multiplicidad de fenómenos, una variedad de impresiones en el espacio y el tiempo. Pero percibir esos fenómenos no es, sin más, comprenderlos. Comprender lo percibido es la función propia del entendimiento. De esto se ocupa Kant y la Analítica Trascendental mediante una serie de análisis.

A1: La Función del Entendimiento

La función de comprender o entender se realiza mediante conceptos. Nuestro conocimiento incluye conceptos además de percepciones. Comprender un fenómeno es poder referirlo a un concepto. Esta actividad se realiza siempre a través de un juicio; por lo tanto, el entendimiento puede ser considerado como la facultad de los conceptos o como la facultad de los juicios.

A2: Conceptos Empíricos y Puros (Categorías)

Es necesario distinguir dos tipos de conceptos totalmente distintos: los empíricos y los puros o categorías. Los conceptos empíricos son los que proceden de los datos de los sentidos, son a posteriori, extraídos de la experiencia a partir de la observación, y representan rasgos comunes entre ciertos individuos. Además de estos, el entendimiento posee conceptos a priori, que no proceden de la experiencia, sino que el conocimiento los aplica a las impresiones sensibles, a los fenómenos, para unificarlos y coordinarlos. Estos son los conceptos puros o categorías. Según Kant, habrá tantas maneras de unificar los datos de la experiencia, tantos conceptos puros, como formas posibles de juicio.

A3: Los Conceptos como Condiciones Trascendentales

Los conceptos son condiciones trascendentales y necesarias de nuestro conocimiento de los fenómenos. Esto significa que el entendimiento no puede pensar los fenómenos sino es aplicándoles estas categorías, y que los fenómenos no pueden ser pensados sino de acuerdo con ellas. Ese conocimiento sensible nos ofrece una pluralidad de figuras, formas, colores… El entendimiento, al formular un juicio, coordina estas impresiones sensibles aplicando ciertas categorías. Así, un juicio universal aplica la categoría de *totalidad*; un juicio afirmativo, la de *cualidad*; un juicio categórico, la de *relación*; y un juicio asertórico, la de *modo*.

A4: La Vacuidad de los Conceptos Puros

Los conceptos puros son vacíos. Así como el espacio y el tiempo han de llenarse con las impresiones sensibles, las categorías han de llenarse con los datos procedentes del conocimiento sensible. Esto implica que solo son fuente de conocimiento cuando se aplican a los fenómenos.

9. La Dialéctica Trascendental

Kant se ocupa de la posibilidad de la metafísica como ciencia, así como de la naturaleza y el funcionamiento de la razón.

Imposibilidad de la Metafísica como Ciencia

La metafísica es imposible como ciencia, ya que las categorías solo pueden aplicarse legítimamente a los fenómenos, es decir, a los datos de los sentidos. La Dialéctica Trascendental es una crítica del entendimiento y de la razón en su pretensión de alcanzar lo que está más allá de la experiencia.

La Razón

El conocimiento intelectual conecta unos juicios con otros, formando razonamientos. La razón es de tal naturaleza que tiende a encontrar juicios y leyes generales que abarquen y expliquen un mayor número de fenómenos; así se construye la ciencia.

La Razón y la Metafísica

Mientras esta búsqueda se mantiene dentro de los límites de la experiencia, esta tendencia es eficaz y amplía nuestro conocimiento. Sin embargo, esta tendencia de la razón lleva inevitablemente a traspasar las barreras de los datos sensibles en busca de lo incondicionado. Así, los fenómenos físicos se pretenden explicar por medio de teorías metafísicas acerca del mundo, y los psíquicos por medio de teorías metafísicas acerca de Dios, lo que constituye el ideal de la razón.

10. El Formalismo Moral

1. La Razón Práctica y el Conocimiento Moral

La actividad racional no se limita al conocimiento de los objetos. El ser humano necesita también saber cómo ha de obrar, cómo debe ser su conducta. La razón posee también una función moral, en la que Kant intenta responder a la pregunta ‘¿Qué debo hacer?’.

Esta doble vertiente puede expresarse por medio de la distinción entre razón teórica y razón práctica. Son dos funciones de la razón: la teórica se ocupa de conocer cómo son las cosas, y la práctica de saber cómo tiene que ser la conducta.

2. El Formalismo Moral

La teoría moral de Kant no es menos original que su teoría del conocimiento. La ética kantiana representa una auténtica novedad dentro de la historia de la filosofía.

2.1. Las Éticas Materiales

Es una ética espiritualista; lo contrario son las éticas formales. En toda ética material encontramos dos elementos: 1) la noción de que hay bienes para el hombre, y 2) que la ética establece unas normas para alcanzar el bien.

2.2. Crítica de Kant a las Éticas Materiales

Kant rechazó las éticas materiales porque, según él, presentaban las siguientes deficiencias: Primero, que las éticas materiales son empíricas (a posteriori), su contenido es extraído de la experiencia. Según Kant, para que los imperativos sean universales, han de ser a priori, es decir, independientes de la experiencia. Segundo, los preceptos de las éticas materiales son hipotéticos, valen como medios para conseguir un fin. Tercero, son heterónomas, lo que consiste en recibir la ley desde fuera de la propia razón.

2.3. La Ética Formal de Kant

2.3.1. Sentido de una Ética Formal

Las éticas materiales se encuentran afectadas por estas tres deficiencias: son empíricas, hipotéticas y heterónomas. Pero una ética universal y racional debe ser a priori, categórica y autónoma; por tanto, ha de ser formal. Una ética formal es una ética vacía de contenido; no nos dice lo que hemos de hacer, sino la forma en que debemos obrar.

2.3.2. El Deber

Un hombre actúa moralmente cuando actúa por deber. Estas son las acciones que respetan la ley. Kant distingue tres tipos de acciones: contrarias al deber, conformes al deber y por deber. Solo estas últimas poseen valor moral. Una acción hecha por deber tiene su valor moral no en el propósito, sino en la máxima por la cual ha sido resuelta, y la que nos debe guiar es el imperativo categórico.

2.3.3. El Imperativo Categórico

La exigencia de obrar moralmente se expresa a través del imperativo categórico. Kant ofrece diversas formulaciones del imperativo categórico. La primera afirma: “Obra solo según una máxima tal que puedas querer al mismo tiempo que se torne ley universal”. Otra formulación es: “Obra de tal modo que uses la humanidad, tanto en tu persona como en la persona de cualquier otro, siempre como un fin y nunca meramente como un medio”.

3. Libertad, Inmortalidad y Existencia de Dios: Los Postulados de la Razón Práctica

La *Crítica de la razón pura* había puesto de manifiesto la imposibilidad de la metafísica como ciencia, como conocimiento objetivo acerca del mundo, del alma y de Dios. Sin embargo, estos temas constituyen interrogantes de interés fundamental para el destino del hombre. Kant llegó a establecer que el alma y Dios no son fenómenos que se den en la experiencia, por lo que no son asequibles al conocimiento científico. Son postulados de la razón práctica, entendiendo por postulado algo que no es demostrable, pero que se presupone como la moral. Respecto a la inmortalidad, dirá que la razón nos ordena aspirar a la virtud; esta perfección es inalcanzable en una existencia limitada, lo que exige la inmortalidad.

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