1. La Metafísica: El Estudio del Ente en Cuanto Ente
La metafísica es la disciplina filosófica que estudia el ente en cuanto ente, es decir, los seres en cuanto cosas que son, los primeros principios de las cosas. Aristóteles la llamó filosofía primera.
Diferentes Enfoques de la Metafísica
- Perspectiva Kantiana: Según Kant, la metafísica no es una ciencia porque sus objetos tradicionales (alma, Dios, sustancia) no son empíricos. Sin embargo, sea o no una ciencia, la metafísica es un saber objetivo, racional y alejado de prejuicios, cuya certeza se puede justificar racionalmente, a diferencia de la mera opinión.
- Metafísica vs. Ciencias Empíricas: Las ciencias empíricas estudian regiones específicas de la realidad. La metafísica, en cambio, con un enfoque radical, estudia lo común y anterior a esos aspectos físicos.
2. La Pregunta Fundamental: ¿Cuál es el Origen de la Realidad y Qué es lo que Existe?
Ante la pregunta sobre el origen de la realidad y la naturaleza de lo existente, se distinguen tres posiciones principales:
- Realismo: Sostiene que lo real son las cosas, los objetos y el sujeto que las conoce («las cosas y entre ellas yo»). Es la perspectiva tradicionalmente adoptada.
- Idealismo: Afirma que lo real es el sujeto y sus ideas («yo que pienso y las ideas de mi pensamiento»). No se puede dudar de uno mismo y de las ideas que se tienen en mente, a diferencia de las cosas externas que pueden ser como sueños o alucinaciones.
- Raciovitalismo: Propone la unión del yo y las cosas («yo en las cosas»), es decir, el yo unido a las cosas y a las circunstancias.
3. El Origen de lo Real: Diversas Respuestas Filosóficas
3.1. Lo Real Carece de Origen: La Eternidad del Universo
Para algunos pensadores, lo real NO tiene origen, sino que es eterno. Según los antiguos griegos, el universo es eterno. La sentencia de Parménides fue: «el ser es y el no ser no es«, lo que implica que el ser existe, existió y existirá; la nada no existe y, por tanto, no puede ni engendrarlo ni aniquilarlo.
3.2. Lo Real Tiene Origen: La Creación
El cristianismo introdujo un concepto nuevo: el de la creación ex nihilo (la creación a partir de la nada).
Tomás de Aquino (s. XIII) intentó demostrar racionalmente la existencia de Dios mediante las llamadas cinco vías. Estas parten de la observación del universo, que es un efecto, para remontarse a la causa (Dios).
Un ejemplo es la vía de la contingencia (tercera vía), que se basa en la distinción entre ente contingente y ente necesario. Dado que el universo está compuesto solo de seres contingentes y dependientes unos de otros, todo el universo tendrá que depender de un ser necesario, que sería Dios. El Dios resultante es trascendente porque es distinto del universo, e inmanente porque está dentro de cada ser.
3.3. La Pregunta Carece de Sentido: La Perspectiva Kantiana
Según Kant, el principio de causalidad solo es aplicable a los fenómenos, pero ni Dios (causa) ni el mundo (efecto) son fenómenos; por lo tanto, la tercera vía no es válida. La respuesta a la pregunta sobre el origen de lo real solo se puede dar desde la creencia, no desde la ciencia, porque no está a nuestro alcance. Una creencia no da argumentos racionales, pero la ciencia sí.
En conclusión, la pregunta sobre lo real se ha respondido de tres maneras diferentes a lo largo de la historia de la filosofía:
- Para unos, lo real carece de origen, es eterno.
- Para otros, lo real tiene origen, es creado.
- Y para un tercer grupo, la propia pregunta carece de sentido.
4. El Problema del Cambio: Sustancialismo Estático vs. Devenir
4.1. El Sustancialismo Estático de Parménides
Cuando Parménides afirma «el ser es y el no ser no es«, está declarando que el rasgo fundamental del ser es la permanencia y que el cambio es imposible. ¿Qué es un cambio? Un paso del no ser al ser o al revés. Pero el ser del que habla Parménides es un ser absoluto que ni puede pasar al no ser ni pasar del no ser al ser, sino ser siempre. Así pues, las cosas que cambian son no-ser.
Mientras que los sentidos nos engañan al mostrarnos un universo cambiante (el no-ser), la razón descubre que tras esos cambios aparentes, el ser permanece inmutable y es la verdadera sustancia de lo real, aquello en que la realidad consiste. Podemos llamar a esta concepción sustancialismo estático.
4.2. El Devenir de Heráclito
Frente a la inmovilidad parmenídea, Heráclito sostenía que la realidad no podía ser inmóvil. Si en algo nos engañan los sentidos no es en mostrarnos un mundo cambiante, sino en hacernos creer que las cosas no cambian. Pero la razón descubre que el ser es un devenir (una realidad en constante cambio).
La realidad es un devenir por la lucha de contrarios que la mueve desde dentro (luz y oscuridad; frío y calor). Frente al ser estático de Parménides, Heráclito tiene una visión dinámica del ser y lo considera un fuego incesante, un devenir donde nada es fijo debido a la lucha de contrarios. Esa lucha es la razón de ser del universo (logos) y a la vez es nuestra razón, nuestra manera de pensar, porque formamos parte de él.
4.3. Acto y Potencia: La Solución Aristotélica al Cambio
Aristóteles formula una teoría capaz de explicar el cambio: la teoría de la potencia y el acto.
- Potencia es aquello que algo no es, pero puede llegar a ser (sería un intermedio entre el ser y el no-ser de Parménides).
- Acto es aquello que algo es.
El cambio es el tránsito de la potencia al acto.
Heráclito daba tanta importancia al cambio, a lo que aparece y a lo que desaparece, que acababa olvidando que en todo cambio hay algo que permanece (todo es cambio, lo real es cambiante).
Parménides daba tanta importancia al hecho de que el ser común a todas las cosas no cambia, que acababa negando el cambio (No hay cambio. Lo real es permanente).
Aristóteles conjuga cambio y permanencia y así refleja con más sutileza la complejidad de lo real (algo cambia y algo permanece; lo real es permanente y cambiante).
5. Visiones Metafísicas Fundamentales: Dualismo, Monismo y la Naturaleza de la Realidad
5.1. Platón: El Dualismo Cosmológico y la Realidad de las Ideas
Para Platón, la auténtica realidad es permanente e inmutable, como el ser de Parménides. Platón es el primer filósofo que elabora un sistema metafísico (una explicación metafísica coherente y completa de todo lo existente).
Su sistema metafísico defiende un dualismo cosmológico, que divide la realidad en dos niveles:
- El mundo físico o sensible, que perciben nuestros sentidos.
- El mundo de las ideas o inteligible, que nuestra razón conoce.
Lo más real no son los seres del mundo físico, que son copias de las ideas, sino las ideas inmateriales que les sirven de modelo. Estas ideas no son meros conceptos mentales, sino realidades extramentales, anteriores y superiores a los seres del mundo físico.
5.2. Nietzsche: El Irracionalismo Vitalista y la Reivindicación del Devenir
La filosofía de Nietzsche se llama irracionalismo vitalista y se elabora como oposición al dualismo platónico y al cristianismo, que según él lo heredó. Frente al sustancialismo estático, defendido por Parménides y retomado por Platón, Nietzsche reivindica el devenir de Heráclito.
Pero a diferencia de Heráclito, Nietzsche no cree que nuestros sentidos nos engañen, sino nuestra razón al interpretar erróneamente los datos proporcionados por los sentidos. Según Nietzsche, solo existe una realidad y esta no está ahí para ser entendida por la razón humana, sino que es un devenir irracional, inconsciente, impersonal y carente de finalidad y sentido. Se trata de un cúmulo de fuerzas que nos sobrepasa y que está formado por una fuerza primordial: la voluntad de poder.
Nietzsche critica que la filosofía tradicional ha cometido un gran error al creer en la racionalidad del mundo y al crear conceptos metafísicos que no reflejan el devenir del mundo, sino la estructura lógica de nuestra razón. En contraste, Platón declaró que el mundo que se nos muestra a los sentidos, el único existente, es un mundo aparente, mientras que el inventado por su razón es un mundo verdadero.
6. Monismo y Dualismo en la Concepción de la Realidad
6.1. El Materialismo Monista
El materialismo es monista porque considera que lo real es solo la materia y que esta es capaz de explicar toda la complejidad de lo existente, incluso el pensamiento. La primera corriente materialista fue el atomismo de Demócrito, quien postuló la existencia de unas partículas indivisibles e inmutables que llamó átomos.
Según Demócrito, la realidad consiste en átomos eternos e inmutables moviéndose desde siempre y sin finalidad alguna en el vacío. Esta visión del universo, donde todo se explica por azar y necesidad, se llama mecanicismo y se opone al teleologismo o finalismo aristotélico (que sostiene que todo ocurre con una finalidad).
6.2. El Espiritualismo Monista
Berkeley y Hegel consideran que la realidad es espiritual. Según Berkeley, no hay cuerpos ni materia, sino ideas en nuestra mente, y Dios es el garante de que sean reales; según Hegel, todo lo racional es real y viceversa.
6.3. El Dualismo Filosófico
El dualismo postula que lo real está compuesto por dos principios: materia y espíritu. El principio espiritual explicaría la complejidad del universo y lo haría comprensible a nuestra razón, que es también espiritual.
El representante principal de esta corriente es Platón. Su dualismo cosmológico implica un dualismo epistemológico (del conocimiento) y un dualismo antropológico (del ser humano): a cada nivel de la realidad le corresponde un nivel de conocimiento y una dimensión humana distinta. El nivel de las ideas es superior.
Otra explicación dualista es la de Descartes. Según él, lo real se estructura en tres sustancias: la infinita (Dios), la pensante (el yo) (ambas espirituales), y la extensa (el mundo, incluyendo nuestro cuerpo) (material).
7. Esencialismo y Existencialismo: Prioridad de la Esencia o la Existencia
Podemos distinguir en la filosofía dos grandes corrientes de pensamiento según la prioridad que se conceda a la esencia o a la existencia: esencialismo y existencialismo.
Consideramos a Platón esencialista y a Aristóteles existencialista.
7.1. El Esencialismo
El esencialismo da prioridad a la esencia sobre la existencia, y su lema puede ser «la esencia precede a la existencia«. Antes de la existencia concreta del ente, tiene que existir una esencia que defina lo que ese ente va a ser.
Siguiendo a Platón, primero existe la esencia universal de gato y después, y gracias a ella, gatos concretos, que son copias imperfectas del modelo perfecto.
7.2. El Existencialismo
El existencialismo da prioridad a la existencia del ente sobre la esencia, y su lema puede ser «la existencia precede a la esencia«. Por tanto, lo primero y primordial del ente es su individualidad, lo que lo hace único.