Ejemplos de ideas innatas adventicias y ficticias

Descartes

Descartes fue un filósofo, matemático y científico francés del Siglo XVII. Dejo un legado extraordinario, fue el padre del mecanicismo, aplicó las matemáticas a las ciencias y en la filosofía y dejo fijado un método deductivo, la geometría analítica. También fue el padre del Racionalismo y de la filosofía moderna.

Su célebre frase es «pienso, luego existo». Ahora tenemos un sujeto que busca conocer la realidad pero para ello debemos saber cómo conoce ese sujeto y qué puede conocer. El sujeto es fundamentalmente la razón, que es donde están todos los conocimientos, las ideas. Su teoría del conocimiento aparece en su obra El Discurso del Método.
A partir de este momento toda la filosofía moderna será epistemología: la cuestión ya no será qué conozco, sino cómo puedo conocer.

  1. EL MÉTODO (EL DISCURSO DEL MÉTODO):


    necesitamos un método porque debemos saber que hay que buscar, y ordenar, orientar y controlar el conocimiento. El modelo de este conocimiento será la nueva física de Galileo que es comprobable mediante la razón (las matemáticas). Las cuatro reglas del método que utilizan las matemáticas son:
    1° regla (regla de evidencia)
    : un conocimiento es cierto si es evidente.
    EL CRITERIO DE CERTEZA será la evidencia: claridad (lo que se presenta de modo inmediato) y la distinción (incondicionado). Y esta evidencia será por INTUICIÓN (nace de la sola luz de la razón), San Agustín lo llamaba iluminación. Así la garantía de la verdad son la claridad y la distinción: la evidencia, que será: inmediata (intuición), derivada (deducción).
    2° regla (análisis)
    . La intuición requiere de la simplicidad.
    3° regla (síntesis)
    . La intuición requiere de una cadena de conocimientos, que se corresponden con la realidad. Si no está clara esa cadena, la suponemos mediante alguna hipótesis conveniente (deducción)
    .
    4° regla (enumeración y previsión)
    . Sólo hay conocimientos mediante la intuición y la deducción.

  2. LA DUDA METÓDICA

    Es dudar de todos los conocimientos que se dan por verdaderos excepto la religión. Las matemáticas siempre han atendido estas reglas. Si las matemáticas funcionan es porque siguen este método, es decir, la verdad no pertenece a las matemáticas, aunque se hallan muy cerca. Descartes aplica el método al saber tradicional para ver si podemos encontrar evidencias:

    A los sentidos

    Nos engañan muchas veces, no podemos fiarnos de que las cosas sean como las percibimos.
    Las cosas que percibimos pueden existir o no. ¿Qué mundo es real y cuál no? Imposibilidad de distinguir la vigilia del sueño
    . La razón y su poder discursivo, tampoco hay evidencias, existen errores.

    Matemáticas

    Siguen siendo ciertas pero, ¿y si existiera un espíritu maligno que nos engañará? Quizá las matemáticas sólo existen en mi cerebro y yo voy al mundo matemáticamente.

  3. LA CERTEZA FUNDAMENTAL

    ¿Qué me queda, de qué no puedo dudar? No puedo dudar de que dudo:

    CERTEZA FUNDAMNETAL

    Sólo por el hecho de pensar sé que existo (“pienso, luego soy”). Y además si no estuviéramos en lo cierto el hecho de equivocarse implica existencia (“Si fallor sum”) algo que ya había dicho San Agustín (** de las demostraciones de la existencia de Dios). Así la certeza es nuestro YO, nuestra CONCIENCIA,  nuestra EXISTENCIA.

LAS IDEAS


Ahora que tenemos una certeza fundamental, deduciremos. Las ideas son forma del pensamiento y poseen un contenido objetivo. Todas poseen la misma realidad pero son diferentes en su contenido objetivo.

Tipos de ideas


Las ideas artificiales (ficticias) aquellas que construye la mente a partir de otras ideas (unicornio, orco, etc.).
Las ideas adventicias provienen de nuestra experiencia externa. No sabemos si estas ideas son objetivas, ya que los sentidos nos engañan y la memoria no es fiable.

Las ideas innatas:

las que encuentro en mí, en mi conciencia, nacidas con ella. (pensamiento, existencia, Dios, sustancia, causa). Estas ideas son claras y evidentes:
Están en la razón misma. No son inventadas ni vienen de los sentidos. No podemos albergar dudas en ellas por lo que son perfectas.

Ahora bien si estas ideas son perfectas hay que elegir la más elevada y objetiva (idea de los grados del ser de Patón,  San Agustín y Santo Tomás): la idea de Dios pero ¿existe Dios más allá de ser una idea innata de mi conciencia? Demostrar la existencia de Dios es demostrar nuestra propia existencia. Además es la base de toda metafísica (meditaciones metafísicas)
.

Pruebas de la existencia de Dios

1.
Basada en la idea de un ser perfecto y en la causalidad.
Si tenemos esta idea es porque es el efecto de una causa. Nosotros podemos conocer las causas de **** nuestras ideas pero no las de un ser perfecto ya que somos imperfectos y además somos finitos y Dios es un ser infinito.

2

Basada en la imperfección y dependencia de mi ser:
Soy consciente de mi imperfección, porque dudo.
Si fuese un ser perfecto,  me habría creado sabio no ignorante. Además soy contingente, soy el efecto de otra causa igual que mi existencia. Dios es perfecto y necesario, luego existe y su idea es innata.

3

Argumento ontológico


La esencia implica existencia, y la idea de Dios está contenida en su existencia, por lo tanto, es perfecto y sólo la idea de Dios es absolutamente necesaria.  Hasta ahora conocemos dos cosas con seguridad: El yo y Dios.
Pero ¿y el mundo?
Dios no puede mentirnos. Dios es perfecto, bueno y veraz y si él no está criado podemos creer en nuestros sentidos y nuestra razón. Por lo que el hombre está capacitado por su propia existencia para conocer la Verdad.

  • Las ideas innatas son verdaderas y las adventicias se forman a partir del mundo, que es obra de Dios (conocimiento empírico). Las ideas innatas que hemos comprobado que son verdad, son los  principios de la lógica y de la física.
    Son innatas porque poseemos las verdades potencialmente y podemos llegar a ellas haciendo uso de la razón. Así Descartes fomenta el carácter deductivo de las ciencias menospreciando el experimento: la verdad está en la misma razón (se deduce aplicando el método). Pero… ¿y el error?
    Ocurre porque no hacemos buen uso del método. Hay que seguir siempre el método, como las matemáticas. Este error tiene lugar en el juicio.
    En él intervienen intelecto y voluntad.
    El intelecto no se equivoca, errar viene por la presión que ejerce la voluntad sobre él.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *