Descartes: Fundamentos del Conocimiento y la Realidad en su Filosofía

Epistemología Cartesiana: La Búsqueda de la Verdad y el Método

El objetivo central de la ciencia cartesiana es justificar el conocimiento desde el racionalismo. Para Descartes, justificar el conocimiento consiste en realizar una profunda exploración para encontrar sus límites, su validez y su extensión, lo que equivale a buscar las garantías del conocimiento. Ante el declive de la escolástica y el surgimiento de una nueva ciencia, se hizo necesario establecer garantías de su validez. Por lo tanto, es imprescindible desarrollar un método para alcanzar este objetivo y, en un contexto más amplio, lograr la renovación del conocimiento. El desarrollo de este método se aborda de tres maneras distintas:

  • Las Reglas para la dirección del espíritu
  • Las Meditaciones metafísicas
  • El Discurso del método

El Método Cartesiano: Un Conjunto de Reglas para el Conocimiento

El método es un conjunto de reglas, una cuestión epocal (dependiente de la época). Es una cuestión metodológica, el conjunto de pasos que deben seguirse antes de conocer, previos a la investigación.

Características Fundamentales del Método

  • Carácter Veritativo: Posee un carácter veritativo, ya que busca la verdad, lo evidente, una verdad con garantías previa a la investigación.
  • Carácter Sistemático: Busca una verdad sistemática y entrelazada, aspirando a crear un sistema de verdades interconectadas de las que no se pueda dudar. El método es inherentemente sistemático, pues entre el método y el sistema existe una relación de circulatio, de circularidad, de retroalimentación: el método crea un sistema y el sistema se sostiene con un método.
  • Carácter Biográfico y Práctico: Posee un carácter biográfico, ya que, además de ser un método veritativo para conocer, es un método para actuar, para la vida. Esto se refleja en su no neutralidad: es una guía para la acción, pues no cualquier cosa es válida, de ahí la necesidad de una postura no neutral ante los fenómenos, ante el bien o el mal.
  • Ars Inveniendi: El método es un ars inveniendi, es decir, el arte de hallar verdades; no verdades sueltas, sino entrelazadas y sistemáticas.

Supuestos del Método Cartesiano

Los supuestos fundamentales del método son:

  • La Razón: El método es un conjunto de reglas para legitimar el conocimiento que la razón se impone a sí misma para no extraviarse y alcanzar la verdad.
  • El Orden Subjetivo: Es un conjunto de reglas que la razón de cualquier sujeto puede imponerse, no siendo algo individual ni personal, sino aplicable a un sujeto abstracto.
  • El Matematicismo: Otro supuesto es el matematicismo, ya que es un método que la razón utiliza en cuanto a simplicidad, intuición y deducción. Para un matemático, solo hay dos formas de conocer: la intuición o la deducción; es decir, o se intuye lo simple o, a partir de lo simple, se deduce lo complejo. La intuición es la capacidad para acceder a lo simple, que es lo evidente, aquello que se le presenta al sujeto de forma clara y distinta.
  • Análisis y Síntesis: El método se lleva a cabo a partir del análisis y la síntesis.
    • El análisis es la descomposición de lo complejo hasta llegar a lo simple, lo evidente.
    • La síntesis es la capacidad de conocer lo complejo después de su análisis, tras haberlo descompuesto en lo simple, lo evidente, aquello que se presenta de forma clara y distinta.
  • Mathesis Universalis: El último supuesto es la mathesis universalis, en la que el objetivo de Descartes es encontrar un método para construir la scientia mirabilis, es decir, para componer todo el conocimiento, para construir el gran saber humano.

Descartes busca legitimar el conocimiento mediante un método que se basa en un conjunto de reglas:

  • La evidencia: solo aceptar como verdadero aquello que es evidente.
  • La simplicidad: lo de naturaleza clara y distinta, lo que se puede intuir.
  • El análisis: descomponer lo complejo para llegar a lo simple, a lo evidente.
  • La síntesis: empezar a componer otras verdades a partir de lo evidente, lo axiomático. Deduciendo, se llega a otras verdades sistemáticas, y después de esto, se realiza un repaso para verificar la corrección.

La Duda Metódica Cartesiana

Descartes busca justificar el conocimiento mediante la duda metódica, su método. La duda metódica tiene la función de purificación o desescombro epistémico, buscando eliminar el conocimiento no válido. La razón se analiza a sí misma, y cualquier contenido que se presente dudoso será considerado como falso, con el fin de encontrar las garantías del conocimiento.

Niveles de la Duda Cartesiana

Descartes explora todos los niveles de duda:

  1. Duda de los Sentidos: De lo primero de lo que se puede dudar es de los sentidos, ya que pueden engañar. No hay garantía de que lo que se percibe a través de ellos sea cierto, porque nos dejan en las apariencias, no en lo verdaderamente real, en la esencia, en lo que hace ser a las cosas lo que son. Como es confuso y se puede dudar de ello, se considera falso.
  2. Duda de la Realidad (Sueño vs. Vigilia): El siguiente nivel de duda es la realidad, ya que no se puede discernir un estado onírico (de los sueños) de un estado de vigilia (de estar despierto). Por lo cual, al ser confuso o dudoso, ya que no se puede saber si la realidad es un sueño o no (puesto que podría ser una fabulación del sujeto tan profunda que impida discernir), se considera falso.
  3. Duda Hiperbólica (Genio Maligno): El tercer nivel es la duda hiperbólica: ¿se puede dudar de la razón? ¿De las matemáticas? La razón empieza a dudar de sí misma, a pesar de ser la que busca las garantías del conocimiento. La hipótesis del genio maligno, o Deus Deceptor (dios engañador), le hace dudar de la razón, ya que podría existir un ser tan poderoso que hiciera creer a una persona que unas matemáticas son verdaderas cuando en realidad son falsas. ¿Y si existiera un genio tan poderoso como para inmiscuirse en la mente y tan malvado que hiciera creer lo que no es? Ya introducida la duda, si se puede dudar de ello, es falso. Descartes busca llegar a la verdad, no destruirla.

Metafísica Cartesiana: La Certeza del «Pienso, Luego Existo»

El Cogito, Ergo Sum: La Primera Verdad Indudable

Se llega a la primera verdad: no se puede dudar de que se duda, porque cuanto más se duda, más evidente se hace la propia duda. De ahí la célebre formulación: “Cogito, ergo sum” (“Pienso, luego existo”). Es la primera verdad evidente, de naturaleza simple, que se presenta de forma clara y distinta; no es una deducción, sino una intuición.

A partir de esto, se realiza una síntesis: ¿qué soy? Una res cogitans, una cosa que piensa, un pensamiento que se está pensando a sí mismo; una sustancia, entendiendo por sustancia id quod nullo alio re indiget ad existendum (aquello que no necesita de ninguna otra cosa para existir).

Tipos de Ideas en la Filosofía Cartesiana

Es en sí y se concibe como sí. Los modos de pensamiento son las ideas, y estas ideas son de tres tipos:

  • Ideas Adventicias: Aquellas que vienen de fuera, que nos advienen, no creadas por el sujeto.
  • Ideas Facticias: Creadas por el sujeto a partir de las adventicias; no provienen del exterior, la mente es creativa.
  • Ideas Innatas: Ni creadas por composición (facticias) ni obtenidas de forma pasiva del exterior (adventicias).

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