Filosofía del Ser Humano: Un Recorrido Histórico por las Ideas Fundamentales

El Ser Humano y el Problema de la Existencia

  • Iván Ilich se da cuenta de que, cuanto más avanzaba en su carrera y más rico se hacía, menos sentido tenía su vida, y de que se encontraba con la gente más por interés que por amistad. Para encontrarle un sentido a su vida, debía remontarse al pasado.
  • En los momentos de crisis, los seres humanos solemos preguntarnos sobre el sentido de la vida y la muerte.
  • La antropología filosófica se ocupa del conocimiento del ser humano y de todo lo referente a él.

Mitos sobre la Creación del Universo y del Ser Humano

  • Los mitos y las religiones de todas las civilizaciones se preguntaron sobre el origen del ser humano y del mundo. Según la mitología griega, en un comienzo existía la Abertura, un vacío negro en el que nada podía distinguirse y que se llamaba Caos. Luego apareció Tierra, a la que los griegos llamaban Gea. La Tierra no era un espacio oscuro como el Caos, sino que tenía una forma. La Tierra era aquello sobre la que los dioses, los seres humanos y las bestias podían marchar con seguridad.

El Ser Humano en la Antigüedad

Platón: Dualidad y Trascendencia

  • Los primeros hombres que filosofaron en Mileto se preguntaban por el ser y el origen de las cosas.
  • Platón inaugura la dualidad del ser humano: estar dividido en cuerpo y alma.
  • Según Sócrates, la muerte permite que el alma se libere de la prisión del cuerpo.
  • Para Platón, la Idea de Hombre era más real que la del ser humano sensible, de carne y hueso. Por eso, se dice que Platón era esencialista. Para él, el alma es de origen divino y deberá reencarnarse hasta su purificación.

Aristóteles: Unidad e Inmanencia

  • Para Aristóteles, el ser humano tenía el estatus más alto en la ontología. Esta sustancia está compuesta de cuerpo y alma; ninguno puede existir sin el otro. Por eso se dice que su concepción es inmanentista.
  • Aristóteles definía al ser humano como «animal político». En Grecia, el ser humano se diferenciaba del resto de los animales porque era capaz de discutir y resolver los asuntos de la ciudad para el bien común.
  • En la Grecia Antigua, los esclavos, mujeres y extranjeros no podían participar en política y debían ocuparse de los asuntos domésticos. Por lo tanto, ellos no accedían al estatus de seres humanos.

La Vida y la Muerte

  • Sócrates fue condenado a muerte, acusado de pervertir a los jóvenes con sus ideas.
  • La muerte es precisamente una transformación, un cambio de morada para el alma de aquí a otro lugar.
  • Para Epicuro, el fin del ser humano era el placer y la vida feliz. No había que temer a la muerte porque la muerte era la ausencia de sensación.

El Ser Humano en la Tradición Judeocristiana

  • En la doctrina cristiana, los seres humanos recuperan la inmortalidad del alma gracias al sacrificio de Jesucristo que murió en la Tierra. El ser humano está conformado por un cuerpo mortal y un alma inmortal.
  • Para la tradición judeocristiana, el cuerpo era el lugar del pecado. Pero, a diferencia de la tradición grecolatina, hay una concepción monista de la naturaleza humana, no dualista.
  • El alma no puede existir sin el cuerpo y el cuerpo no puede vivir sin el alma. Cuando el ser humano muere, el alma se separa del cuerpo; por ello, su existencia es transitoria y antinatural.
  • San Agustín postulaba que Aristóteles y toda la filosofía antigua habían cometido un error fundamental: exaltar el poder de la razón como el supremo poder del ser humano. Pero, la razón, por sí sola, no conduce al camino de la verdad, la luz y la sabiduría, sino que precisa de la fe.

El Ser Humano Frente al Infinito

  • Blaise Pascal expresa su terror frente al inmenso espacio del universo: «¿Qué es un ser humano en el infinito? Una nada con respecto al infinito, un todo con respecto a la nada, un medio entre nada y todo.»
  • El fin y el principio de las cosas están insuperablemente escondidos en un secreto impenetrable, y es igualmente incapaz de ver la nada de donde ha sido extraído y el infinito donde está sumido.
  • Pascal coincide con San Agustín en que la razón no es suficiente, sino que el ser humano precisa de la fe para explicar la realidad. La fe no puede ser explicada.

El Ser Humano en la Modernidad

Descartes y el Ser Humano como «Cosa que Piensa»

  • El Renacimiento se caracterizó por situar al ser humano en el centro del universo. Fue una crítica al teocentrismo medieval.
  • René Descartes concibe al ser humano como un ser que piensa. Estaba convencido de la distinción entre materia y espíritu. Para él, hay dos formas de realidad o sustancias: el pensamiento o alma, y la extensión o materia.
  • El filósofo planteaba además la existencia de Dios a partir de pruebas que consideraba veraces.
  • Para Descartes, es evidente que la idea de un ser perfecto no puede provenir de los seres humanos, ya que somos imperfectos; por lo tanto, tiene que provenir de un ser perfecto.
  • Dios es una sustancia pensante infinita, diferente del ser humano, que es una sustancia pensante finita, es decir, con principio y fin.

El Barroco

  • En el siglo XVII se desarrolló el movimiento artístico denominado Barroco. Uno de los temas era la idea de que la vida es un teatro. No solamente porque en esa época nació el teatro moderno, sino también porque el teatro aparecía como una representación de la vida humana en general.

La Concepción de los Filósofos del Derecho Natural Moderno

  • Se denomina filósofos del derecho natural a un grupo de filósofos de los siglos XVII y XVIII que sostenían que hay una serie de derechos naturales propios de los seres humanos que todos poseemos.
  • Hobbes llegó a la conclusión de que el ser humano es una realidad única e indivisible compuesta exclusivamente de partículas de materia. Y que su conciencia o alma se debe al movimiento de partículas minúsculas en el cerebro. Por lo tanto, no hay división entre cuerpo y alma.
  • Todos los seres humanos son iguales por naturaleza. Todos los seres humanos tienen en común el hecho de valorar sus propios talentos y menospreciar los de los semejantes.

La Concepción del Ser Humano en Rousseau

  • Locke y Rousseau no creían que el ser humano fuera naturalmente egoísta ni que solo le importara su autoconservación.
  • Rousseau describe un estado intermedio entre la brutalidad de los tiempos primitivos y la civilización actual, ya que los seres humanos gozaban libremente entre sí de las alegrías de la relación mutua.
  • Para Hobbes, la libertad impulsaba al ser humano a desear abarcarlo todo y a violar la libertad de los demás. Para Locke y Rousseau, la libertad es la voluntad de decidir y actuar entre todos, dejando de lado los impulsos físicos y los deseos en beneficio de la voluntad general.
  • Para Rousseau, la piedad era un sentimiento del ser humano que lo diferenciaba del resto de los seres vivos.

Kant y el Ser Humano Moral

  • Kant piensa que el ser humano está regido por el imperativo categórico, lo que lo lleva a decidir racionalmente en cada acto de su vida.
  • Preguntas fundamentales: ¿Qué puedo saber? ¿Qué debo hacer? ¿Qué puedo esperar? ¿Qué es el ser humano?
  • La contemplación del cielo estrellado por medio de los sentidos hacía reflexionar a Kant, y la innumerable multitud de mundos le hacía pensar en la pequeñez del ser humano.
  • Para Kant, la ley moral es una ley universal que rige para todos los seres humanos y que reconoce la dignidad del ser terrenal dotado de razón, es decir, del ser humano.

El Ser Humano Alienado (Marx)

  • Para el filósofo Marx, el ser humano era un ser perfectible, un ser que siempre debe perfeccionarse y progresar. Lo que distingue al ser humano de los animales es el trabajo, el hecho y la capacidad de poder usar la razón y la imaginación para tomar un objeto de la naturaleza y convertirlo en algo nuevo.
  • Según Marx, el ser humano está alienado. Es decir, está “separado de”, “privado de”, privado y separado justamente de sus facultades propiamente humanas, de la imaginación y la creación, de su voluntad y de sus deseos.
  • A diferencia del artesano medieval, el obrero era desdichado en su trabajo. El obrero solo tiene la sensación de estar consigo mismo cuando está fuera de su trabajo, y cuando está en su trabajo, se siente fuera de sí.
  • Marx soñaba con un mundo donde los seres humanos pudieran ser felices en lo que hicieran, donde cada ser humano pudiese ir y volver feliz a su trabajo y sentirse realizado.

La Concepción Marxista de la Religión

  • Para Marx, no había nada que trascendiera al ser humano. Es decir, no había un Mundo de las Ideas que fuera más real que el mundo sensible o un Paraíso adonde los seres humanos iban a vivir felices después de la muerte.
  • Marx realizó una crítica a la religión. Escribió que la religión era el opio de los pueblos.
  • Para Marx, el paraíso debía realizarse en la Tierra, y para ello era necesario que todos los seres humanos fueran iguales.

El Superhombre de Nietzsche

  • La filosofía nietzscheana exalta la vida humana terrenal, la corporalidad, la creatividad y la potencialidad, la risa, el canto y la danza, la felicidad de la vida efímera. “Sed fieles a la Tierra” es el consejo nietzscheano.
  • El universo es desértico y carece de dioses; el ser humano está solo y, por lo tanto, debe crear su propio sentido del mundo.
  • Es el superhombre, aquellos seres humanos geniales que podemos ser todos y que deben destacarse.
  • Ser únicos e irrepetibles como una obra de arte llena de belleza, frente al rebaño en que parece haberse convertido la humanidad.

Un Lugar en el Mundo para el Ser Humano

  • En Memorias de África, la escritora Karen Blixen cuenta que en Kenia conoció al amor de su vida, quien se convirtió en su amante, Denys Hatton, cazador y aristócrata inglés que murió trágicamente en un accidente de avión. En una parte de la novela relata una experiencia que muchas veces tienen los seres humanos: la sensación de haber encontrado su lugar en el mundo, el sentido de la vida.

La Concepción del Ser Humano Después de las Guerras Mundiales

  • El siglo XX fue uno de los más violentos de la historia. Luego de las dos Guerras Mundiales, los genocidios, etc., los filósofos más que nunca comenzaron a preguntarse: ¿Qué es el ser humano?

El Yo-Tú de Martin Buber

  • El filósofo judío Martin Buber concibe al ser humano como un ser que solo puede pensarse en relación con los otros, desde el nacimiento hasta la muerte.
  • El ser humano establece dos tipos de relaciones: yo-ello, yo-tú.
  • La relación yo-ello es la que predomina en las sociedades contemporáneas. El otro aparece como objeto, como una cosa más en un mundo cosificado y mercantilizado. Es una relación que no tiene en cuenta al otro más que para usarlo, denominarlo, controlarlo o hacer que nos escuche.
  • Yo-tú designa una relación de persona a persona, de sujeto a sujeto, una relación mutua que supone el encuentro. En ese encuentro, cada una de las personas desaparece y lo que importa es la relación, el lazo que los une. Cada una de ellas respeta y valora los sentimientos.
  • La relación yo-ello es la que se interesa por las propias sensaciones más que por la sensación surgida de la relación con el otro.
  • Yo-tú implica una relación divina e inmortal. Cada encuentro que se tiene con otro ser humano u objeto de la naturaleza es una relación con Dios porque, para Buber, Dios está en todas partes.

La Existencia Humana como Absurdo (Camus)

  • Camus describe a Meursault: muere su madre, se niega a ver su cuerpo, no llora, durante el velatorio fuma, etc.
  • El sábado va a la playa y pasa la noche con una amiga.
  • Su amigo le cuenta asuntos amorosos, su jefe lo asciende, pero a él le daba igual.
  • Su amigo lo invita a una cabaña y unos árabes los atacan, y Meursault le dispara 4 veces a uno de ellos.
  • En el juicio fue condenado a muerte no por el asesinato, sino por no tener sentimientos o sensibilidad con su madre, con su amigo y con su ascenso.
  • Se declara culpable y cuando el capellán le ofrece el consuelo de Dios ante su muerte, reacciona violentamente y le dice que todos estamos condenados a muerte.

El Ser Humano Unidimensional (Marcuse)

  • Para el filósofo Marcuse, en el capitalismo tiene reprimidos sus placeres, el disfrute de sus momentos de ocio y sus instintos de vida y de amor por las normas sociales, la internalización de la culpa y la moral del trabajo.
  • En la sociedad del capitalismo avanzado, las características del trabajo suponen también el control del tiempo libre, la renuncia a la vida instintiva y la represión de los instintos sexuales porque se busca que todas las fuerzas se desvíen hacia la producción de mercancías y el deseo de consumir.
  • Marcuse fue el ideólogo del Mayo Francés, la revolución estudiantil más importante del siglo XX.

La Banalidad del Mal (Arendt)

  • En 1961, Arendt denominó «Banalidad del Mal» al hecho de que el mal había perdido toda profundidad, todo carácter extraordinario y se había transformado en algo banal, es decir, común y corriente, “normal”.

Homo Sacer (Agamben)

  • El filósofo italiano Giorgio Agamben recuperó el concepto de «Homo Sacer» para referirse a la situación de los seres humanos en las sociedades contemporáneas.
  • El concepto de «Homo Sacer» se asienta en la idea de que en las sociedades modernas y contemporáneas, la vida como simple hecho de vivir, como pura vitalidad, es una característica que los seres humanos comparten con los demás seres vivos.
  • Cada etapa de la modernidad genera sus propios “hombres sagrados”, es decir, personas que pueden ser muertas sin que otros sean juzgados por haber cometido homicidios, genocidios o cualquier otro delito relacionado.

El Sujeto Posmoderno (Foucault)

  • Michel Foucault consideraba que el sujeto moderno es una construcción social.
  • El saber está relacionado con los enunciados que se consideran verdaderos en cada época histórica. El saber está relacionado con el poder.
  • Desde el siglo XVII comienzan a consolidarse la escuela, el hospital, la prisión y la fábrica donde transcurre la mayor parte de la vida de las personas en los siglos siguientes. Las sociedades modernas se vuelven vigilantes y disciplinarias.
  • Para Foucault, la escuela constituye la preparación para el mundo de la fábrica.
  • Este filósofo propone una estética de la existencia como forma de resistir a las sociedades normalizadoras.

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