El Método Cartesiano y la Duda Metódica

El método propuesto por René Descartes se fundamenta en cuatro reglas esenciales para la búsqueda de la verdad:

• Regla de la Evidencia: No admitir como verdadero nada que no se presente a la mente de forma clara y distinta, evitando la precipitación y la prevención.
• Regla de la División (o Análisis): Dividir cada una de las dificultades que se examinen en tantas partes como sea posible y necesario para su mejor resolución. Solo se puede tener evidencia de las ideas simples.
• Regla de la Síntesis: Conducir ordenadamente los pensamientos, comenzando por los objetos más simples y fáciles de conocer, para ascender poco a poco, como por grados, hasta el conocimiento de los más complejos.
• Regla de la Enumeración y Revisión: Realizar recuentos tan completos y revisiones tan generales que se asegure no haber omitido nada.

Los Tres Momentos de la Duda Cartesiana

Descartes emplea la duda metódica como un camino hacia la certeza. Los tres momentos clave de esta duda son:

1. Duda sobre la información sensorial: Los sentidos a menudo nos engañan. Si dudas de algo, el acto mismo de dudar implica pensar, y si piensas, existes (Cogito, ergo sum).
2. Duda sobre la vigilia y el sueño: No hay indicios ciertos que permitan distinguir el estado de vigilia del sueño. Al soñar, piensas; y al pensar si algo es real o no, piensas, luego existes.
3. Duda sobre la existencia de un genio maligno: La posibilidad de que un genio maligno, sumamente poderoso y astuto, nos engañe en todo. Al pensar si nos engaña o no, el acto de pensar implica la existencia.

Estoicismo

La escuela estoica fue fundada por Zenón de Citio (siglo IV-III a.C.) en Atenas hacia el año 300 a.C. Su nombre hace alusión al lugar donde Zenón impartía sus enseñanzas (la Stoa Poikile o Pórtico Pintado). Su propuesta ética se sintetiza bajo este principio: «Para alcanzar la felicidad, el ser humano debe vivir en conformidad con la naturaleza.»

Para los estoicos, todo lo que acontece está regido y determinado por un principio activo al que denominan Logos universal. Todo ocurre en función de un destino ya prefijado por este Logos; no existe el azar.

Debemos aceptar lo que el destino nos depare, lo cual implica la verdadera sabiduría. Mediante el control y el dominio de las pasiones, los impulsos y los afectos a través de nuestra razón (que participa de ese Logos universal), conseguiremos la sabiduría. Entregarse a las pasiones es entregarse a una vida irreal.

El control de las pasiones propicia la apatheia (ausencia de perturbaciones o sufrimientos). La apatheia, a su vez, conduce a la ataraxia, que propicia la auténtica felicidad.

Aprendizaje por Ensayo y Error

Este concepto fundamental en la psicología del aprendizaje se desarrolló a través de importantes experimentos.

Experimento de Thorndike (Estados Unidos, 1874-1949)

Con Edward Thorndike se iniciaron los experimentos del condicionamiento operante, en los que el sujeto no se limita a reaccionar, sino que, para alcanzar los fines propuestos, debe aprender y usar su conducta instrumentalmente (conducta activa).

Un animal hambriento era colocado en una jaula con el alimento a la vista, pero no al alcance. El animal debía aprender a abrir la jaula mediante acciones simples como presionar un botón o empujar una palanca.

El animal hambriento y excitado empezaba a efectuar una serie de movimientos al azar (ensayos) hasta que conseguía salir. Si se repetía esta acción, el animal tardaba cada vez menos hasta acabar aprendiendo los movimientos; la conducta había sido aprendida.

Cajas de Skinner (Estados Unidos, 1904-1990)

Las formas de aprendizaje estudiadas por B.F. Skinner fueron más famosas y polémicas (por ir contra la libertad de elección).

Skinner perfeccionó los experimentos de Thorndike creando las conocidas cajas de Skinner: cámaras diseñadas para la investigación con animales que incluían mecanismos eléctricos, palancas, etc., para condicionar respuestas en los animales mediante refuerzos (como comida).

Características de la Filosofía de San Agustín

La filosofía de San Agustín de Hipona presenta una visión teológica e histórica profunda:

• Visión lineal del universo: Dios crea cosas nuevas, no se repite. La historia tiene un comienzo (el pecado de Adán y Eva, sin el cual seguiríamos indefinidamente en el paraíso) y un final.
• El sentido de la historia es la salvación y la felicidad del pueblo de Dios.
• Concepción trágica y dualista de la historia: La Ciudad Terrena lucha contra sí misma y contra la Ciudad de Dios.
• Historificación de la naturaleza: El mundo ha sido creado en el tiempo y en el escenario de la naturaleza.
• Hay una meta trascendente, un más allá que solucionará todo (cielo/infierno).
• Papel relevante de la libertad: Somos responsables de nuestras acciones (no hay destino predeterminado).
• La historia es la realización de un plan divino; la dirige Dios.

Falsacionismo

Karl Popper consideró que el verificacionismo incurría en el problema de la inducción, ya que es imposible comprobar todos los casos, pues son infinitos. Por ello, propuso que la solidez de una teoría científica reside en su capacidad de ser refutada, es decir, en su falsabilidad. Una teoría que no puede ser refutada no es científica.

Popper, en su lugar, propuso la concepción falsacionista, que caracteriza a los enunciados científicos por su posibilidad de ser refutados. Cuando una predicción no se corresponde con el resultado del experimento, la teoría se descarta. Es fácil rechazar una teoría cuando falla, pero en el futuro no sabremos si será refutada o no, incluso cuando parece verdadera.

Un ejemplo es la teoría de la relatividad de Einstein, que hace predicciones muy arriesgadas y, por lo tanto, se expone a ser refutada. Las teorías pseudocientíficas, por el contrario, son vagas y flexibles: se caracterizan por adaptarse a cualquier hecho y explicarlo todo con una misma razón. Son teorías que, aunque reciban numerosas verificaciones empíricas, no se arriesgan con predicciones precisas y concretas que puedan contrastarse con la realidad.

Verificacionismo

Es una concepción defendida por los integrantes del positivismo lógico, que sostiene que una afirmación es verdadera si se puede verificar mediante el método científico.

Según estos pensadores, una afirmación se establece cuando se verifica o se confirma mediante experimentos y observaciones. Si no se comprueba, se considera falsa, bajo el principio de que «para creer hay que ver».

Moritz Schlick es uno de los principales representantes de esta corriente. Sostiene que preguntarse por el significado de un enunciado es lo mismo que preguntarse por el método para verificarlo. Si un enunciado no puede verificarse, carece de sentido para la ciencia; si no puede comprobarse, carece de significado. Con esto, se busca separar la ciencia de la filosofía.

Método Resolutivo-Compositivo

La experiencia, entendida como una observación ingenua, pretende ser libre de lo que aparece, se ve y se toca, pero introduce subrepticiamente ciertos modos de pensar socialmente asumidos a través de la tradición y la educación. El método resolutivo-compositivo busca elegir las cualidades matematizadas y las características más relevantes de un fenómeno.

Fases del Método Resolutivo-Compositivo

• Resolución:

  A partir de datos ya existentes, se analiza el fenómeno, utilizando solamente sus propiedades esenciales. Se caracteriza por la intuición de la mente.

• Composición:

  Es la construcción o la síntesis de una hipótesis, enlazando diversas propiedades elegidas.

• Resolución Experimental:

  Es la puesta a prueba de los efectos dados. Este paso se limita a un experimento mental.

Este método tiene una confianza absoluta en la razón matemática, ya que el paso final solo se considerará válido al verse confirmado en la resolución experimental.

Método Hipotético-Deductivo

El método hipotético-deductivo es una estrategia de investigación científica que combina la inducción (para formular hipótesis) y la deducción (para derivar consecuencias observables de esas hipótesis). Se parte de una hipótesis general, de la cual se deducen predicciones específicas que pueden ser contrastadas empíricamente.

Fases del Método Hipotético-Deductivo

• Observación y Recogida de Datos:

  Se observan fenómenos y se recogen datos, identificando sus propiedades y formulando el problema genérico.

• Formulación de Hipótesis:

  Se formula una hipótesis (a menudo de forma matemática) que busca explicar el fenómeno observado. De esta hipótesis se deducen consecuencias que pueden ser contrastadas empíricamente.

• Pruebas Experimentales y Verificación/Falsación:

  Se diseñan y realizan experimentos para contrastar las predicciones derivadas de la hipótesis. La hipótesis se considera verificada si los hechos observados concuerdan con las predicciones. Por el contrario, si los hechos en el mundo no concuerdan con los hechos deducidos de la hipótesis, esta se considera falsada.

• Generalización y Aceptación:

  Si la hipótesis es consistentemente verificada en un número suficiente de casos, se acepta provisionalmente y adquiere validez general, aunque siempre sujeta a futuras refutaciones.