Racionalidad creencial

2.1

Acciones y creencias racionales

(a) Acciones racionales. Para empezar veamos qué es una acción racional.
«Un pasajero en el asiento contiguo del avión en el que vuelo hacia casa inicia una secuencia de gesticulaciones histriónicas abriendo y cerrando la mandíbula. Se tapa la nariz y parece intentar sacar aire por los oídos. Como he hablado con él antes y no veo razones para considerarlo mentalmente desequilibrado, pensaré qué intenta paliar los problemas de taponamiento y dolor de oídos de la despresurización de la cabina de pasajeros en el descenso antes del aterrizaje. Creo que actúa racionalmente al servirse de un medio eficaz ara conseguir satisfacer su deseo de no sufrir dolor de oídos». Una accion es racional si esta hecha siguiendo una regla o un procedimiento que permite conseguir los fines que se propone. Esto quiere decir que la racionalidad se mide en términos ins-trumentales (si es es eficaz como medio para un fin). En este caso, una gesticulación apa-rentemente absurda es totalmente racional pues sirve al propósito de que no se taponen nuestros oídos. Un niño que llora cuando tiene hambre también lleva a cabo una acción racional, pues llamará la atención de un adulto que podrá atenderle.

(b) Creencias racionales. La creencia es cualquier conocimiento •ue tengamos por verdadero En este caso decimos que una creencia es racional si podemos justificar como hemos llegado a la misma;es decir,una creencia es racional si:1ºhay un procedimiento que podria ser utilizado por cualquier otro para llegar a esta creencia.2ºese procedimiento es racional.

p.eje. También es una crencia racional que 2 + 2 = 4 porque podemos (cualquiera de nosotros puede) justificar el procedimiento de la suma (para lo cual necesitaríamos comprender conceptos como el de número natural o el de sucesor). La racio-nalidad de una creencia estriba en que disponemos de un procedimiento para comprobar la verdad o falsedad de lo que creemos. No importa que sea o no verdadera. Una creencia racional pue-de no ser ser verdadera si el procedimiento conduce a una falsedad, pero eso no hace que no sea racional. Para que una creencia sea racional además ese procedimiento tiene que ser uni-versal. Por ejemplo, las apariciones de la Virgen en El Escorial no constituyen una creencia irracional, pues la aparición sólo tiene lugar ante una persona. La contempla-ción de la Virgen está limitada sólo a una o a pocas personas, que se llaman visionarios. Por eso creer en lo que dicen ver es irracional. Confiamos en la experiencia que puede tener todo el mundo; en cambio desconfiamos de las experiencias que sólo pueden tener algunos.

(c) Procedimientos que justifican una creencia racional. El verdadero problema de la racionalidad está en el procedimiento. Porque, ¿qué prodecimientos justifican creencias racionales? En los ejemplos anteriores, el testimonio, directo o indirecto, se con-sidera un procedimiento fiable. Pero sólo fiable. Esto significa que el testimonio no es un pro-cedimiento infalible. Lá experiencia ha demostrado que los testimonios y los documentos son bastante eficaces para justificar la creencia en hechos pasados. Pero es claro un testigo puede mentir y que los documentos pueden haber sido manipulados. Se han producido casos de fraudes en la justificación documental de hechos del pasado. Los diarios de Hitler, aparecidos en los años 80 del pasado siglo, son un claro ejemplo de ello; la demostración de su falsedad y del fraude, en cambio, es la confirmación de que hay un modo de estar seguros de su veracidad.  por eso la autentificación de los mismos (pruebas caligráficas, análisis del papel, etc.) se han convertido en la prueba crucial para creer en los hechos que implican.

Otro procedimiento fiable, que no infalible, para demostrar la racionalidad de una creencia es que la creencia en cuestion este respaldada por las autoridades en la materia o expertos. La experiencia también nos demuestra que es bueno fiarse de los expertos. O bien simplemente porque nosotros no podemos ser expertos en todo ni podemos sa-berlo todo. O bien porque la comprobación de lo que dicen no puede ser hecha por todo el mundo todo el tiempo. Podríamos ver un nuevo planeta en un telescopio, pero no sería posible que todo el mundo pudiera comprobarlo antes de aceptar que se ha descubierto un nuevo planeta. Es más fácil confiar en los astrónomos y en su comuni-dad científica para creer en nuevos planetas o en cualquier otro fenómeno astronómico. La fiabilidad del respaldo de los expertos está no sólo en su competencia sino también en la coincidencia de la comunidad en relación a una cuestión. Lo racional no es tanto confiar en un solo experto cuanto confiar en una comunidad de expertos.Pensemos que la comunidad es más de fiar que el individuo pues los expertos, en plural, son los prime-ros interesados en que no haya fraude en sus disciplinas, ya el fraude acabaría con la confianza que ponemos en su trabajo y de la que depende su trabajo. Es decir,es racional confiar en la comunidad de expertos pues ellos mismos van a ocuparse de poner a prueba ycorroborar que las afirmaciones o descubrimientos de sus colegas son ciertos.Volviendo sobre el caso de los diarios de Hitler, fueron precisamente colegas historiadores los que demostraron que eran falsificaciones. La comprobación de su carácter falso sólo estuvo al alcance de los expertos, en este caso los historiadores que trabajan sobre la figura de Hitler.


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