La minoría de edad kant

Ilustración: término que tradicionalmente se identifica con el siglo XVIII o siglo de las
luces, y que consistió en un movimiento cultural basado en la creencia en la
emancipación del hombre en base a su autonomía racional y como consecuencia de los
éxitos de la ciencia newtoniana. Para Kant, será el momento en el que empiezan a
darse circunstancias que favorecerán la salida del hombre de su antinatural capacidad
de pensar por uno mismo. Una incapacidad que tiene su origen no en la falta de
capacidad o talento natural sino más bien en la actitud: la pereza y la cobardía
incentivada por los tutores y en concreto en materia de religión.
Minoría de edad: expresión usada por el autor para identificar la situación antinatural
de pensar a través de otros, los tutores, no por falta de capacidad sino más bien por
falta de actitud: pereza y cobardía promovida por aquellos para controlar desde sus
prejuicios e impedir la emancipación del género humano en una materia altamente
peligrosa para Kant y que afecta a sus consciencias: la religión.
Falta de entendimiento: expresión Kantiana que hace referencia a la falta de
argumento para justificar una minoría de edad en el hombre, precisamente por la falta
de capacidad intelectual. Precisamente, Kant afirma que todos los hombres nacen de
forma natural con la suficiente autonomía intelectual como para pensar por ellos
mismos. En ese sentido, toda situación de minoría de edad es antinatural y de ahí
justificada con argumentos que no encuentran base y fundamento en la propia
naturaleza humana: más bien en la actitud del hombre por su pereza y cobardía.
Pereza y cobardía: términos usado por Kant para identificar la verdadera y única
causa de que la mayoría de los hombres aún se encuentren en el estado antinatural de
minoría de edad: por una debilidad no natural sino más bien adquirida por las
maniobras de los tutores que fomentan actitudes que impiden que el hombre haga uso
libre de su autonomía intelectual y pueda pensar por él mismo. De ahí que la minoría
de edad tenga su origen en la actitud y no en la propia naturaleza del hombre.
Menores de edad: expresión usada por el autor para identificar la situación
antinatural de pensar a través de otros, los tutores, no por falta de capacidad sino más
bien por falta de actitud: pereza y cobardía promovida por aquellos para controlar
desde sus prejuicios e impedir la emancipación del género humano en una materia
altamente peligrosa para Kant y que afecta a sus consciencias: la religión.
Tutores: término con el que Kant (al margen de considerarlos necesarios en cuanto
que tienen la obligación de fomentar el uso público de la razón de los hombres en
cuanto doctos en alguna materia sobre la que hayan instruido) se refiere a aquellos
tutores que en pleno uso de su situación de privilegio con respecto a los alumnos y
discípulos no fomentan la libertad de pensamiento; más bien la obstaculizan
fomentando el aprendizaje por parte de los hombres y del bello sexo de aquellos
prejuicios que nacen de ellos y que permiten perpetuar en el género humano.
Conciencia moral: expresión usada por Kant para referirse a ese conjunto de normas
morales que nos dirigen en nuestras acciones. Curiosamente, estas normas o máximas
deberían nacer de la propia autonomía del individuo. Sin embargo, y en relación con la
caracterización y crítica de los tutores realizad por Kant, esas normas proceden de
aquellos tutores que a través de sus prejuicios nos lo inculcan sustituyendo
precisamente esas normas morales autónomas que deberían regir nuestra vida. Así,
son otros los que deciden por nosotros lo que está bien o mal. Su origen está claro
para el autor: pereza y cobardía nuevamente.
Mayoría de edad: expresión usada por Kant para designar la situación natural del
hombre que tiene su origen en la autonomía intelectual que no sólo le permite conocer
la realidad con total independencia de ninguna autoridad externa (llámese como
quiera) sino con total independencia para dirigir sus acciones.
Rebaño: término usado por el autor para describir la imagen que él tiene del género
humano en ese preciso momento debido a la imposibilidad de que la gran mayoría,
incluyendo el bello sexo, pueda pensar por ellos mismos. La causa está clara: la pereza
y la cobardía promovida y alentada por los tutores para fomentar y perpetuar sus
prejuicios que obstaculizan la libertad de pensamiento. Sería esta libertad la única que
posibilitaría la Ilustración del género humano.
Libertad: término que en el contexto de la filosofía kantiana adquiere no el significado de la
libertad física, sino más bien una libertad que nace de la posibilidad de hacer públicamente
uso de la razón autónoma de cada hombre en aquellas materias en las que son doctos para
beneficio del género humano y del funcionamiento de la sociedad de forma concreta.
Libertad así entendida que no estaría reñida con el uso privado de la razón que cada uno
desempeñaría en función de su posición o función social.
Piensen por cuenta propia: expresión usada por Kant para designar la situación
natural del hombre que tiene su origen en la autonomía intelectual que no sólo le
permite conocer la realidad con total independencia de ninguna autoridad externa
(llámese como quiera) sino con total independencia para dirigir sus acciones.
Tutores: término con el que Kant (al margen de considerarlos necesarios en cuanto
que tienen la obligación de fomentar el uso público de la razón de los hombres en
cuanto doctos en alguna materia sobre la que hayan instruido) se refiere a aquellos
tutores que en pleno uso de su situación de privilegio con respecto a los alumnos y
discípulos no fomentan la libertad de pensamiento; más bien la obstaculizan
fomentando el aprendizaje por parte de los hombres y del bello sexo de aquellos
prejuicios que nacen de ellos y que permiten perpetuar en el género humano.
Minoría de edad: expresión usada por el autor para identificar la situación antinatural
de pensar a través de otros, los tutores, no por falta de capacidad sino más bien por
falta de actitud: pereza y cobardía promovida por aquellos para controlar desde sus
prejuicios e impedir la emancipación del género humano en una materia altamente
peligrosa para Kant y que afecta a sus consciencias: la religión.
Pensar por si mismo: expresión usada por Kant para designar la situación natural
del hombre que tiene su origen en la autonomía intelectual que no sólo le permite
conocer la realidad con total independencia de ninguna autoridad externa (llámese
como quiera) sino con total independencia para dirigir sus acciones.
Yugo: término usado por el autor para identificar el conjunto de prejuicios que son
perpetuados por los tutores como parte de su educación y que sólo causan pereza y
cobardía en el género humano. Actitudes que se convierten en un lastre y que impiden
la emancipación natural del género humano que le es propia por su autonomía
intelectual natural.
Ilustración: término que tradicionalmente se identifica con el siglo XVIII o siglo de las
luces, y que consistió en un movimiento cultural basado en la creencia en la
emancipación del hombre en base a su autonomía racional y como consecuencia de los
éxitos de la ciencia newtoniana. Para Kant, será el momento en el que empiezan a
darse circunstancias que favorecerán la salida del hombre de su antinatural capacidad
de pensar por uno mismo. Una incapacidad que tiene su origen no en la falta de
capacidad o talento natural sino más bien en la actitud: la pereza y la cobardía
incentivada por los tutores y en concreto en materia de religión.
Prejuicios: término usado por el autor para identificar el conjunto de conocimientos
que son perpetuados por los tutores como parte de su educación y que sólo causan
pereza y cobardía en el género humano. Actitudes que se convierten en un lastre y
que impiden la emancipación natural del género humano que le es propia por su
autonomía intelectual natural
Libertad: término que en el contexto de la filosofía kantiana adquiere no el significado
de la libertad física, sino más bien una libertad que nace de la posibilidad de hacer
públicamente uso de la razón autónoma de cada hombre en aquellas materias en las
que son doctos para beneficio del género humano y del funcionamiento de la sociedad
de forma concreta. Libertad así entendida que no estaría reñida con el uso privado de
la razón que cada uno desempeñaría en función de su posición o función social.
Uso público de la propia razón: expresión kantiana con la que se identifica la
capacidad que tiene todo ser humano, basado en su autonomía intelectual natural, de
usar su razón en cuanto docto de una materia. Su conocimiento le obliga a transmitirlo
a todo el género humano para posibilitar la emancipación del género entero.
Ilustración: término que tradicionalmente se identifica con el siglo XVIII o siglo de las
luces, y que consistió en un movimiento cultural basado en la creencia en la
emancipación del hombre en base a su autonomía racional y como consecuencia de los
éxitos de la ciencia newtoniana. Para Kant, será el momento en el que empiezan a
darse circunstancias que favorecerán la salida del hombre de su antinatural capacidad
de pensar por uno mismo. Una incapacidad que tiene su origen no en la falta de
capacidad o talento natural sino más bien en la actitud: la pereza y la cobardía
incentivada por los tutores y en concreto en materia de religión.
Uso privado: expresión usada por Kant para hacer referencia al uso de la razón que
todo ser humano debería llevar a cabo en cuento miembro de una sociedad y en tanto
que desempeña una función social. Uso que no estaría reñido con la libertad en su
máxima expresión y que junto q este uso debidamente regulado promovería la
emancipación del hombre y su Ilustración: hacer uso público de la razón en cuanto
docto de una materia.
Uso privado: expresión usada por Kant para hacer referencia al uso de la razón que
todo ser humano debería llevar a cabo en cuento miembro de una sociedad y en tanto
que desempeña una función social. Uso que no estaría reñido con la libertad en su
máxima expresión y que junto q este uso debidamente regulado promovería la
emancipación del hombre y su Ilustración: hacer uso público de la razón en cuanto
docto de una materia.

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