1. CarácterÍSTICAS DEL Racionalismo
A)Afirmación de la existencia de una única razón (monismo metodológico):
el Racionalismo filosófico insiste en que la razón y la forma correcta de razonar son universalmente idénticas.
B) Confianza en la capacidad cognoscitiva de dicha razón (dogmatismo):
la razón humana posee en si misma la capacidad para conocer todo cuanto puede conocer utilizando correctamente la razón y no puede existir verdad tan oculta ni realidad tan alejada a la que nuestro conocimiento no pueda llegar.
C) Innatismo cognoscitivo/epistemológico:
de dónde obtiene las verdades que va conociendo? De si misma, de ciertos principios innatos que se encuentran en su interior.
D) Menosprecio o rechazo del valor de las experiencias históricas y culturales
E) Ciencia deductiva:
la razón es capaz de marchar correctamente de una verdad a otra, comenzando por los principios y las verdades más simples para ir ascendiendo a las más complejas, por eso sólo existirá un método adecuado: método racional, y una sola ciencia: la ciencia racional.
F) Seducción por el método matemático:
los racionalistas nos vienen a decir que si los matemáticos han logrado con su método demostrar de manera indudable las verdades de su ámbito, porque no aplicar dicho método al resto de las ciencias para obtener así idéntica certeza y claridad? Porqué no transferir el método matemático a las restantes ciencias?
G) Correspondencia entre el orden del pensamiento y el de la realidad:
el orden y la conexión de las ideas es lo mismo que el orden y la conexión de la realidad.
h) Recurso a Dios: quién garantiza la correspondencia señalada entre el orden del pensamiento y el de la realidad? Pues Dios ya que es el autor de los objetos del mundo físico y de la razón. Así Dios constituye la garantía de nuestro conocimiento y desempeña una función epistemológica fundamental en la filosofía cartesiana.
6. LA DUDA CARTESIANA
Descartes utiliza la duda metódica para eliminar toda falsa verdad. Comienza por dudar de todas las cosas y considerar como falso cuanto pueda ponerse en duda. Comienza su obra con el tema de la duda diciendo que hemos de dudar de todo puesto que el sistema aristotélico se ha demostrado como falso. La duda de Descartes va a ser una duda radical y sin embargo no es un escéptico. La duda cartesiana persigue encontrar una primera verdad mientras que el escepticismo niega que existan verdades absolutas, verdaderas. En la búsqueda de esas verdades plantea la duda a un triple nivel.
PRIMER NIVEL DE DUDA:
Es el de la duda sobre el criterio de verdad. La duda sobre el saber de los antiguos porque si Aristóteles, la mente más poderosa de la antigüedad se equivocó, es prudente dudar no sólo de sus obras, sino de todo el saber de los antiguos. La nueva ciencia debe ignorar el saber de los antiguos.
SEGUNDO NIVEL DE DUDA:
Es el de la duda del conocimiento sensible. Los sentidos nos engañan y es prudente dudar de quienes nos han engañado alguna vez. Con los sentidos no llegamos a la verdad. Platón había condenado la Doxa como el grado de conocimiento más bajo, los sentidos no son el órgano con el que captamos la verdad. Descartes condena el conocimiento empírico, el conocimiento basado en la experiencia, el que nace de los sentidos.
TERCER NIVEL DE DUDA:
Es el de la duda a las verdades matemáticas. Descartes se ve obligado a dudar de Dios e imagina que no existe Dios y que en su lugar existe un genio maligno que emplea todas sus partes en hacerme creer como evidentes verdades que no lo son. Descartes ha dudado de todo, pero es entonces cuando descubre una verdad de la que no se puede dudar que dice “ si yo dudo yo pienso y si yo pienso yo insisto porque la nada no piensa.” < cogito,=»» ergo=»» sum=»pienso,» luego=»» existo=»»>>.
7. LA PRIMERA VERDAD INDUBITABLE “COGITO, ERGO SUM”
La proposición “pienso, luego existo” es verdadera e indudable puesto que si dudo, pienso y nadie puede pensar sin ser. Unos toman esta proposición como la conclusión de un silogismo partiendo de la premisa “todas las cosas que piensan, existen”. Otros afirman que no es necesario afirmar el pensamiento para alcanzar la existencia, sino que bastaba cualquier otra actividad como “camino, luego existo”. Se trata de alcanzar una primera verdad partiendo del presupuesto de que Descartes ha puesto todo en duda. Entre las cosas que puso en duda está su propio cuerpo, si no hay seguridad sobre la existencia del cuerpo, no puede afirmarse con seguridad absoluta que se camina. El caminar se puede dudar pero no el hecho de pensar, y al estar seguro de que pienso, estoy también seguro de que existo en cuanto a ser pensante. Para llegar a la demostración de la existencia del cuerpo tendrá primero Descartes que probar la existencia de Dios.
8. LA EXISTENCIA DE Dios (SOLIPSISMO)
Descartes sale de la duda porque descubre un premium verum que plantea que yo existo como un alma y no como un cuerpo. Soy “res cogitans”, una cosa que piensa, por tanto, el premium verum es que existo yo como un alma. Después de esto Descartes cae en el problema del solipsismo y lo supera analizando las ideas contenidas en el alma. Estas ideas se dividen en ideas adventicias;
Contienen un mayor número de ideas y proceden de la experiencia, ideas facticias;
nacen de la imaginación/fantasía que tienen la capacidad de unir dos o más ideas adventicias creando una nueva idea, ideas innatas;
Son aquellas ideas que han nacido conmigo y son la idea de Dios y las ideas matemáticas.
Dice que la idea de Dios es la de un ser máximamente perfecto al cual no le puede faltar ningún atributo que implique perfección como es el de la existencia. Deduce la existencia de Dios de la esencia de Dios. A este argumento se le llama “argumento ontológico”. Dice también que la idea de Dios es la del ser máximamente perfecto y mi alma no puede ser causa de la idea de Dios porque mi alma es imperfecta y finita y Dios es perfecto e infinito. Dos de los grandes atributos de Dios son la omnipotencia con la que ha creado el mundo y todas las armas y el de la bondad con la que le ha dado el mismo lenguaje que él habló en el acto de creación, el lenguaje matemático.
LA CRÍTICA DE Kant AL ARGUMENTO ONTOLÓGICO DE Descartes
Criticó este argumento afirmando que es inválido porque con la razón humana no se puede demostrar la existencia de Dios. Para Kant la existencia es una de las 12 categorías del entendimiento que deben reunir las condiciones materiales y formales del conocimiento. Las condiciones materiales exigen que pueda ser percibido por los sentidos y tengamos una intuición sensible del ser y de Dios no lo tenemos porque no lo percibimos a través de los sentidos. Las condiciones formales consiste en que el ser exista en el espacio y tiempo y Dios no ocupa un espacio ni existe en el tiempo. Para Kant no se puede deducir de la esencia de Dios la existencia de Dios.
9. EXISTENCIA DE LAS COSAS MATERIALES
Descartes demuestra la existencia de los cuerpos fuera de mi del siguiente modo: Dios ha puesto en mi una poderosa inclinación a creer que las sensaciones que experimento son producidas realmente por cuerpos situados fuera de mi, y como Dios es infinitamente bondadoso no puede haber puesto en mi una inclinación para que yo me engañe, por tanto los cuerpos existen. La prueba de la existencia de cada una de las cosas supone la prueba anterior de la existencia de Dios y la imposibilidad de que Dios nos engañe. El orden es: comienzo por la duda metódica, afirmación de la primera verdad, derivación de la evidencia como criterio de verdad, demostración de la existencia de Dios y de las cosas materiales.
PROBLEMA DE LA COMUNICACIÓN ENTRE LAS DOS SUSTANCIAS: CUERPO-ALMA
Descartes plantea este problema cuando afirma que dos sustancias de distinta naturaleza no pueden comunicarse entre sí y puesto que cuerpo y alma son dos sustancias distintas (corpórea e incorpórea) no pueden comunicarse.
SOLUCIÓN DE Descartes
Para Descartes el alma está encerrada en una pequeña glándula del cerebro, glándula pineal donde confluyen todos los nervios. Los nervios son conductos vacíos en cuyo interior hay unos corpúsculos diminutos, los espíritus animales. Cuando mi cuerpo entra en contacto con otro cuerpo, el órgano sensorial activa los espíritus animales desde el órgano sensorial hasta la glándula pineal y al impactar se modifican dando lugar a que el alma tenga una sensación y viceversa. Lo desarrolla Descartes en su obra “De homine”. No respeta el principio de la comunicación entre dos sustancias de distinta naturaleza, ya que no pueden comunicarse.
SOLUCIÓN DE MALEBRANCHE
Desarrolla ésta solución en su obra “La búsqueda de la verdad” y la denomina ocasionalismo.
Está de acuerdo con Descartes en la afirmación de que dos sustancias de distinta naturaleza no pueden comunicarse entre si, por tanto los espíritus animales cuando impactan en la glándula pineal no pueden ser la causa de la sensación, sino que es Dios en el contacto de mi cuerpo con otros cuerpos que pone en mi alma la sensación porque Dios y alma son sustancias de una misma naturaleza y pueden comunicarse entre sí. En segundo lugar, dice que no son los espíritus animales los que mueven mi brazo sino que es Dios quien lo mueve con ocasión de la representación de mi alma de moverlo y ello es coherente puesto que Dios es omnipotente.
SOLUCIÓN DE Leibniz
Resume su solución en la doctrina de la armónía preestablecida, que dice que Dios no pone en mi alma la sensación en el mismo instante en que mi cuerpo choca con otro cuerpo, si no que Dios ya puso en mi alma en el momento de nacer todas las sensaciones que la causa había de experimentar a lo largo de toda la vida y Dios las ordenó secuencialmente para que las fuéramos sintiendo en el momento preciso coincidiendo perfectamente con los contactos de mi cuerpo con otros cuerpos.
MEDITACIONES METAFÍSICAS
MEDITACIÓN PRIMERA: DE LAS COSAS QUE PUEDEN PONERSE EN DUDA
No es necesario probar que todas las meditaciones son falsas, basta con rechazarlas todas. Se ha experimentado que los sentidos nos engañaban y es prudente no fiarse nunca por entero de quienes nos han engañado alguna vez (duda del conocimiento sensible). Tema del sueño: recuerdo haber sido engañado, mientras dormía, por ilusiones semejantes. Las cosas que nos representamos en sueños deben formarse a semejanza de algo real y verdadero. No hay un verdadero Dios fuente de verdad, sino un genio maligno el cual me ha engañado. Las cosas exteriores no son más que ilusiones de los que Dios se sirve para atrapar mi credulidad.
MEDITACIÓN SEGUNDA: DE LA NATURALEZA DEL ESPÍRITU HUMANO, Y QUE ES MÁS FÁCIL DE CONOCER QUE EL CUERPO (EXISTENCIA ALMA Y CUERPOS)
Concluye esta meditación afirmando que existan los cuerpos o no, no puedo conocer con la imaginación la esencia de ellos porque la esencia ha de ser inmutable y la imaginación sólo acepta cualidades que cambia. La esencia inmutable de los cuerpos sólo puede ser conocido por medio del entendimiento y esa esencia es la extensión inteligible que no es una extensión determinada sino la suma de todas las formas extensas que pueden adoptar un cuerpo. Al hacer de la extensión la esencia de los cuerpos Descartes geometriza la esencia de los cuerpos porque la extensión es el fundamento de la geometría.
MEDITACIÓN QUINTA: DE LA ESENCIA DE LAS COSAS MATERIALES; Y OTRA VEZ DE LA EXISTENCIA DE Dios
Se afirma que la certeza y la verdad de toda ciencia dependen sólo del conocimiento del verdadero Dios; de manera que, antes de conocerlo, yo no podía saber con perfección cosa alguna. Y ahora que lo conozco, tengo el medio de adquirir una ciencia nueva/perfecta acerca de infinidad de cosas: y no sólo acerca de Dios mismo, sino también de la naturaleza corpórea, en cuanto que ésta es objeto de la pura matemática, que no se ocupa de la existencia del cuerpo.
MEDITACIÓN SEXTA: DE LA EXISTENCIA DE LAS COSAS MATERIALES; Y DE LA DISTINCIÓN REAL ENTRE EL ALMA Y EL CUERPO
Descartes se centra en la facultad de sentir, para ver si a través de ella encuentra una vía de demostración de la existencia de los cuerpos. Los sentidos nos engañan; en el caso de los externos el engaño es frecuente. Con el interno yo capto el dolor, sin embargo cuando percibo a través de la sensación una cualidad de un cuerpo experimento una poderosa inclinación a creer que ese cuerpo existe y que es la causa de la sensación que experimento. De los cuerpos conocemos cualidades que forman nuestro conocimiento, estas cualidades se dividen en cualidades primarias:
Son aquellas que percibimos por dos o más sentidos (movimiento, reposos, forma extensa… ) y en cualidades secundarias:
Son aquellas que yo percibo a través de un solo sentido (color, olor, sabor, temperatura). Para Descartes las cualidades secundarias no son objetivas, sino subjetivas, mientras que las primarias si son objetivas porque son matematizables, de forma que sólo lo que tiene estructura matemática resulta realmente objetivo.