Aristóteles y Platón: Fundamentos Filosóficos, Ética y la Teoría de las Cuatro Causas

Aristóteles y Platón: Convergencias y Divergencias Filosóficas

Aristóteles y Platón han sido dos de los filósofos más importantes, que han trascendido con sus escritos a nuestra cultura. Sin embargo, acerca de ellos encontramos varias diferencias y similitudes fundamentales en sus planteamientos.

Comparativa de sus Doctrinas

Metafísica: Ideas vs. Formas

La diferencia fundamental entre la metafísica de Platón y la de Aristóteles radica en que, para el primero, los conceptos son Ideas (entidades universales y perfectas, existentes en un mundo inteligible), mientras que para el segundo, son formas (inmanentes a las cosas sensibles, constituyendo su esencia).

Epistemología y la Naturaleza del Alma

En el ámbito de la epistemología y la concepción del alma, encontramos distinciones significativas. Para Aristóteles, el hecho de que las «formas» no sean eternas ocasiona una gran diferencia en lo que se refiere al alma. Ambos pensaban que el alma tenía tres partes y que pertenecía a un mundo intangible, es decir, que no se podía tocar o percibir. No obstante:

  • Para Platón, el alma era eterna e inmortal, al igual que todas las Ideas.
  • Para Aristóteles, el alma no es eterna, pues es una «forma» intrínseca al cuerpo; es mortal, se corrompe y se desvanece con el cuerpo, y su desarrollo dependerá del aprendizaje y la experiencia vital.

Ética: El Camino hacia la Sabiduría y la Felicidad

En la ética:

  • Platón piensa que una persona que llega al conocimiento completo de las Ideas, especialmente la Idea del Bien, es una persona sabia y virtuosa.
  • Mientras que Aristóteles cree que para ser feliz (eudaimonia) hay que ejercitar las virtudes intelectuales (como la prudencia o phronesis), así como las éticas (como la valentía o la templanza), haciendo uso de la razón en sus acciones para moderar los vicios y las costumbres, encontrando el justo medio.

Política: La Sociedad Ideal y el Ser Social

Acerca de la política:

  • Para Aristóteles, el hombre es por naturaleza un ser social (zoon politikon). En la naturaleza de todas las cosas hay una tendencia o deseo de alcanzar la perfección, pero un humano por sí solo no puede conseguirlo; por eso se agrupa con otros formando una sociedad (polis), que es el espacio donde puede realizarse plenamente.
  • Para Platón, la sociedad ideal, expuesta en La República, es aquella en la que cada clase social cumple la función que le corresponde según la parte del alma que predomina en sus miembros. Estas clases son:
    • Productores (alma apetitiva)
    • Guardianes (alma irascible)
    • Gobernantes-filósofos (alma racional)

Aristóteles: Vida, Obra y la Explicación del Cambio

Aristóteles nació en Estagira, Macedonia, en el año 384 a.C. y murió en Calcis, Eubea, en el 322 a.C. Perteneció a la época clásica de la filosofía griega y fue un destacado filósofo, polímata y científico. Escribió numerosas obras que abarcan una vasta gama de disciplinas, entre las que se encuentran Ética Nicomáquea, Metafísica, Física y Política. Junto con su maestro Platón, es considerado uno de los pilares fundamentales de la filosofía occidental. Sus obras y pensamientos han ejercido una influencia profunda y duradera desde su difusión hasta la actualidad.

La Teoría de las Cuatro Causas en la Física

El texto que se examina parece centrarse en un fragmento de la Física de Aristóteles, donde la idea principal es su teoría de las cuatro causas. Mediante esta teoría, Aristóteles explica el movimiento (kinesis) y el cambio (metabolé) en los seres naturales, considerándolos principios fundamentales para comprender la naturaleza (physis). Dichas cuatro causas son: la causa material, la causa formal, la causa eficiente y la causa final.

Desde un primer momento, se puede apreciar el afán de Aristóteles por mantener ordenadas todas sus hipótesis, causas y elementos durante el desarrollo de su pensamiento. Este afirma que el objetivo principal de la investigación filosófica y científica es conocer; conocer todos y cada uno de dichos elementos con minuciosidad. Aristóteles sostiene que para lograr conocer y extraer la forma (esencia) de la sustancia (ousía) es necesario comprender todos sus cambios y movimientos. Es ahí donde decide estructurar su explicación del cambio en torno a estas cuatro causas.

1. Causa Material (hyle): La Sustancia Primordial

La primera causa, a la que Aristóteles denomina causa material (en griego, hyle), es, como su nombre indica, la materia de la que está formada una cosa, aquello que subyace y se mantiene a través del cambio. Esta idea se ilustra en el texto con el ejemplo que proporciona Aristóteles: «por ejemplo, el bronce respecto de la estatua o la plata respecto de la copa». El bronce o la plata son la materia de sus respectivos objetos y, a su vez, representan la potencia (dynamis) de que tanto el bronce podría llegar a ser estatua como que la plata podría llegar a ser copa. En esto se demuestra que la materia se relaciona con las posibilidades de la sustancia de llegar a ser diferentes cosas.

2. Causa Formal (morphé o eidos): La Esencia Determinante

La segunda causa es la causa formal (en griego, morphé o eidos), que se refiere a la forma, la esencia o el modelo de una cosa. Esta causa es la que determina qué es una cosa y hace que sea lo que es, diferenciándola de otras. Un ejemplo de esta idea serían las peras: todas comparten una forma o esencia común (ser pera) que, cuando ves una por primera vez, aunque nunca antes la hayas visto, te permite distinguirla como tal.

3. Causa Eficiente (kinoun): El Motor del Cambio

La tercera causa, denominada causa eficiente o motriz (en griego, to hothen he kinesis, «aquello de donde proviene el movimiento»), es el agente o motor que desencadena el proceso de cambio o producción de la sustancia; es decir, aquello que provoca el paso de la potencia al acto (energeia o entelecheia). Por ejemplo, retomando la ilustración anterior, un escultor representaría la causa eficiente al utilizar la causa material (el bronce) para realizar una escultura (actualizando una causa formal).

4. Causa Final (telos): El Propósito Inherente

La cuarta y última causa, considerada por Aristóteles como la más importante en muchos contextos, es la causa final (en griego, telos). Es el fin, propósito u objetivo hacia el cual se dirige un proceso de cambio o una acción. Aristóteles intenta mostrar con esto que detrás de cada cambio o movimiento natural hay una finalidad intrínseca. En el ámbito de la acción humana, llega a la conclusión de que la causa final que buscamos, y la meta última que intentamos alcanzar en nuestra vida, es la felicidad (eudaimonia).

Con esta completa teoría de las cuatro causas, Aristóteles logra ofrecer una explicación inteligible del movimiento y el cambio, y con ello, de la naturaleza del ser, lo que nos permite avanzar en el camino hacia el conocimiento.

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