1. Vida y cultura.
La filosofía de Ortega intenta armonizar los conceptos de vida y cultura, que se ven tan contrapuestos como objetivismo y relativismo. Mientras el objetivismo niega el sentido de la vitalidad y la considera inferior a la cultura; el relativismo afirma los elementos irracionales de la vitalidad despreciando los valores subjetivos de la cultura. Son posturas antagónicas. Para él, este es el tema de nuestro tiempo: convertir la realidad pura y abstracta en razón vital, dando a la vida y la cultura la importancia que merecen. La cultura es para Ortega el conjunto de producciones que labora el hombre en su condición de náufrago con el objetivo de sobrevivir al mundo en que nos encontramos arrojados. La vida necesita la claridad que nos ofrece el pensamiento, la cultura; ya que no vivimos para conocer, si no sabemos y conocemos para vivir. La cultura brota de la propia vida, y de sus necesidades. Por otro lado este autor entiende la vida como la realidad radical, el principio último y fundamental, hablando siempre de la vida singular de cada uno. La vida es algo que tenemos que hacer, es el naufragio. Es lo que Hacemos, lo que nos pasa, teniendo en cuenta las circunstancias con las que nos encontramos individualmente. Para Ortega, vivir es estar en el mundo, convivir con la circunstancia, asumirla y salvarla.
La filosofía de Ortega intenta armonizar los conceptos de vida y cultura, que se ven tan contrapuestos como objetivismo y relativismo. Mientras el objetivismo niega el sentido de la vitalidad y la considera inferior a la cultura; el relativismo afirma los elementos irracionales de la vitalidad despreciando los valores subjetivos de la cultura. Son posturas antagónicas. Para él, este es el tema de nuestro tiempo: convertir la realidad pura y abstracta en razón vital, dando a la vida y la cultura la importancia que merecen. La cultura es para Ortega el conjunto de producciones que labora el hombre en su condición de náufrago con el objetivo de sobrevivir al mundo en que nos encontramos arrojados. La vida necesita la claridad que nos ofrece el pensamiento, la cultura; ya que no vivimos para conocer, si no sabemos y conocemos para vivir. La cultura brota de la propia vida, y de sus necesidades. Por otro lado este autor entiende la vida como la realidad radical, el principio último y fundamental, hablando siempre de la vida singular de cada uno. La vida es algo que tenemos que hacer, es el naufragio. Es lo que Hacemos, lo que nos pasa, teniendo en cuenta las circunstancias con las que nos encontramos individualmente. Para Ortega, vivir es estar en el mundo, convivir con la circunstancia, asumirla y salvarla.
2. Rdad y perspectiva.
Estas dos nociones aparecen en el texto igualmente ligadas. Pero hay que tener en cuenta que la realidad tiene un carácter previo, pues aparece ante mí y no es un mero producto de mi conciencia. De la superación del Realismo y del idealismo, lo repetimos una vez más, se sigue ante todo que la realidad primera y radical es nuestra vida, pues en ella arraiga y aparecen tanto yo mismo como las cosas. Es verdaderamente importante comprender el sentido que tiene en Ortega en cuanto realidad. En efecto, no significa realidad única o más importante: se trata sencillamente de aquella en la que arraigado, radica o se dan todas las demás realidades. Ahora bien, la realidad, entendida como el ser de las cosas, es algo que no nos es dado con las cosas mismas,sino q las tenemos que descubrir con el pensamiento, pues para este Filósofo no existe una homogeneidad entre el conocimiento y lo real, entre el sujeto que conoce y el objeto conocido. En el texto podemos apreciar que la noción de realidad está vinculada a la de perspectiva: esta es la única manera de acceder a la realidad y conocerla, es su condición de posibilidad misma, puesto que el ser de las cosas se pone de manifiesto y es conocido tan solo a partir de perspectivas concretas, históricas o personales. La perspectiva no deforma la realidad, sino que lo hace posible. Por eso Ortega afirma que el ser del mundo no es materia ni conciencia , Si no perspectiva: lo real consiste en una pluralidad de perspectivas que deben integrarse. Finalmente conviene señalar que la nacíón de la perspectiva está relacionada con la de circunstancia que también nos constituye . Uno a de ser fiel a la propia perspectiva para intentar salvar la circunstancia, comprendíéndola y dotándola de sentido e intentando en lo posible su transformación. La única perspectiva falsa es aquella que pretende ser objetiva.
Estas dos nociones aparecen en el texto igualmente ligadas. Pero hay que tener en cuenta que la realidad tiene un carácter previo, pues aparece ante mí y no es un mero producto de mi conciencia. De la superación del Realismo y del idealismo, lo repetimos una vez más, se sigue ante todo que la realidad primera y radical es nuestra vida, pues en ella arraiga y aparecen tanto yo mismo como las cosas. Es verdaderamente importante comprender el sentido que tiene en Ortega en cuanto realidad. En efecto, no significa realidad única o más importante: se trata sencillamente de aquella en la que arraigado, radica o se dan todas las demás realidades. Ahora bien, la realidad, entendida como el ser de las cosas, es algo que no nos es dado con las cosas mismas,sino q las tenemos que descubrir con el pensamiento, pues para este Filósofo no existe una homogeneidad entre el conocimiento y lo real, entre el sujeto que conoce y el objeto conocido. En el texto podemos apreciar que la noción de realidad está vinculada a la de perspectiva: esta es la única manera de acceder a la realidad y conocerla, es su condición de posibilidad misma, puesto que el ser de las cosas se pone de manifiesto y es conocido tan solo a partir de perspectivas concretas, históricas o personales. La perspectiva no deforma la realidad, sino que lo hace posible. Por eso Ortega afirma que el ser del mundo no es materia ni conciencia , Si no perspectiva: lo real consiste en una pluralidad de perspectivas que deben integrarse. Finalmente conviene señalar que la nacíón de la perspectiva está relacionada con la de circunstancia que también nos constituye . Uno a de ser fiel a la propia perspectiva para intentar salvar la circunstancia, comprendíéndola y dotándola de sentido e intentando en lo posible su transformación. La única perspectiva falsa es aquella que pretende ser objetiva.
1. Vida y cultura. La filosofía de Ortega intenta armonizar los conceptos de vida y cultura, que se ven tan contrapuestos como objetivismo y relativismo. Mientras el objetivismo niega el sentido de la vitalidad y la considera inferior a la cultura; el relativismo afirma los elementos irracionales de la vitalidad despreciando los valores subjetivos de la cultura. Son posturas antagónicas. Para él, este es el tema de nuestro tiempo: convertir la realidad pura y abstracta en razón vital, dando a la vida y la cultura la importancia que merecen. La cultura es para Ortega el conjunto de producciones que labora el hombre en su condición de náufrago con el objetivo de sobrevivir al mundo en que nos encontramos arrojados. La vida necesita la claridad que nos ofrece el pensamiento, la cultura; ya que no vivimos para conocer, si no sabemos y conocemos para vivir. La cultura brota de la propia vida, y de sus necesidades. Por otro lado este autor entiende la vida como la realidad radical, el principio último y fundamental, hablando siempre de la vida singular de cada uno. La vida es algo que tenemos que hacer, es el naufragio. Es lo que Hacemos, lo que nos pasa, teniendo en cuenta las circunstancias con las que nos encontramos individualmente. Para Ortega, vivir es estar en el mundo, convivir con la circunstancia, asumirla y salvarla.
2. Rdad y perspectiva. Estas dos nociones aparecen en el texto igualmente ligadas. Pero hay que tener en cuenta que la realidad tiene un carácter previo, pues aparece ante mí y no es un mero producto de mi conciencia. De la superación del Realismo y del idealismo, lo repetimos una vez más, se sigue ante todo que la realidad primera y radical es nuestra vida, pues en ella arraiga y aparecen tanto yo mismo como las cosas. Es verdaderamente importante comprender el sentido que tiene en Ortega en cuanto realidad. En efecto, no significa realidad única o más importante: se trata sencillamente de aquella en la que arraigado, radica o se dan todas las demás realidades. Ahora bien, la realidad, entendida como el ser de las cosas, es algo que no nos es dado con las cosas mismas,sino q las tenemos que descubrir con el pensamiento, pues para este Filósofo no existe una homogeneidad entre el conocimiento y lo real, entre el sujeto que conoce y el objeto conocido. En el texto podemos apreciar que la noción de realidad está vinculada a la de perspectiva: esta es la única manera de acceder a la realidad y conocerla, es su condición de posibilidad misma, puesto que el ser de las cosas se pone de manifiesto y es conocido tan solo a partir de perspectivas concretas, históricas o personales. La perspectiva no deforma la realidad, sino que lo hace posible. Por eso Ortega afirma que el ser del mundo no es materia ni conciencia , Si no perspectiva: lo real consiste en una pluralidad de perspectivas que deben integrarse. Finalmente conviene señalar que la nacíón de la perspectiva está relacionada con la de circunstancia que también nos constituye . Uno a de ser fiel a la propia perspectiva para intentar salvar la circunstancia, comprendíéndola y dotándola de sentido e intentando en lo posible su transformación. La única perspectiva falsa es aquella que pretende ser objetiva.
1. Vida y cultura. La filosofía de Ortega intenta armonizar los conceptos de vida y cultura, que se ven tan contrapuestos como objetivismo y relativismo. Mientras el objetivismo niega el sentido de la vitalidad y la considera inferior a la cultura; el relativismo afirma los elementos irracionales de la vitalidad despreciando los valores subjetivos de la cultura. Son posturas antagónicas. Para él, este es el tema de nuestro tiempo: convertir la realidad pura y abstracta en razón vital, dando a la vida y la cultura la importancia que merecen. La cultura es para Ortega el conjunto de producciones que labora el hombre en su condición de náufrago con el objetivo de sobrevivir al mundo en que nos encontramos arrojados. La vida necesita la claridad que nos ofrece el pensamiento, la cultura; ya que no vivimos para conocer, si no sabemos y conocemos para vivir. La cultura brota de la propia vida, y de sus necesidades. Por otro lado este autor entiende la vida como la realidad radical, el principio último y fundamental, hablando siempre de la vida singular de cada uno. La vida es algo que tenemos que hacer, es el naufragio. Es lo que Hacemos, lo que nos pasa, teniendo en cuenta las circunstancias con las que nos encontramos individualmente. Para Ortega, vivir es estar en el mundo, convivir con la circunstancia, asumirla y salvarla.
2. Rdad y perspectiva. Estas dos nociones aparecen en el texto igualmente ligadas. Pero hay que tener en cuenta que la realidad tiene un carácter previo, pues aparece ante mí y no es un mero producto de mi conciencia. De la superación del Realismo y del idealismo, lo repetimos una vez más, se sigue ante todo que la realidad primera y radical es nuestra vida, pues en ella arraiga y aparecen tanto yo mismo como las cosas. Es verdaderamente importante comprender el sentido que tiene en Ortega en cuanto realidad. En efecto, no significa realidad única o más importante: se trata sencillamente de aquella en la que arraigado, radica o se dan todas las demás realidades. Ahora bien, la realidad, entendida como el ser de las cosas, es algo que no nos es dado con las cosas mismas,sino q las tenemos que descubrir con el pensamiento, pues para este Filósofo no existe una homogeneidad entre el conocimiento y lo real, entre el sujeto que conoce y el objeto conocido. En el texto podemos apreciar que la noción de realidad está vinculada a la de perspectiva: esta es la única manera de acceder a la realidad y conocerla, es su condición de posibilidad misma, puesto que el ser de las cosas se pone de manifiesto y es conocido tan solo a partir de perspectivas concretas, históricas o personales. La perspectiva no deforma la realidad, sino que lo hace posible. Por eso Ortega afirma que el ser del mundo no es materia ni conciencia , Si no perspectiva: lo real consiste en una pluralidad de perspectivas que deben integrarse. Finalmente conviene señalar que la nacíón de la perspectiva está relacionada con la de circunstancia que también nos constituye . Uno a de ser fiel a la propia perspectiva para intentar salvar la circunstancia, comprendíéndola y dotándola de sentido e intentando en lo posible su transformación. La única perspectiva falsa es aquella que pretende ser objetiva.