Desarrollo del Mundo Moderno: Aporte de la Ciencia Moderna a la Cultura Occidental
Primera Etapa: Mezcla de Ideas Medievales y Modernas (Siglo XIV)
Durante el siglo XIV, comenzaron a surgir ideas sobre cómo la razón y la ciencia impactaban en la construcción del mundo por parte del hombre, y cómo este mismo hombre se mostraba reticente ante ciertas concepciones tradicionales.
Encontramos cuatro textos que ilustran este choque entre una visión tradicionalista y una moderna, científica y fundamentada en la razón:
- Tomás Moro (Utopía): Describe la existencia de una isla con una sociedad casi perfecta.
- Tommaso Campanella (La ciudad del sol): Presenta la misma figura: una ciudad perfecta donde todas las personas trabajan en pos de un bien común.
- Francis Bacon (Nueva Atlántida): Describe una ciudad, ubicada dentro de un volcán, que gracias a los avances de la ciencia había logrado generar un bienestar general en la sociedad.
Choque entre las Nuevas Culturas y la Mutua Incredulidad
Esto significó, sobre todo para la institución cristiana, la sensación de que sus verdades estaban siendo atacadas. Frente a estos ataques, apareció el tribunal de la Santa Inquisición, que buscaba enjuiciar a todas aquellas personas que planteaban verdades distintas a las cristianas.
Se produjeron persecuciones de muchos intelectuales de distintas áreas, quienes sufrieron condenas por pensar diferente, por pensar en función de la razón.
Segunda Etapa: Revolución Científica y el Empirismo (Siglo XV)
El primer modelo racional que se conoció en el contexto de la cultura occidental fue el Empirismo. Esta es una corriente filosófica que plantea que el conocimiento y la verdad se pueden alcanzar simplemente a través de la observación constante de los hechos. A partir de esta observación, se pueden construir verdades.
Ejemplo: Son verdades que nacen de la observación individual, no necesariamente objetivas.
El empirismo, como primer modelo para alcanzar el conocimiento racional, tenía ciertas limitaciones. La principal era que el conocimiento obtenido era vinculante solo a la persona que realizaba la observación (se convertía en su verdad, no de forma general o de carácter universal).
Por lo tanto, las verdades que un individuo podía alcanzar eran limitadas. Y se consideraba que: «No todos podíamos observar todas las verdades», lo que se resumía en la frase: «Tu verdad no es mi verdad».
Tercera Etapa: Revolución Científica y el Racionalismo (Siglo XVI)
Aparece René Descartes, quien, al sustentar el método empírico en la razón, le otorga una característica de objetividad y universalidad. De ahí nace el Racionalismo.
¿Cuál es la diferencia entre Empirismo y Racionalismo?
- El Empirismo acepta que el conocimiento y la verdad se alcanzan a través de la simple observación.
- El Racionalismo plantea lo mismo, a través de la observación, PERO ADEMÁS a través de la experimentación. Es decir, llevar esa observación a distintos contextos y, si se alcanza el mismo resultado, se obtendrán verdades objetivas, universales y aplicables a todos.
De ahí surgen las teorías.
El Racionalismo postula: «Si la verdad se construye a través de la observación y la experimentación, la creencia y la fe no pueden ser observadas ni experimentadas, por lo tanto, no pueden ser consideradas como verdades». Desde esta perspectiva, el hombre debe creer únicamente en aquello que la razón le señala como verdad o conocimiento, y no en lo que la religión (cristiana) definía como verdad.
Hasta ese momento, el hombre había sustentado prácticamente todos sus conocimientos, tanto sobre sí mismo como sobre el entorno, en función de la fe. La llegada del Racionalismo significó encontrar un terreno fértil para cuestionar absolutamente todo.
Si se cuestiona todo, a todo hay que aplicarle el Racionalismo. Este se convertiría en el pilar de la ciencia, y la ciencia comenzaría a dar respuestas muy rápidas y efectivas a todos los cuestionamientos que el hombre tenía sobre sí mismo y su mundo occidental.
Llega un momento en que la ciencia no puede dar respuestas con la misma rapidez, volviéndose cada vez más lenta. Esto significaría que se comenzaría a dudar de la eficacia de la ciencia para resolver los problemas.
El Racionalismo, finalmente, postula que si experimentamos y observamos, llegamos al conocimiento de verdades aplicables en cualquier lugar o momento, siendo el razonamiento matemático la base fundamental.
El Racionalismo, como modelo, tuvo numerosos ejemplos durante los siglos XVI y XVII, impulsando avances en diversas ciencias (física, química, astronomía, etc.).
Cuarta Etapa: La Revolución Industrial (Siglos XVIII – XIX)
El Racionalismo, como modelo, presentaría diversas situaciones.
Si se combina la idea de que el hombre debe observar y experimentar para alcanzar el conocimiento y la verdad, sumado a la libertad individual para ejercer esta búsqueda y el deseo inherente de todo ser humano de mejorar sus oportunidades y calidad de vida a través de la innovación, se abrirían todas las oportunidades para el inicio de la Revolución Industrial, fundamentada en la racionalidad, la libertad y la innovación.
La Revolución Industrial crecería progresivamente y no se detendría hasta la actualidad, transformando por completo el escenario cultural del hombre y sus formas de creencia en el mundo.
¿Qué hace la Revolución Industrial?
La Revolución Industrial representó un cambio fundamental en el desarrollo tecnológico e informático, con repercusiones no solo en esos ámbitos, sino en todas las facetas de la vida humana.
Fue un período de cambio tecnológico (comenzaron a aparecer la radio, el fax, hasta llegar a internet).
Surgen la clase obrera y el proletariado.
¿Cuál es la diferencia entre ambos?
- El proletariado es una masa de trabajadores que carece de una especialización o perfeccionamiento.
- Mientras que la clase obrera está compuesta por trabajadores con perfeccionamiento o una capacitación puntual en un área específica.
- El lumpenproletariado se refiere a aquella masa que no realiza un trabajo «socialmente» aceptado (como quienes pedían limosnas, ejercían el trabajo sexual o realizaban los trabajos más bajos).
Los Efectos de la Revolución Industrial sobre la Cultura de la Modernidad
Se identifican cuatro elementos clave:
Generación de una Conciencia de Clase
En aquellos tiempos, no existía una filosofía que diera sentido al rol de los trabajadores en el entorno cultural.
Se contrastaba el trabajo preestablecido (en una industria) con el trabajo manual (ligado al hombre y la tierra).
El hombre comienza a alinearse con la máquina, a entender su vida y su sociedad en función de la productividad. La productividad se convierte en lo más importante: a mayor producto, mayores ganancias, y con mayores ganancias, una mejor condición o calidad de vida.
Las personas buscan mejores condiciones de vida, lo que, paradójicamente, disminuye la tasa de natalidad. Una mejor remuneración se asocia a una mejor calidad de vida.
La mujer ingresa al mundo laboral, y al mismo tiempo, el trabajo infantil se vuelve común. El problema radicaba en que, si no existía regulación para el trabajo del hombre, menos aún para el de la mujer y el niño.
La falta de regulación, de seguros de cesantía y de sistemas de vacaciones generó lo que se denominó el «Problema Obrero«. Los obreros se levantaron contra el sistema, buscando mejores condiciones laborales y de vida (de ahí surgen organizaciones como la Organización Internacional del Trabajo, etc.).
Desarrollo de Formas de Energía Autónomas a la Naturaleza
La utilización del vapor y la electricidad permitió una agilización de todos los instrumentos que el hombre utilizaba para producir, movilizarse y comunicarse (mayor rapidez para transportarse a lugares donde antiguamente los viajes eran muy extensos).
Desarrollo de Problemáticas Sociales («Cuestión Social»)
La generación de conciencia social, en el marco de la «cuestión social», se relaciona no solo con que el hombre tome conciencia de pertenecer a una clase, sino también con las enfermedades que afectan a esa clase. Aparecen las denominadas «enfermedades del alma«:
- La depresión
- El alcoholismo (y drogadicción)
- El suicidio
Estos eran los grandes males que afectaban a los trabajadores en ese tiempo.
Crecimiento de las Urbes
Crecimiento de las ciudades, observando cómo aparecen las grandes comunidades de más de 100.000 habitantes.
Por ejemplo, Santiago acumula más del 50% de la población chilena, convirtiéndose en un lugar sobrepoblado. Muchos elementos arquitectónicos han desaparecido para dar cabida a la población.