Fundamentos de la Racionalidad Práctica y la Acción Humana

La Racionalidad Práctica y la Acción Humana

Racionalidad Práctica

La racionalidad práctica se enfoca en cómo utilizamos la razón para guiar nuestra conducta. Esto abarca tanto la producción de objetos como nuestras interacciones sociales. Se divide en dos grandes ámbitos:

  • Praxis: Orienta nuestra conducta en general.
  • Poiesis: Orienta la acción productiva.

La Acción Humana

Una acción se define como cualquier operación que un agente realiza de manera consciente y voluntaria. Si bien solo los seres humanos somos capaces de realizar acciones, no todo lo que hacemos se considera una acción. Para que algo sea una acción, se requieren tres elementos esenciales:

  • Agente: Debe existir alguien que lleve a cabo la acción.
  • Conciencia: El agente debe saber lo que hace y por qué lo hace.
  • Voluntad: Es necesario que el agente elija realizar la acción.

Existen diversos tipos de acciones:

  • Básica: Requiere únicamente el deseo del agente.
  • Mediana: Se realiza mediante la ejecución de otra acción.
  • Compuesta: Constituye un conjunto de acciones simples.
  • Convencional: Acciones que necesitan un acuerdo entre los miembros de un grupo.
  • Colectiva: Implica la participación de varios agentes.

¿Por Qué Actuamos?

Actuamos impulsados por un móvil, que es la razón para hacer o dejar de hacer algo. Los móviles se clasifican en:

  • Necesidades: Aquello que es imprescindible para la supervivencia o el bienestar básico.
  • Intereses: Factores que contribuyen a nuestro bienestar general.
  • Deseos: Ideas o anhelos que quisiéramos que se hicieran realidad.

Nuestras necesidades a menudo despiertan nuestros intereses, aunque también existen intereses independientes. Los deseos son una característica única del ser humano.

¿Para Qué Actuamos?

Cuando actuamos conscientemente en función de nuestros deseos, la realización de estos se convierte en el fin de nuestra conducta. Es importante notar que hay necesidades o intereses de los que no somos plenamente conscientes.

Los elementos clave para entender el propósito de la acción son:

  • Sentido: Todo aquello para lo que sirve la acción.
  • Intención: Lo que se quiere conseguir con la acción.

La Acción Moral y la Reflexión Ética

Moral y Ética

La moral es el conjunto de costumbres y normas que regulan nuestras acciones y nos permiten clasificarlas como correctas o incorrectas. Por otro lado, la ética es la reflexión filosófica que busca aclarar en qué consiste la moral, cuáles son sus fundamentos y cómo se aplica en diversos casos.

Los Ingredientes Morales

La moral es una tarea intrínseca a nuestra existencia. Nuestras decisiones contribuyen a formar hábitos, que a su vez se transforman en virtudes o vicios, y estos últimos forjan nuestro carácter.

  • Hábito: Tendencia a actuar de una determinada manera, adquirida por repetición.
  • Carácter: Modo de ser forjado a partir de los hábitos.
  • Temperamento: Manera de ser natural, que condiciona e influye en nuestras reacciones.
  • Vicios y Virtudes: Actitudes interiorizadas. Las virtudes nos inclinan hacia el bien, mientras que los vicios nos alejan de él.
  • Libertad: Capacidad para elegir entre diversas opciones.
  • Voluntad: Facultad que nos otorga la capacidad de preferir unas posibilidades sobre otras.
  • Conciencia Moral: Facultad que nos permite captar los principios generales para distinguir lo bueno de lo malo.

Referentes Morales

Nuestra conducta moral se guía por diversos referentes:

  • Valores: Cualidades de cosas o personas que las hacen atractivas o deseables.
  • Normas: Reglas que ordenan la conducta.
  • Principios: Normas de carácter muy general.
  • Ideales: Metas que orientan nuestra conducta.

Debates Fundamentales en Ética

El Relativismo Moral

El relativismo moral es una doctrina que sostiene que los valores morales y los juicios sobre la moral varían entre diferentes sociedades y épocas. Según esta perspectiva, nada es bueno o malo de manera absoluta.

  • Los Sofistas: Defendieron el convencionalismo, argumentando que las normas morales son convencionales. Sostenían que si las mismas normas valieran para todos, no habría disputas morales, y si existieran normas universales, estas deberían provenir de la naturaleza.
  • Spinoza: Defendió el subjetivismo, afirmando que los valores dependen de los deseos individuales; lo que es bueno para uno puede ser malo para otro.
  • Nietzsche: Propuso la necesidad de superar la moral tradicional e inventar nuevos valores más allá del bien y del mal para favorecer la vida. Distinguió entre:
    • Moral de señores: Propia de una élite aristocrática y guerrera.
    • Moral de esclavos: Resultado de la oposición a la moral de señores, a menudo basada en el resentimiento.

El Universalismo Moral

El universalismo moral sostiene que existen valores absolutos que sirven como criterio para juzgar cualquier acción, norma o código de conducta.

  • Sócrates: Defendía los valores absolutos y propuso el intelectualismo moral, la idea de que el conocimiento del bien lleva a actuar bien.
  • Platón: Defendió la existencia de un mundo inteligible, jerárquico, en cuya cúspide se encuentran los valores.
  • Tomás de Aquino: Consideraba a Dios como el fundamento de la moral. Sus leyes constituyen el criterio para determinar el valor de cada acción. La naturaleza humana, según él, presenta sustancialidad, animalidad y racionalidad, lo que da lugar al iusnaturalismo.
  • Scheler: Propuso un universalismo moral sin recurrir a realidades trascendentales, argumentando que los valores son cualidades objetivas que se captan por intuición moral.

Principales Corrientes Éticas

Éticas de la Felicidad

Estas éticas buscan definir qué constituye la felicidad y cómo alcanzarla.

  • Estoicismo: Defiende que la felicidad se obtiene de modo autosuficiente, viviendo en conformidad con la naturaleza.
  • Eudemonismo (Aristóteles): Sostiene que la felicidad consiste en la autodeterminación personal y surge de la satisfacción de llegar a ser aquello que uno debe ser.
  • Hedonismo (Epicuro): La felicidad consiste en la ausencia del dolor corporal y la perturbación del alma. Epicuro distinguía tres tipos de placeres:
    • Placeres naturales y necesarios.
    • Placeres naturales pero no necesarios.
    • Placeres no naturales ni necesarios.
  • Utilitarismo (Bentham, Stuart Mill): Sostiene que una acción es moralmente buena si proporciona la mayor cantidad de placer o felicidad para el mayor número de personas.

Éticas de la Justicia

Estas éticas se centran en los principios que deben regir nuestras acciones y la organización social.

  • Ética Formal de Kant: Kant afirma que una ética debe decirnos cómo debemos actuar y debe ser puramente formal, es decir, independiente de los fines concretos. Distinguió tres tipos de acciones en relación con el deber:
    • Acción contraria al deber.
    • Acción conforme al deber.
    • Acción por deber.
  • Ética Dialógica (Apel, Habermas): Sostiene que las decisiones morales deben adoptarse teniendo en cuenta a todos los afectados por ellas. La importancia del diálogo en la moral llevó a Apel y Habermas a establecer dos principios fundamentales:
    • Principio de universalización: Las consecuencias de una norma deben ser aceptables para todos los afectados.
    • Principio de la ética del discurso: Las normas morales deben ser el fruto de un diálogo en el que participen todos los afectados.

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