Evolución del Pensamiento Físico: Del Geocentrismo al Heliocentrismo

La Física a lo largo de la historia

Nos remontamos a Aristóteles. Es uno de los autores que más daño ha hecho a la física. Aristóteles entiende la naturaleza así: el universo tiene como centro a la Tierra, esta quieta y en torno a ella giran los demás planetas, trazando un movimiento uniforme en una órbita perfecta. Para los griegos, el movimiento perfecto es un círculo.

Para los griegos no existe nada infinito, si bien no sabían dónde estaba el fin del universo, ellos consideraban que existía. Aristóteles lo llama la esfera de estrellas fijas. Dentro de esa esfera está la Tierra y las estrellas están fijas en el espacio. La Luna lo que hace es delimitar dos realidades que viven juntas pero que son muy distintas.

La visión Aristotélica del universo (Geocentrismo)

El mundo sublunar y traslunar

Todo lo que está dentro de la órbita lunar (A) lo denomina sustancias del mundo sublunar. Y todo lo que está más allá de la órbita de la Luna lo denomina sustancias del mundo traslunar (B).

Todo lo que existe en el mundo sublunar es malo, porque todo se degenera; existe el tiempo, por tanto, nacen y mueren las cosas.

Todo lo que existe en el mundo traslunar es bueno, porque las cosas no cambian y no se degeneran. El movimiento aquí, es el movimiento perfecto que describe un círculo.

El movimiento, en el mundo sublunar, es un caos, mientras que en el traslunar es perfecto, un círculo.

Aristóteles decía que entre los planetas existía una sustancia imperceptible que facilitaba el movimiento circular, a la que llamó éter.

La teoría de los lugares naturales y los cuatro elementos

En el mundo sublunar existe el movimiento de arriba-abajo, izquierda-derecha, no existiendo el movimiento circular. Para explicar esto recurre a la teoría de los lugares naturales.

Empédocles habla de los cuatro elementos: la realidad está compuesta por la tierra, el aire, el agua y el fuego. De la combinación de estos elementos surge la realidad. Aristóteles defiende esta teoría y dice que estos elementos están superpuestos unos encima de otros, y que cada elemento busca unirse al elemento que le da origen. Ej.: Las piedras con la tierra. Esta teoría de los lugares naturales explicaría el movimiento, para Aristóteles, solo en el mundo sublunar.

El sistema que entiende que el centro del universo es la Tierra se denomina sistema geocéntrico.

Del Geocentrismo al Heliocentrismo

Ptolomeo y el sistema Aristotélico-Ptolemaico

Los astrónomos griegos vieron un defecto en la teoría de Aristóteles: los movimientos de los planetas no son circulares.

Será Ptolomeo, un astrónomo, quien exprese que la Tierra estaba un poco separada del centro del universo, por tanto, los movimientos de los planetas no podían ser circulares. Así se cambió el nombre al sistema geocéntrico, que pasó a llamarse sistema Aristotélico-Ptolemaico.

Nicolás Copérnico y la propuesta heliocéntrica

A partir del siglo XV se producen muchos cambios. Encontramos a Nicolás Copérnico, un cura polaco que investigó cuestiones astronómicas. Copérnico se da cuenta de que si coloca al Sol en el centro del universo podría explicar mucho más fácilmente el movimiento de los planetas.

La teoría de Copérnico no solamente contradecía a Aristóteles sino también a la Iglesia; por tanto, no publica las conclusiones de su obra.

Galileo Galilei: Confirmación y conflicto

Cuando Galileo lee la obra de Copérnico llega a la conclusión de que esta teoría es la verdadera: que el Sol era el centro del universo y la Tierra giraba a su alrededor como un planeta más.

Galileo escribió una obra donde defendía esta tesis, y aquí comenzó su disputa con la Iglesia.

La disputa con la Iglesia

La Iglesia defendía una interpretación literal del libro de Josué, en el que este le pedía a Dios un día en el que no anocheciera para poder ganar una batalla, y en el que dice textualmente: “Que separen el sol y la luna”. Esta afirmación implica que el Sol y la Luna estaban moviéndose alrededor de la Tierra.

La disputa de Galileo con la Iglesia hace que esta nombre a Belarmino, un astrónomo muy importante, para refutar a Galileo.

Galileo no solo tenía en contra a la Iglesia sino a todos los humanistas, quienes defendían que el Hombre era el centro de todo. Los físicos, al no tener ninguna percepción del movimiento de la Tierra, estaban en contra de la teoría de Galileo. Finalmente, Galileo cumplió condena.

Aportaciones y el principio de economía

Las aportaciones de Galileo al mundo físico y astronómico se mantienen hoy en día, como el fenómeno de rotación y traslación, o en física, el movimiento del péndulo.

Una de las críticas de Belarmino a Galileo es que no podía demostrar empíricamente su tesis. Sin embargo, será la tesis de Galileo la que triunfe.

Galileo se basó en el concepto de G. de Ockham de que las cosas se hacen de la forma más simple posible (principio de economía). La naturaleza y Dios hacen las cosas lo más sencillamente posible.

La teoría del heliocentrismo (el Sol, centro del universo) ya había sido expuesta mucho antes por Aristarco de Samos, pero nadie le había dado importancia.

La Nueva Ciencia: Características

La imagen del mundo que nace de esta nueva concepción física se llama nueva ciencia.

Características de la Nueva Ciencia:

  • Todo saber se debe expresar de forma matemática; es la matematización de la realidad.
  • Todo saber queda reducido exclusivamente al movimiento.
  • No hay un sistema de referencias absolutas, pero las leyes no varían de un sistema a otro.
  • Todo fenómeno se explica a partir de sus causas eficientes y de las leyes que lo rigen.
  • El mundo se concibe como un gran mecanismo, donde el hombre es una pieza más, dando a la física un carácter determinista. Visión del mundo que funciona como una gran máquina.

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