Conformados a su imagen

UD 4

1. Implicaciones de la imagen aristotélica del universo

  • Es un modelo esencialista. La explicación de los fenómenos naturales se basa fundamentalmente en la esencia del objeto.

  • Es un modelo finalista. Aristóteles piensa en la naturaleza como un gran organismo vivo y, dentro de ella, cada individuo tiene una esencia que determina la finalidad que intenta alcanzar a lo largo de su existencia y que condiciona su evolución y desarrollo. Cada sustancia tiende al fin que le es propio, es decir, ocupa su lugar natural.
    La perfección consiste en alcanzar dicha finalidad. 

  • La cosmología aristotélica es geocéntrica y geoestática: La Tierra está inmóvil en el centro del universo

  • El universo es finito. Su límite viene marcado por la esfera de las estrellas fijas. 

  • El universo, en su conjunto, es eterno. La existencia del motor inmóvil confiere al universo esa carácterística. Al ser eterno, es incorruptible

  • El universo es heterogéneo. Porque en él se distinguen dos regiones diferenciadas cualitativamente: el mundo sublunar y el mundo supralunar

  • Se mueven las esferas, no los cuerpos celestes. Y su movimiento es circular y uniforme. 

  • No existe el vacío y, en definitiva, tampoco existe el espacio en el sentido en que lo entendemos hoy. El espacio, en todo caso, coincide con el universo en su conjunto. Más allá no hay nada. No tiene sentido preguntarse qué hay más allá del espacio.

  • En primer lugar, la distinta perfección y jerarquización del universo y de los seres que lo componen. El mundo sublunar, sometido al cambio y a la degeneración, es imperfecto. El mundo supralunar es perfecto. La máxima perfección, el motor inmóvil, absoluto reposo y acto puro: Dios físico y Dios metafísico aristotélico. 

  • Es un modelo determinista. Esta visión de la naturaleza afirma que todo lo que hay y sucede en la naturaleza está de antemano prefijado, condicionado y establecido. Esto se justificaría porque, a su juicio, la naturaleza se rige por dos principios: 

  1. Principio de causalidad. «Todo efecto tiene una causa», en el universo se da un encadenamiento necesario de unos fenómenos con otros. Por ello, si conocemos los primeros (causas), podemos saber inmediatamente los segundos (efectos). 

  1. Principio de conservación. A pesar de los cambios observados, en la naturaleza siempre hay algo que permanece (la sustancia), lo que permite un comportamiento regular y cíclico de los fenómenos

El determinismo propone que la naturaleza es un sistema cerrado y acabado, en el que no hay sucesos al azar ni «novedades». Por este motivo, el comportamiento regular de los fenómenos naturales se puede describir mediante leyes, más o menos exactas, las cuales, a su vez, permiten predecir acontecimientos futuros, si se conocen las condiciones iniciales.

2. En qué consiste la “teoría de los lugares naturales” de Aristóteles:

Para el tema que nos ocupa nos centraremos en los cambios de tipo local, que son los estudiados en la física. Y para empezar distinguiremos los cambios naturales y los cambios violentos.

  • Los cambios naturales se derivan de la propia composición de los seres terrestres inertes. Recordemos que estos están compuestos por los cuatro elementos. Así, en el caso de la piedra, al estar compuesta sobre todo de tierra, y al ser este un elemento pesado, tenderá al lugar que le es propio por su naturaleza o esencia y por eso caerá

Esta explicación aristotélica recibe el nombre de “teoría de los lugares naturales”. Por tal motivo, todo lo que esté compuesto en su mayor parte de tierra tenderá a estar en el suelo; por encima, todo aquello que contenga agua; seguidamente, lo que contenga aire; finalmente, aquello en lo que predomine el fuego. Esta teoría, además, explica el tipo de trayectoria que tienen los movimientos/cambios en el mundo sublunar: todos estos serán ascendentes o descendentes y, al mismo tiempo, rectilíneos ¿Qué busca este movimiento? El reposo. El movimiento no es más que un paso necesario para alcanzarlo. 

3. Explica la importancia del concepto de sustancia en la imagen aristotélica del universo

  • Es un modelo esencialista. La explicación de los fenómenos naturales se basa fundamentalmente en la esencia del objeto.   

  • Es un modelo finalista. Aristóteles piensa en la naturaleza como un gran organismo vivo y, dentro de ella, cada individuo tiene una esencia que determina la finalidad que intenta alcanzar a lo largo de su existencia y que condiciona su evolución y desarrollo. Cada sustancia tiende al fin que le es propio, es decir, ocupa su lugar natural. La perfección consiste en alcanzar dicha finalidad.

La sustancia, noción clave en su ontología, lo será también en su cosmología. Según la Metafísica, existen tres géneros distintos de ellas, de los que dos son sensibles y el tercero, no:

  1. La sustancia sensible corruptible. Como los animales, las plantas. Etc. Su estudio es competencia de la física, pues implica movimiento.

  2. La sustancia sensible eterna, incorruptible (los cielos, los astros). Su estudio corresponde a una parte de la física, la astronomía, porque también implica movimiento.

  3. La sustancia suprasensible inmóvil, eterna, cuyo estudio corresponde a la metafísica o teología.

Los distintos tipos de sustancias existentes determinarán que Aristóteles distinga dos partes diferenciadas en el universo: el mundo sublunar y el mundo supralunar.

4.Explica las correcciones que introduce Ptolomeo en la concepción aristotélica del universo

Las correcciones introducidas por Ptolomeo supusieron la elaboración de una teoría sumamente compleja y enrevesada que pretendía dar cuenta de las apariencias, fenómenos y de lo que se ve adaptándose al modelo aristotélico.

Correcciones:

Las órbitas son levemente excéntricas. Sólo así era posible explicar la diferencia de brillo de los planetas y el hecho de que el sol parezca mayor al mediodía en invierno que en verano. Además, la órbita del planeta no gira en torno al punto excéntrico (O) a la Tierra, sino que describe un círculo (epiciclo) e  en torno a un punto imaginario (D), el cual engendra una nueva circunferencia (deferente) en torno al punto excéntrico. Este artificio permite explicar los movimientos retrógrados pero entonces los planetas no giran realmente en torno a la Tierra.

También la ciencia aristotélica postulaba la uniformidad de los movimientos circulares, pero los planetas parecen ir a veces más deprisa, por ello hubo que fingir un ecuante, es decir, un punto excéntrico al círculo deferente. El punto D gira de manera uniforme en torno a tal ecuante Q, pero no lo hace en torno a O. Este modelo se mantuvo a pesar de su enrevesada complejidad.Porque:

  • Seguía aceptando una Tierra inmóvil y más o menos en el centro 

  • Emplea las órbitas circulares uniformes

  • Servía para predecir con bastante precisión los movimientos de los cuerpos celestes

  • Permitía correcciones según aumentaba la precisión de las observaciones 

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