Fundamentos Metafísicos: De las Vías de Santo Tomás a la Duda Cartesiana

Introducción a la Metafísica: De la Teología a la Modernidad

El presente documento aborda dos pilares fundamentales del pensamiento occidental: la demostración de la existencia de Dios según Santo Tomás de Aquino y el punto de partida de la filosofía moderna con René Descartes.

I. Las Cinco Vías de Santo Tomás de Aquino (Suma Teológica, I, q. 2, a. 3)

La primera parte de la Suma Teológica, cuestión 2, artículo 3, se centra en el estudio de la existencia de Dios. Santo Tomás presenta objeciones, considera el dato revelado, ofrece una solución y responde a dichas objeciones. Propone cinco vías para demostrar Su existencia.

Naturaleza de las Vías

Las Vías son demostraciones quia o a posteriori, es decir, se parte de los efectos observables en el mundo para llegar a la Causa primera.

Los nombres de las cinco Vías son:

  • Movimiento (Vía I)
  • Causalidad Eficiente (Vía II)
  • Contingencia (Vía III)
  • Grados de Perfección (Vía IV)
  • Finalidad u Orden (Vía V)

Estructura Común de las Vías

Todas las vías comparten una estructura lógica:

  1. Punto de Partida (Hecho de Experiencia): Se capta por los sentidos y se trasciende en el conocimiento. Por ejemplo: en el mundo hay movimiento; en el mundo hay causas eficientes; existen seres contingentes; hay diversos grados de perfección; existe un orden o finalidad en el mundo.
  2. Aplicación del Principio de Causalidad (Apartado A): Se aplica el principio pertinente al punto de partida (ej. todo lo que es movido es movido por otro; toda causa causada lo es por otra, etc.).
  3. Imposibilidad del Proceso al Infinito (Apartado B): Se demuestra que esta cadena de causas subordinadas no puede ser infinita, sino que debe tener un principio. Aquí se produce el salto ontológico, o la prueba metafísica por excelencia. Santo Tomás parte de la experiencia, pero su conclusión no es sensiblemente experimentable, sino que trasciende a lo inteligible.

El punto de llegada es una realidad superior que da razón del ser a las cosas, a la cual llamamos Dios. Así se señala el punto de llegada:

  • Vía I: Dios existe como Motor Inmóvil.
  • Vía II: Dios existe como Causa no Causada.
  • Vía III: Dios existe como Ser Necesario.
  • Vía IV: Dios existe como Perfección Absoluta.
  • Vía V: Dios existe como Inteligencia Ordenadora o Fin Último.

El Conocimiento de Dios por Analogía

Demostrada la existencia de Dios, surge la pregunta sobre qué es Dios. Aunque no es posible un conocimiento absoluto, cabe conocerlo por analogía o semejanza, lo cual supone tres aspectos:

  1. Afirmación: Toda perfección que hay en las criaturas también la posee Dios.
  2. Negación: Toda imperfección de las criaturas no está en Dios.
  3. Eminencia: Se afirma una determinada perfección, pero se eleva a un grado sumo o superlativo.

Los nombres o atributos divinos permiten expresar qué es Dios. Hay atributos como: Dios es simple, infinito, bondad, trascendente, y atributos operativos como: Dios es inteligente, omnipotente, providencia.

Relación entre Ciencia y Fe

El interés fundamental de Santo Tomás consiste en solucionar el problema de las relaciones entre ciencia (razón) y fe, aportando como solución que debe haber una colaboración entre ambas.

Son distintas por:

  • Origen: La razón es humana; la fe es sobrenatural.
  • Objeto: La razón busca la verdad demostrable; la fe se ocupa de verdades reveladas.

No obstante, Santo Tomás afirma que debe haber ayuda mutua, de modo que la fe y la razón demuestren que creer es algo racional.

Otros Argumentos sobre la Existencia Divina

Junto con las vías metafísicas, existen otros argumentos:

  • Argumento Ontológico (San Anselmo, siglo XI): “Dios es el ser más perfecto que puede pensarse; luego tiene que existir, porque la existencia es una perfección y si no existiera ya no sería lo más perfecto que puede pensarse, cayendo en contradicción”.
  • Pruebas Morales: Se basan en el sentimiento profundo en la conciencia de todos los hombres, las aspiraciones del corazón a la verdad, bondad y belleza, que solo Dios puede saciar.
  • Pruebas de Consenso: El consentimiento universal de que todos los pueblos han creído en un ser superior, e incluso quienes afirman haberlo experimentado en su vida posterior.

Estas pruebas ofrecen la misma certeza que las vías metafísicas de Santo Tomás. Por ello, se distinguen posturas filosóficas frente a la existencia de Dios:

  • Ateos: Niegan la existencia de Dios.
  • Agnósticos: Niegan que la razón pueda llegar a conocer a Dios.
  • Fidelistas: Sostienen que la fe es lo único válido para demostrar la existencia de Dios.
  • Ontologistas: Consideran que no es necesario demostrar nada porque Dios es una realidad inmediata para nosotros.

II. René Descartes y el Nacimiento de la Filosofía Moderna

La obra principal de Descartes es el “Discurso del Método”, que es un compendio y evaluación de su pensamiento, considerado una autobiografía intelectual. También se le conoce como “Reglas para la dirección del espíritu”. Fue publicado anónimamente en 1637 en Holanda, y no en Francia. Esta obra precede a “Meteoros y Dióptrica”.

Estructura del “Discurso del Método”

Se divide en seis partes:

  1. Diversas consideraciones acerca de las Ciencias.
  2. Reglas de su método.
  3. Otras tantas reglas de moral.
  4. Cómo demostrar la existencia del alma humana y de Dios.
  5. Cuestiones sobre física, medicina, nuestra alma y las bestias.
  6. Razones que le han llevado a escribir esta obra.

Otras obras suyas son: “Meditaciones Metafísicas”, “Principios de Filosofía”, “Tratado de las Pasiones” y “Tratado del Mundo”.

Contexto Histórico y Biográfico

Descartes nació en 1596, en Francia. En 1619, tuvo una visión nocturna en la que se le manifestó la necesidad de buscar un método universal que diera consistencia a todo el saber, interpretando su vocación filosófica como un llamamiento divino. Murió en 1650 enseñando a María Cristina de Suecia.

De su época destacan tres elementos:

  1. El Absolutismo Regio: El poder del Rey era absoluto, marcando la transición del sistema feudal al absolutismo monárquico. Descartes busca fundar un saber absoluto.
  2. La Contrarreforma: Respuesta católica a las reformas protestantes (Lutero). Influyó en la reforma del Carmelo, la Compañía de Jesús (San Ignacio de Loyola) y el modelo educativo de la juventud. La Iglesia utilizó el Concilio de Trento y la Inquisición, culminando las luchas con la Paz de Westfalia en 1648.
  3. El Triunfo de la Nueva Ciencia: Copérnico, Kepler, Galileo, Newton, etc., asentaron la ciencia experimental con el método científico. Descartes, Leibniz, Spinoza, Locke y Hume coincidieron en que las matemáticas son la base del nuevo modelo del saber. Descartes pertenece al Racionalismo, doctrina que sostiene que la razón es lo único necesario para el conocimiento, en contraposición al Empirismo, que se apoya en los sentidos.

Influencias y Legado

En Descartes influyen el pensamiento Aristotélico y la educación Escolástica. Recibe el ideal humanista del Renacimiento (antropocentrismo). También recibe influencias de la nueva ciencia (Copérnico, Galileo, Newton), y en concreto de Bacon, de quien toma la idea del método. Se encuentra una clara influencia Platónica en su teoría del hombre como unión accidental de cuerpo y alma.

Descartes influirá en Spinoza (quien lleva hasta sus últimas consecuencias la definición cartesiana de sustancia), en su discípulo Malebranche (quien resuelve la unión alma-cuerpo con el Ocasionalismo), y en filósofos posteriores como Kant, Existencialistas (Sartre) y Positivistas (Comte). Con Descartes da comienzo el espíritu de la modernidad.

III. El Método Cartesiano: La Duda Radical

Descartes quiere elaborar un sistema filosófico al estilo matemático. Para alcanzar la verdad, duda de todo. Las características de su duda son:

  • Metódica: Es el instrumento para llegar a la verdad.
  • No es escéptica: Busca la realidad absoluta, no es dudar por dudar.
  • Universal: Desconfía de todo y parte de cero.
  • Teorética: Duda del saber, pero no de la moral (deja la realidad práctica aparte).
  • No es un fin en sí mismo: Es el punto de partida de su nueva filosofía, llevada al extremo (hiperbólica).

Motivos para la Duda

Descartes identifica varios motivos para dudar:

  1. Los Sentidos: Algunas veces nos engañan y nos llevan al error, por lo que no podemos fiarnos plenamente de ellos.
  2. Distinción entre Vigilia y Sueño: No es posible distinguir con certeza si estamos despiertos o soñando, pues los sueños pueden parecer reales.
  3. El Genio Maligno: Se postula la hipótesis de que existe un ser todopoderoso y maligno que nos induce a creer que estamos en lo cierto cuando nos equivocamos, incluso en los conocimientos matemáticos más evidentes.

El Cogito: La Primera Certeza

Llegado a este punto, Descartes descubre una verdad de la que no puede dudar: la existencia de un yo que duda. Como dudar es pensar, puede afirmar: “Si pienso, existo”.

Análisis del Cogito (“Ego Sum”)

En el análisis del cogito hay dos elementos: pensar y existir.

Para Descartes, pensar no es un puro acto mental, sino un conjunto de actividades (dudar, entender, juzgar, afirmar, negar, querer, imaginar, sentir, etc.). El cogito abarca operaciones de orden racional, volitivo y sentimental, todas ellas partes de su propia interioridad, que descubren su ser y su existencia.

El cogito es la certeza que resiste todos los ataques de la duda. Es imposible dudar de que se está dudando; no se puede dudar del pensamiento sin que este pensamiento se dé, y si el pensamiento se da, se da la existencia.

Aunque las cosas pensadas puedan ser falsas o no existir, el hecho de que yo las piense es absolutamente cierto. Para dudar, hace falta pensar, y para pensar, hace falta existir. Aunque todo sea falso, debo admitir que yo, el que a lo mejor se engaña al pensar esas cosas, soy un ser que piensa y, por lo tanto, un ser que existe.

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