Pensadores Clave en la Filosofía de la Ciencia
Este documento explora las ideas fundamentales de destacados filósofos de la ciencia, sus contribuciones a la epistemología y los debates sobre la naturaleza y los límites del conocimiento científico.
Karl Popper: El Falsacionismo y el Criterio de Demarcación
Karl Popper, filósofo austriaco del siglo XX, situó el criterio de demarcación entre enunciados científicos y no científicos en la falsabilidad. Para Popper, una teoría es científica si puede ser refutada o falsada por la experiencia. Este enfoque, conocido como falsacionismo o racionalismo crítico, sostiene que las teorías científicas no pueden ser afirmadas como verdaderas de manera definitiva, sino que solo pueden ser descartadas como falsas si no superan las pruebas empíricas. El falsacionismo es uno de los pilares del método científico, proponiendo que contrastar una teoría significa intentar refutarla mediante un contraejemplo.
Thomas Kuhn: Paradigmas y Revoluciones Científicas
Thomas Kuhn, filósofo, físico e historiador de la ciencia del siglo XX, es célebre por su obra La estructura de las revoluciones científicas. Su concepto central es el de paradigma, que define como una matriz disciplinar. Esta matriz abarca las cosmovisiones conceptuales, creencias (tanto científicas como metafísicas), valores y técnicas que comparten los miembros de una comunidad científica dada.
Kuhn argumentó que la historia de la ciencia no avanza de forma continua o acumulativa, sino a través de revoluciones científicas. Una revolución científica implica una redefinición total de la realidad, donde cambian tanto los objetos de estudio como los conceptos fundamentales. Según Kuhn, la realidad misma depende de una matriz teórica; los datos siempre están cargados de teorías. Una teoría actúa como unas «gafas» que nos permiten ver las cosas, y nuestra visión está intrínsecamente ligada a las estructuras conceptuales. El acto de ver con los ojos no puede separarse del acto de ver con la mente. Por tanto, la ciencia no progresa por acumulación, sino por rupturas y cambios de paradigma.
Tesis de la Inconmensurabilidad
La tesis de la inconmensurabilidad, propuesta por Kuhn, sostiene que no existe una realidad común a dos paradigmas distintos; cada paradigma opera desde una realidad diferente, constituyendo «mundos» distintos. Afirmar que un paradigma es «mejor» que otro carece de sentido, ya que no hay una base neutral para la comparación. ¿Cómo podemos hablar de una aproximación a la verdad si cada nuevo paradigma (una nueva imagen del mundo) reemplaza al anterior y se encuentra infinitamente alejado del precedente? Carece de sentido una convergencia de contenido conceptual (verdad) porque cada cambio de paradigma colapsa enteramente el paradigma precedente. Los paradigmas no pueden compararse porque no tienen nada en común; no existe un «ojo de Dios» (una perspectiva neutra y objetiva) desde el cual evaluarlos.
Paul Feyerabend: Anarquismo Epistemológico
Paul Feyerabend, filósofo austriaco del siglo XX, es conocido como el «anarquista» de la ciencia. Aunque fue amigo de Popper, no compartía sus ideas, siendo un crítico del racionalismo metodológico. Feyerabend defendía que la ciencia se sirve de todo para elaborar una teoría, postulando que «todo vale» para construir una teoría científica. Sostenía que la ciencia no es un dominio ajeno a la irracionalidad, sino que comparte con el mito creencias irracionales.
El anarquismo epistemológico, desarrollado por Feyerabend, es una teoría que sostiene que no existen reglas metodológicas útiles o libres de excepciones que rijan el progreso de la ciencia o el desarrollo del conocimiento. La supremacía de la que disfruta hoy el saber científico es, según él, injustificada.
Límites del Saber Científico-Técnico
El saber científico, aunque poderoso, está sujeto a diversas limitaciones intrínsecas y extrínsecas, que pueden ser conceptualizadas a través de las «idola» de Francis Bacon, adaptadas a la ciencia contemporánea:
Los Límites de la Tribu (Idola Tribus)
El saber científico está condicionado por nuestras capacidades cerebrales en interacción con el medio físico y social. La percepción humana y la cognición imponen límites inherentes a cómo podemos comprender la realidad. Por ejemplo, la tendencia a buscar confirmación en lugar de refutación es una limitación cognitiva.
Los Límites de la Caverna (Idola Specus)
Es ingenuo pensar que una persona puede desprenderse completamente de sus experiencias personales, prejuicios y formación individual al desarrollar su actividad profesional. Nadie puede lograr tal desapego. Un ejemplo notable es el debate entre Albert Einstein y Niels Bohr sobre el determinismo o indeterminismo en la física cuántica, donde sus visiones filosóficas influyeron en sus posturas científicas.
Los Límites de la Plaza Pública (Idola Fori)
El discurso científico, aunque busca la objetividad, también pretende convencer y obtener colaboración. Las formulaciones de problemas, explicaciones, hipótesis y teorías científicas constituyen discursos llenos de metáforas y retórica, cuya finalidad es persuadir sobre su validez. Joseph Gusfield, en su trabajo sobre la retórica, sostiene que los científicos, al igual que otros comunicadores, intentan convencer de la verdad de sus descubrimientos, utilizando estrategias persuasivas.
Los Límites del Teatro (Idola Theatri)
Estos límites se refieren a los sistemas filosóficos o dogmas que influyen en el pensamiento científico. Kuhn llama «paradigmas científicos» a esos marcos generales en los que se instalan los investigadores de cada época, y «revoluciones científicas» a los cambios de paradigma que ocurren periódicamente. Nada asegura que no se vaya a producir ninguna otra revolución científica, ni que el paradigma actual se vaya a mantener indefinidamente. Feyerabend, en línea con esta idea, defiende que la supremacía de la que disfruta hoy el saber científico es injustificada, sugiriendo que es solo uno de muchos «teatros» posibles para el conocimiento.
El Problema de la Inducción
El problema de la inducción se refiere a la cuestión de si es posible formar leyes generales (universalizaciones) a partir de observaciones particulares, y si las regularidades observadas en el pasado pueden garantizarse para el futuro.
- Crítica de David Hume: Hume argumentó que es imposible justificar lógicamente el paso de «algunos» a «todos», es decir, de observaciones particulares a leyes universales. Siempre existirán hechos que podrían desmentir una generalización. Su crítica se basa en que la inferencia inductiva no es justificable ni lógicamente ni por la experiencia, ya que asumir que el futuro será como el pasado es una suposición que no puede ser demostrada.
- Crítica de Karl Popper: Popper sostuvo que la inducción no es un proceso lógico válido, ya que es un concepto sintético (no analítico) y no puede garantizar la verdad de las conclusiones a partir de premisas particulares. En su lugar, propuso el falsacionismo como método para el avance científico.
Cosmovisiones: Entendiendo el Universo
El término «cosmo» significa orden o arreglo. Las cosmovisiones son los marcos conceptuales a través de los cuales una cultura o individuo interpreta la totalidad de la existencia.
- Cosmología: Es el discurso o estudio del universo en su totalidad, incluyendo su estructura, origen y evolución.
- Cosmogonía: Se refiere a las tradiciones prefilosóficas y precientíficas, a menudo en forma de mitos, que pretenden dar respuesta al origen del universo y de la propia humanidad.
Históricamente, se pueden identificar tres grandes cosmovisiones dominantes:
- Cosmovisión Antigua: Caracterizada por una visión teológica y naturalista, con el universo aristotélico-ptolemaico como modelo central, donde la Tierra es el centro y los cuerpos celestes se mueven en esferas perfectas.
- Cosmovisión Moderna: Surge con la revolución científica, adoptando una visión mecanicista y físico-matemática. La naturaleza es concebida como un gran mecanismo cuyas leyes están «escritas en lenguaje matemático» (Galileo).
- Cosmovisión Contemporánea: Marcada por nuevos paradigmas como la teoría de la relatividad, la mecánica cuántica, la teoría del Big Bang (que describe el origen del macrouniverso) y el universo termodinámico, que incorpora conceptos como la teoría del caos y la entropía.
Naturaleza del Conocimiento Científico
El conocimiento científico, lejos de ser un espejo objetivo de la realidad, es una construcción humana. Los científicos, como seres humanos, poseen sus propias creencias, intereses y sesgos. La idea de que el conocimiento científico era ajeno a la retórica es falsa; las hipótesis científicas a menudo están plagadas de metáforas, y el fin de una teoría científica es, en parte, persuadir a la comunidad. Además, el científico no está libre de intereses y, a menudo, sirve a quienes lo financian. Es, por tanto, falso aquello que se dice de que la teoría científica es un espejo fiel de la realidad.
Corrientes Filosóficas sobre la Realidad
La filosofía ha propuesto diversas interpretaciones sobre la naturaleza de la realidad:
- Idea de Historia (Idealismo Histórico): Esta perspectiva, a menudo asociada con el idealismo hegeliano, postula que la historia es el desarrollo de una idea o espíritu universal. Las cosas materiales no son más que el reflejo de esta historia, sugiriendo que solo hay una realidad subyacente que se manifiesta a través del devenir histórico.
- Pluralismo: Sostiene que la realidad se compone de varias sustancias o principios fundamentales, que pueden ser Dios, el alma, el pensamiento, la materia, etc. Un ejemplo clásico es el dualismo cartesiano (mente y cuerpo).
- Materialismo: Afirma que la realidad fundamental es la materia y sus interacciones. Desde una perspectiva social, el materialismo histórico (Marx) postula que el ser social (las condiciones materiales de existencia) es lo que determina la conciencia, y que el «ser» es el conjunto de las relaciones sociales.
- Idealismo: Postula que la realidad fundamental es de naturaleza mental o espiritual. Lo real es aquello que puede concebirse sin contradicción y de una forma clara y distinta (como en el racionalismo de Descartes).
Teoría de la Ciencia
La Teoría de la Ciencia es una disciplina que estudia el funcionamiento y desarrollo de la ciencia, la estructura y la dinámica del conocimiento científico y de la actividad científica, así como la interacción de la ciencia con otras instituciones sociales y esferas de la vida material y espiritual de la sociedad. La finalidad de la teoría de la ciencia consiste en elaborar una interpretación teórica de la ciencia y determinar los modos y criterios de su participación racional en la vida y desarrollo de la sociedad.
Teoría del Caos
La Teoría del Caos es una rama de las matemáticas y la física que estudia sistemas dinámicos complejos y no lineales, caracterizados por una extrema sensibilidad a las condiciones iniciales (el «efecto mariposa»). Aunque a menudo se asocia con la termodinámica (entropía), su esencia radica en describir sistemas que, aunque deterministas, exhiben un comportamiento impredecible a largo plazo. Requiere de:
- Complejidad: Sistemas con múltiples componentes interconectados.
- Indeterminismo (aparente): Comportamiento impredecible a pesar de reglas deterministas.
- Tiempo: La evolución del sistema a lo largo del tiempo es crucial para observar el comportamiento caótico.