La Segunda Vía de Tomás de Aquino: La Causa Eficiente
Identificación del Problema Filosófico
El texto aborda la cuestión de si es posible demostrar la existencia de Dios a partir del estudio de la causalidad eficiente en el mundo.
Exposición de las Ideas
Tomás de Aquino plantea que en el mundo hay un orden de causas eficientes, es decir, causas que producen efectos. Ninguna cosa puede ser causa eficiente de sí misma, ya que esto implicaría que algo sería anterior a sí mismo, lo cual es imposible. Además, en el ámbito de las causas eficientes no se puede proceder indefinidamente, ya que siempre hay una relación de dependencia entre las causas: la primera causa genera una intermedia, y esta intermedia, a su vez, produce una última.
Si se elimina la primera causa, también desaparecen los efectos posteriores. Aquino argumenta que, si el proceso de causas fuera infinito, no habría una primera causa eficiente y, por lo tanto, no existirían ni las causas intermedias ni los efectos. Este proceder al infinito es considerado absurdo, ya que en la realidad percibimos efectos y causas intermedias, lo que implica la necesidad de una primera causa. Concluye que debe haber una causa eficiente primera que inicie este orden de causalidad, a la que todos llaman Dios.
Situación de la Problemática
El argumento de la causa eficiente es una herencia directa del pensamiento de Aristóteles, y es clave en la síntesis que Aquino realiza entre razón y fe. Utiliza este argumento racional para mostrar que la existencia de Dios puede ser demostrada filosóficamente, y no solo por la fe, algo que fue crucial en ese momento.
Aclaración del Sentido de un Término: Causa Eficiente
La causa eficiente es aquello que produce un efecto o causa un cambio en algo. En la filosofía de Tomás de Aquino, es un concepto central para explicar cómo las cosas se generan o cambian en el mundo. Toda causa eficiente depende de otra anterior, y se requiere una causa eficiente primera que dé origen a todas las demás.
La Tercera Vía de Tomás de Aquino: Contingencia y Necesidad
Identificación del Problema Filosófico
El problema filosófico que plantea Tomás de Aquino en este texto es la existencia de un ser absolutamente necesario.
Exposición de las Ideas
Tomás de Aquino comienza su demostración observando que en el mundo encontramos seres que pueden existir o no, lo que significa que son contingentes. Estos seres pueden ser generados o destruidos y, por tanto, es posible que no existan en algún momento.
Si todo lo que existe fuese contingente, es decir, si todo tuviera la posibilidad de no existir, entonces, en algún momento en el pasado no habría existido nada. Si ese fuera el caso, tampoco existiría nada ahora, porque algo que no existe no puede comenzar a existir sin que haya algo previo que lo cause. Sin embargo, esto es falso, ya que claramente hay cosas que existen. Por tanto, no todos los seres son contingentes.
Debe haber, entonces, un ser necesario, cuya existencia no dependa de algo externo y que siempre haya existido. Este ser necesario no puede encontrar su necesidad en otro, porque esto implicaría una regresión infinita, lo que es imposible, como ya demostró en la Segunda Vía sobre las causas eficientes. Concluye que debe existir un ser absolutamente necesario, que no solo existe por sí mismo, sino que también es la causa de la existencia de los demás seres necesarios. Este ser es Dios.
Situación de la Problemática
Este texto, la Tercera Vía de Tomás, muestra con claridad la herencia aristotélica tomista en su esfuerzo por resolver las tensiones entre razón y fe propias de la escolástica hasta la fecha. Aquino intenta demostrar que la existencia de Dios puede ser deducida racionalmente a partir de la observación del mundo y la lógica de los seres contingentes y necesarios.
Aclaración del Sentido de un Término: Ser Necesario
Un ser necesario es aquel que no puede no existir, es decir, no depende de ningún otro ser. Es contrapuesto a los seres contingentes, que pueden existir o no. Este ser necesario es identificado con Dios.