2-La libertad, fundamento de la moral.
En esas situaciones extremas, bajo una fuerte coacción externa, está claro que no somos
libres. Si no eres libre, entonces no eres responsable de tus acciones.
Pero, por eso mismo, si eres libre, entonces sí eres responsable de tus acciones. Libertad y
responsabilidad van unidas, no pueden separarse. Por eso, debemos cargar con las
consecuencias de nuestras acciones. ¿Qué ocurriría, en términos generales, si los seres humanos
fuésemos como autómatas, como robots programados que tienen que actuar siguiendo las
directrices de un programa? Si no fuéramos libres, nuestras acciones serían
mecánicas, inevitables. En consecuencia: la responsabilidad emana de nuestra libertad. No
podríamos decidir, y por lo tanto, no seríamos responsables de nuestras acciones. Está claro
que, si no fuésemos libres, no se nos podría pedir cuentas por nuestras acciones. Hemos
hablado de la libertad como condición previa de toda decisión ética.
En conclusión: la dimensión ética y moral de las personas se fundamenta en el
presupuesto de que somos libres para decidir qué hacemos y, por lo tanto,
responsables de nuestras acciones.
3- Diferencia entre ética y moral.
Hasta ahora, hemos hablado de «ética» y «moral» como si fueran sinónimos. Sin
embargo, ahora es preciso que profundicemos un poco más y que distingamos entre ética y
moral. Esa es una norma «moral», es decir, una norma que guía mis acciones desde el punto de
vista de lo que está bien y lo que está mal.
Así, definiremos la moral como el conjunto de normas desde las cuales tomamos nuestras
decisiones respecto a lo que está bien y lo que está mal. Si soy cristiano, tengo a mi mano una
moral que nos orienta. Si soy deportista, un código moral me acompaña. Y nuestra norma moral
nos dice que siempre debemos decir la verdad.
Así, definiremos la ética como la reflexión acerca de las reglas morales, su fundamento, su
sentido, su validez y sus posibles excepciones.
La ética y la moral se diferencian en que: La moral es el conjunto de las normas morales,
y la ética se refiere a la reflexión acerca de las normas morales.
La moral se refiere a nuestras costumbres, mientras que la ética es una rama teórica
de la filosofía.
4-Diferencia entre moral como estructura y moral como contenido.
Cada vez que decides, das un paso en determinada dirección, y así, poco a poco, te forjas un
carácter moral, vas adquiriendo un perfil ético.
Así, la moral, lejos de tratar de una serie de
normas, es un quehacer, una tarea, una tarea inevitable para el ser humano. Por eso
decimos que la persona es estructuralmente moral.
Nos estamos refiriendo a la famosa distinción entre moral como contenido y moral
como estructura, formulada por un famoso filósofo español, José Luis L. Para
Aranguren, la moral, entendida como contenido, es algo así como un compendio de
normas, como las normas de tráfico, o las normas de cortesía, lo cual no nos da una
idea de la importancia de la moral para el ser humano. Para darnos una idea de la
importancia de la moral en la vida humana debemos entenderla como estructura, es
decir, debemos darnos cuenta de que nos vamos haciendo a nosotros mismos desde
nuestras decisiones. Si, por ejemplo, decidimos una vez ser sobrios, y repetimos esa
decisión, adquirimos el hábito de la sobriedad, y ese hábito pasa a formar parte de
nuestro carácter.
Así, la moral es más que un compendio de normas: es una tarea, pero no una
tarea cualquiera. Es la tarea de construir nuestras vidas.
5-Autonomía y heteronomía moral.
Si tomas tus propias decisiones éticas basándote en tus criterios de forma
autónoma, podríamos decir que gozas de autonomía moral. Por el contrario, la persona
heterónoma no toma sus propias decisiones. Actúa de conformidad con la autoridad, o con lo
que dice la mayoría.
No es por lo tanto un sujeto libre y racional que sigue sus propias normas. Quizás te parezca
que esta cuestión no es importante, y que lo importante es que se respeten las normas para
garantizar así el orden social y la buena convivencia. Sin embargo, te aseguro que no es así, y
que esta cuestión es mucho más importante de lo que parece. El individuo autónomo es menos
proclive a obedecer las órdenes sin buenas razones que lo justifiquen.
En conclusión, ¿qué son la heteronomía y la autonomía? Desde el punto de vista de las
normas morales, la heteronomía es la situación en la que el individuo no se da a sí
mismo las normas, sino que las recibe de una autoridad exterior (los padres, en el
caso del niño, la sociedad, el poder religioso, político o militar…).
La autonomía es el otro polo del desarrollo moral del individuo. Tiene lugar cuando
es el individuo quien, tras un proceso de reflexión racional, se da a sí mismo las
normas.
6-Los estadios del desarrollo moral.
Pero su desarrollo natural le irá llevando poco a poco a la autonomía moral. Te
voy a proponer, para empezar, el famoso dilema de Heinz propuesto por el
psicólogo Lawrence Kohlberg. Kohlberg estudió el desarrollo del razonamiento
moral en las personas, basándose en los estudios previos de otro gran
psicólogo evolutivo, Jean Piaget.
Como ves, una misma situación puede ser enfocada desde diferentes puntos
de vista, y cada punto de vista es propio de cada uno de los estadios o etapas
del desarrollo moral. Como es obvio, el miedo al castigo es una motivación
inmadura, propia de los niños, mientras que actuar conforme a unos principios
éticos universales es una opción moral más madura.
Kohlberg postuló la existencia de tres niveles: preconvencional, convencional y post-convencional, y seis etapas (dos por cada
nivel).
Veamos los diferentes niveles y etapas de Kohlberg, con sus
carácterísticas:
Nivel 1. La conducta moral está ego centrada, y se rige por criterios
pragmáticos. Niño no tiene conciencia de pertenencia a un grupo social.
Estadio 1. La moral es totalmente heterónoma y depende una figura de
autoridad que dicte las normas y las sanciones. Se obedece por miedo al
castigo o deseo de la recompensa. Predomina el egocentrismo.
Estadio 2. Surge ya una difusa conciencia de los
intereses del otro, pero siempre dominada por los propios intereses. El
niño es capaz ya de establecer, por ejemplo, turnos para realizar actividades,
pero lo hace siempre dominado por sus propios intereses, y no por un sentido
superior de la justicia. Aparece la reciprocidad.
Nivel II. Surge el sentimiento de pertenencia a un grupo, cuyas normas se
asumen como indiscutibles.
Estadio 3. La conformidad con el grupo es la principal motivación para cumplir
y acatar las normas. Se busca, con ello, la gratificación afectiva.
Estadio4.Aparece una conciencia de la necesidad de
normas morales para el grupo, normas que se acatan
rígidamente. También aparece una conciencia de la necesidad de ley y
orden.
Nivel III. Aquí aparece la autonomía moral: el individuo se da a sí
mismo las normas guiándose por criterios racionales. Aparece la plena c
onciencia de la
diversidad individual, de la conciencia ajena, de los intereses del otro, y
la capacidad de ponerse en su lugar.
Estadio 5. Aparece un sentido moral basado en la idea de los derechos
humanos, de la justicia como ideal,…
Estadio 6. Aparecen los principios éticos universales, basados en criterios de
carácter formal, en el respeto a la dignidad de las personas.
7- Ética materialista vs formal
Las éticas materiales son aquellas que, en general, nos dicen qué debemos
hacer para alcanzar el bien, para ser buenos. Es decir, son éticas de
contenidos, éticas que prescriben una serie de normas acerca de lo que
debemos hacer si queremos obtener un fin ulterior. Por consiguiente, son
éticas que condicionan las reglas o normas a los objetivos perseguidos. Las
éticas formales no nos dicen qué debemos hacer, sino cómo deben ser
nuestras normas.
Por eso, las éticas formales son autónomas, es decir, no dependen de ninguna
autoridad, sino que es el sujeto el que se da a sí mismo sus propias normas
racionalmente, no movido por deseos o pasiones. También podemos decir que
las éticas formales, al no depender de las carácterísticas y deseos de las
personas, son universales, es decir, válidas para todos y en cualquier
circunstancia.
La ética formal kantiana se expresa mediante el imperativo categórico,
que es una norma formal que expresa de forma pura el deber ético.
8. La teoría axiológica de los valores (Max Scheler)
Lo que es valioso nos es preciado, guía y orienta nuestra conducta. No
podemos hablar de valores en abstracto, sin tener en cuenta la capacidad de
eso que es valioso para movilizarnos, para despertar nuestro interés. Si
decimos que la «verdad» es un valor para nosotros pero luego no demostramos
interés, no buscamos la verdad, entonces es pura palabrería hablar del valor de
la verdad
Pues bien: según algunos filósofos, lo moral tiene que ver conciertos valores.
Por ejemplo, una norma moral como «hay que decir siempre la verdad» emana
de un valor, de la «verdad» como algo que es valioso para nosotros. La
“axiología” es el estudio de los valores, tanto los morales, como los estéticos.
Así, la teoría ética de los valores, o axiología, expuesta y defendida por
Max Scheler, principal exponente de esta corriente, los valores son
cualidades que poseen ciertos objetos o acciones, en virtud de las cuales
esas acciones u objetos son deseables moralmente.
9- El emotivismo moral
Otros hechos, por ejemplo que alguien dé su vida por ayudar a otros, o una
muestra de amor y amistad, o de valor ante la adversidad, por ejemplo el
heroísmo de alguien que se juega a vida para ayudar a otros en un accidente,
nos conmueven y despiertan en nosotros una reacción de aprecio y
beneplácito.
Esas reacciones son espontáneas, en algunos casos, y fruto de la educación y
la costumbre, en otros. Pues bien: según ciertos autores, entre los cuales el
más importante es David Hume, la ética no es más que el resultado de
llamar «bueno» a aquello que nos produce una reacción emocional
agradable, y «malo» a aquello que nos produce una reacción emocional
desagradable.
A esta teoría que vincula y explica la ética y las normas morales con
sentimientos y reacciones de carácter emocional, se la ha llamado
«emotivismo», defendida sobre todo por David Hume.
10- El sociologismo moral
Basándose en este hecho, surgíó el sociologismo moral. Para Durkheim, uno
de los fundadores de la moderna sociología, el ser humano recibe de la
sociedad en la que vive un sistema de valores y normas morales. La
sociedad impone al individuo estos valores, por lo que el papel de la
persona es puramente pasivo. Además, las normas morales tienen como
sentido último el cohesionar a la sociedad.
La fuerza moral de dichas normas procedería, en última instancia, de la presión
social, siendo sancionadas las conductas inapropiadas, que se salen del marco
de lo que esa sociedad o cultura considera como aceptable. El sociologismo
niega, pues, la libre capacidad de los individuos para asumir sus propias
normas y para cambiarlas, o para actuaren contra de la presión social cuando
ésta va en contra de las propias normas morales. En definitiva, el sociologismo
supone una negación de la autonomía moral de los individuos, considerándolos
meros receptores pasivos de las presiones e influencias sociales. Al cotillear
nos sentimos integrados dentro del grupo, identificados con las
normas, «buenas personas».
11.- El relativismo moral vs universalismo moral
En función de los datos que poseemos, es evidente que los valores, normas y
costumbres parecen cambiar según las épocas, culturas y grupos. Nos
hallamos, por tanto, en una clara disyuntiva:
Aquellos que niegan la posibilidad de hallar unos valores
compartidos. Es el caso de las siguientes corrientes filosóficas:
1. Relativismo moral. Se inició con los Sofistas en el s.V.A.C. El
relativismo hoy está presente en las siguientes posiciones:
etnocentrismo, contextualismo o relativismo cultural. El relativismo niega
la existencia de verdades absolutas en torno a existencia del bien y del
mal, piensa que estas limitan la libertad. Lo que está bien y lo que está
mal, lo que es correcto e incorrecto, depende de cada raza, ideología,
cultura, época, clase o situación particular. No niega que pueda haber
valores comunes para varias culturas, pero sí que exista un código ético.
2. Escepticismo. El principal representante es Pirrón, s. III a.C. No se
puede distinguir racionalmente entre justo e injusto, bueno y malo.
3. Subjetivismo. Defiende que cuestiones morales son subjetivas.
Aceptamos los valores como acto de fe, imposible convencer racionalmente a nadie.
4. Emotivismo. Postura defendida por Empirismo s. XVIII, Hume. La maldad
o bondad de un acto depende del sentimiento y emociones, no pq la razón nos
lo muestre. Los enunciados morales muestran lo que siente el que habla.
Es evidente que estas posturas tienen puntos débiles:
No dan cuenta del significado de algunos términos morales: la justicia.
Son incapaces de explicar hecho de argumentemos sobre cuestiones morales.
Por su parte, el universalismo ético: debe haber una ética universal y válida
para todos, justificada y verdadera, con principios y normas morales que
puedan ser reconocidos por todos, en cualquier situación, época y cultura.
Debe haber una naturaleza humana común, y dentro de esa naturaleza
humana debe haber una «tendencia natural» a la ética.
12- Ética de máximos y mínimos
La regla de oro, Norman Rockwell (1961)
“Quiere para los demás lo que querrías para ti mismo”
OBJETIVO
El entendimiento colectivo y alcanzar la posibilidad de un mundo más humano
y feliz
El compromiso por una sociedad global, la construcción de una ética de
mínimos pública o ciudadana, y virtuosa.
ÉTICA DE MÁXIMOS
Los máximos son ideales de vida buena, excelencia y virtud que cada uno
considera mejores, pero que no se puede aplicar a todo el mundo ya que no
compartimos valores. No son universalizables esos ideales, por ser subjetivos
y parciales.
ÉTICA DE MÍNIMOS
Conjunto de principios que se basan en el ideal de justicia y que aspiran a la
universalidad. Incluye un conjunto de mínimos exigibles a todo ser racional
desde la imparcialidad. Para ello hay que determinar los elementos básicos en
los que estemos de acuerdo la mayor parte de las personas.
LA REGLA DE ORO
Confucionismo: <Lo que no desees para ti, no se lo hagas a otros>.
Cristianismo: <Lo que queráis que os hagan los hombres, hacédselo a ellos”.
Budismo: <Lo que no es adecuado para mí o no me es grato tampoco ha de
serlo para él; lo que no es adecuado para mí o no me es grato.>
Hinduismo: <no debe comportarse con otros en una forma que hacia uno
mismo es inadecuada: esencia de la moral>
Islam: <Nadie es un fiel si no desea a su hermano lo que desea para sí mismo>
ORIENTACIONES PARA UNA ÉTICA DE Mínimos
Los conflictos deben resolverse sin violencia.
Las minorías necesitan protección y estímulo.
No hay derecho a robar tampoco a usar la propiedad sin atender a
necesidades de la humanidad y tierra.
No hay paz mundial sin justicia mundial.
El patriarcado es obsoleto: la relación entre mujer y varón es de
compañerismo.
Los medios de comunicación, el arte y la ciencia, políticos y representantes
de las religiones están comprometidos con una cultura de la veracidad.
13- Retos para la ética actual
Cada sociedad impone sobre las personas un marco y unos problemas
existenciales específicos.
Nuestra sociedad global también lo hace así. El mundo ha cambiado, y los
problemas a los que nos enfrentamos son en buena parte nuevos… Veamos
cuáles son esos problemas y algunas de las posibles respuestas a los mismos.
Nuestra época presenta retos insólitos para la reflexión ética. Quizás no en
cuanto al fondo pero sí en cuanto a la forma, es decir, en lo que atañe a su
peculiaridad, a su alcance, importancia y gravedad.
Es importante que dispongas de criterios éticos adecuados para responder con
libertad y responsabilidad ante estos problemas
-Uno de los grandes campos de nuevos problemas éticos procede de la
biología y sus espectaculares avances, sobre todo en el campo de la genética.
De aquí ha surgido la bioética. La bioética es una rama de la ética que se
aplica a los problemas derivados de las nuevas tecnologías y potencialidades
de la biología moderna, en particular los derivados de la genética.
-El problema de la manipulación genética y los productos transgénicos y del
problema de la clonación. Ambos son problemas debatidos en la actualidad,
por sus implicaciones éticas, para salud y para el medio ambiente.
La manipulación genética consiste en manipular genes de personas con el fin
de mejorar el funcionamiento de las células, en el caso de que dichos genes se
consideren la causa de alguna dolencia. Punto de vista ético, este tipo de
terapias genéticas no plantean problemas. Más problemas puede producir el
uso de productos transgénicos en agricultura o ganadería, con fin de mejorar
cosechas o aumentar producción. Estos productos transgénicos pueden
acarrear problemas para la salud o el medio ambiente.
La clonación consiste en insertar el genoma de una persona en una célula
reproductiva femenina con el fin de crear una copia genética de dicho adulto.
Esta práctica está prohibida, pero el uso de embriones clonados con fines
terapéuticos está siendo ampliamente debatido en diversos sectores.
-La eutanasia, significa “buena muerte”, y se trata de una práctica encaminada
a proporcionar a las personas que lo demandan una muerte digna. Se suelen
distinguir dos tipos:
Eutanasia activa, ponen de acuerdo para dar una droga que cause la muerte
en situaciones de enfermedad terminal, o grave deterioro de la calidad de vida.
Eutanasia pasiva, médicos y familiares de un enfermo, generalmente en coma
irreversible, deciden desconectar los aparatos que lo mantienen con vida
-La ecología es la rama de la biología que estudia las relaciones de
interdependencia entre los seres vivos y su entorno.
Contaminación, desertización, cambio climático. La reflexión ética ha de
enfrentarse a estos desafíos proponiendo criterios y principios desde los cuales
guiar nuestra conducta.
-Un dilema ético es una narración breve en la que se plantea una situación
problemática que presenta un conflicto de valores, ya que el problema ético
que expone tiene varias soluciones posibles que entran en conflicto unas con
otra
Principales retos en materia social que tienen planteados las sociedades
modernas:
a) Minorías
La discriminación de las minorías es uno de estos retos. Habrás oído hablar de
la «discriminación positiva», con la que se intenta acabar con el lastre histórico
de la pobreza y la marginación.
b) Homofobia
Es odio, miedo o discriminación contra hombres o mujeres homosexuales, o
con tendencias sexuales diferentes. Esta forma de discriminación está muy
arraigada en nuestra cultura, va siendo poco a poco desterrada. Ley de
matrimonio homo intenta amparar derechos de personas con estas tendencias.
c) Derechos de los animales
Muchos animales son torturados salvajemente como forma de diversión. Se
escucha que reclaman la existencia de derechos de animales, con el fin de
evitar estos tratos. El filósofo Peter Singer es un pionero en esta reclamación.
-¿vale todo en la lucha contra el terrorismo? Muchas personas, indignadas ante
las acciones de los terroristas, piensan que sí, y piden el uso indiscriminado de
la fuerza para ese fin. Otros, aprovechando el clima de miedo e indignación de
la sociedad, que demanda más seguridad, recortan libertades y derechos
civiles, favorecíéndose a sí mismos y perpetuando sus propios privilegios.
Libertad y seguridad: binomio de moda. A más seguridad, menos libertad, y
viceversa. Pero, ¿es cierto? Para responder desde la ética, debemos averiguar
cuáles son las causas del terrorismo y, por lo tanto cuáles son los remedios.
Examinaremos esta cuestión, cuya importancia es crucial, y lo haremos
situándola en una perspectiva nueva: la de la globalización.
¿Qué es la globalización? Es un proceso fundamentalmente económico y
comercial, basado en la libre circulación, por todo el planeta, de bienes y
servicios, sobre todo de carácter financiero, y en la instantaneidad de las
comunicaciones. Ha supuesto un incremento de riqueza para muchas
empresas y bancos, pero hay que añadir que ha incidido en la vida de muchas
personas, destruyendo la de otras